La participación ciudadana alcanzaba en esos años unas cota4 superior que las del momento actual, sobre todo, con las Sociedades
Obreras que proliferaban en las aldeas y en el casco urbano. Batmala,
que había sido miembro de la Emancipación, fomentaba que
propusieran medidas para sus aldeas y gremios. En su tiempo, hay
constancia de recibir a la Sociedad Obrera de la Hortichuela,
encabezada por su directiva. Estos le proponía en el mes de mayo,
una escuela nueva, un cementerio, un cartero y el camino de conexión
con la carretera de Montefrío 4
Batmala acudía al Casino Republicano y Liberal, que ocupaba una de
sus casas del Llanillo frente al Palacio Abacial. Allí solía jugar
al tute con sus amigos Rosales, Bermúdez y Serrano. Fumaba
cuarterón y recibía y daba a todos lo que le solicitaban dinero en
forma de préstamo. Cerca se hallaba el Círculo “La Paz”, y,
más tarde, el de la Amistad. Las tabernas eran el lugar de
convivencia y ocio, y donde los patronos y obreros contrataban y
pagaban los jornales. A veces se excedían de su horario, y el nuevo
gobierno republicano trató de atajar con firmeza y multas estos
desajuste. No obstante, siempre se mostraban abiertos a las
alegaciones, como lo ponen de manifiesta tendiendo a las
justificaciones.
Al principio de la República, a un conflicto le venía otro. Si, en
abril y mayo, se levantaban los jornaleros; en junio eran los
albañiles, en octubre los funcionarios y en el intermedio los
panaderos y los consumidores protestaban porque no podían soportar
los precios impuestos por la autoridad. La gente se hacía eco en sus
canciones, que escuchaban en carnaval de la comparsa de traje de
punto:
Los panaderos antiguos
No juntaban ni una peseta,
sin embargo los de ahora
hacen casas y compran tierras.
Hacen los panes más chicos
También nos lo han subío.
Sin embargo, los de ahora
Y otros con menos motivos
En la cárcel los han metío.
Y es que en la República estaban puestas todas las esperanzas 55.
La democracia dichosa le redime
Al obrero que la tierra labra y cuida,
Regando con su frente aquellos frutos
Que del mundo entero es la vida.
Señores, es la madre venerada eternamente,
Bendecida por su hijo con ardor.
Si vivimos del trabajo, y nos lo oprimen,
Esa es la causa que perezca una nación.
No sólo fueron muestras de esperanza sino realidades plasmadas en
la legislación laboral, sobre todo, para las clases más deprimidas.
Pues, así lo manifestaba un joven jornalero de aquellos tiempo:
“Entonces se comía muy mal, nada más que migas y potaje. Y no
todo el que quería, por causa de no tener en las casas de los pobres
dinero para comprar comestibles, porque no se ganaba casi nada y
adonde había mucha familia, salían pidiendo fiado y yendo a los
cortijos a ver si te daban algo sobrado de comida. En algunos te
daban algo, pero en otros te decían “Perdona, por Dios”.Fue
,cuando entró la República, yo trabajaba en donde me avisaban,
hacía hoyos para olivos, trabajaba en los caminos vecinales. A los
mayores les dan cuatro pesetas y a los de catorce años, tres pesetas
y cincuenta céntimos”
4
AMAR. Acta del 11 de mayo de 1931.
5
Testimonio de Sixto León.
No hay comentarios:
Publicar un comentario