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martes, 26 de mayo de 2020

capítulo XIV.. HACIA LA TORRE DE LA CÁRCEL.





                        LAS CASAS DE LA JUSTICIA


 Por entre las Casas de Justicia y el palacio del Conde de Cabra, pasa la comitiva y se dirigen hacia la torre de la Cárcel. El primer edificio no es ni lo que era aquella mansión. Tampoco, se ubicó siempre en este lugar, que mantiene la bodega sin tinajas, algunos testigos de la parte alta, e, incluso, hubo un horno cercano. Las Casas del Corregidor, o de la Justicv, estuvieron en la Torre de la Imagen, en casonas señoriales y en algunas tiendas adosadas a la muralla del Gabán.  En 1581, se derrumbaron el lienzo de cerca, adarve y torres de la muralla del Gabán, y, se encontró la ciudad desasistida de un lugar para albergar la Casa de la Justicia y el aposento del corregidor. Y, sin posibilidad de restauración ni buscar casa alquilada, y con la amenaza de bajarse el juez fuera de la ciudad fortificada, de modo que se emprendió la posibilidad de buscar un solar para la nueva Casa de la Justicia.  Por la peste, se tomaron varias medidas de urgencia y el corregidor se fue de la “Torre de la Justicia” a la casa de Pedro Cano junto al monasterio de la Trinidad., cuyas casas se repararon .

-Pero, si el corregidor era de tres ciudades , ¿dónde vivía?-El corregidor lo era de Alcalá, Loja y Alhama y  tuvo su mansión en cada una de las ciudades del corregimiento, pero su sede oficial radicaba en la fortaleza de la Mota, durante los siglos XV, XVI y parte del siglo XVII.

-No comprendo esta autoridad-dijo el jeque.

- El corregidor era un personaje esencial para la ciudad, tanto o más que el abad. Pues, el primero está relacionado con el estamento civil, y el segundo con el religioso. Pero, aún más con el nudo umbilical con la Corona. Su papel fue fundamental, porque las ciudades ejercían una función importante, y esta por ser fronteriza, mucho más. Teniendo en cuenta que desde que decayó el poder del alcaide, en manos por cierto de familias nobiliarias, ellos jugaron el papel moderador y de conexión con el poder del Estado.

-Yo lo confundía con el alcaide. 

-El alcaide administraba la fortaleza, la parte militar, que fue decayendo, y se convirtió en un cargo casi honorífico. Pues, Alcalá estaba gobernada por varios bandos que ocupaban la mayoría de los cargos de la ciudad, con los que su autoridad colisionaba. En tiempos de los Reyes Católicos se vieron obligados a  crear este cargo en muchos lugares, para representar a la Corona, poner orden y moderar el cabildo. Pues, como contamos, no andaban siempre en paza y dieron lugar a que los vecinos llegaran a asesinar al corregidor Santa Cruz y fueran perseguidos los miembros del cabildo municipal.

-Y, ¿por que se trasladó a este lugar?-La Casa de la Torre del Gabán se hundió en 1583 y el corregidor se encontró sin vivienda en la Plaza de la ciudad fortificada y, a finales del siglo XVI el cabildo municipal consideraba que debía residir en ella alegando que se favorecía a la buena gobernación de los negocios, se encontraba cercana la cárcel y casas de cabildos, donde su autoridad debía ejercerse sin dilaciones.  Para paliar las circunstancias adversas de las Casas de la Torre del Gabán, se propuso un nuevo lugar dentro de la Plaza junto a la Cárcel Real. Eran las casas de doña María de Aranda, hija de Bernardo de Aranda, vecino del Castillo y se componían de la propia vivienda, tiendas y varios anexos que entraron en el trato con Sebastián de Magaña, también vecino de la villa, su tutor y curador. Estas eran " muy a propósito, porque desde allí se podrían encontrar la Justicia con mucha comodidad y se remediarían los dichos inconvenientes, las quales estaban apreciadas en seiscientos noventa ducados”. Estaban situadas entre la Cárcel Real y las casas de doña Isabel de Leiva y herederos de Gonzalo Monte en precio de seiscientos y noventa ducados que montaron doscientos cincuenta y ocho mil setecientos cincuenta y ocho maravedíes.  Junto a ella la casa del Toril y las caballerizas de la cárcel.Años más tarde, en torno al 1589 en dicho lugar al comprarse la casa de Leonor Méndez de Sotomayor, se construyó la Casa de la Justicia, lindando por la otra parte con la cárcel mencionada, las murallas y una calle que se dirigía a la plaza. Al principio intervinieron Alonso Martínez Izquierdo.
- No fueron muy bien las obras- comenta el asesor.

-Claro. En 1590, el maestro de obras Ambrosio de Vico vino a la ciudad para supervisar la restauración y cimentación de las torres y murallas del Gabán. Con ese motivo, su asesoramiento técnico provocó un cambio en la ejecución y dirección de la obra en curso de la Casa de la Justicia, porque contempló una gran deficiencia en la cimentación y levantamiento inclinado de las ligazones y trabazones de las paredes, proponiendo cimentarla y levantarla de nuevo ante una posible caída. Las obras de la Casa de la Justicia de la Plaza se labraban, con la traza errada, no había patio ni comodidad de aposento, ni se abrían ventanas a la plaza ni el ornato, por no tener perpiaños estaba desplomada y podía derrumbar antes de su finalización, lo más justo era que se le tasase la obra de Alonso Martín de Tudela. 

-¿Cómo se diseñaron?

-También fijó las trazas de las nuevas condiciones de la  obras:  dos piezas cuadradas, dos cuerpos,  con catorce tercias de ancho y alto y un terrado  de nueve tercias con una danza de arcos de cantería limpia , reformó la bodega quitando las paredes y la ensanchó hasta catorce tercias  y la puso a nivel para colocar la pesebrera y caballerizas,  y colocó una  pared limpia hacia el toril de todo largo hasta el altura que tenía  el tejado, porque con esto tenía altura de reparar las cámaras  y dividir lo que fuere menester para recámaras de las dichas piezas  y hazer escaleras por donde la ciudad ordenare  facerlas e un corredor de ocho pies de ancho en la segunda pieza para que desde  él se sirvan las piezas e recámaras y todo los dicho se a de enjarrar  y enlucir  y cavar y dividir los aposentos que fuere a voluntad de la ciudad de cómo sean los nuevos que aquí van señalados e para toda la dicha obra sola a de dar la ciudad madera, teja y clavazón. Un año después, de nuevo vino Ambrosio de Vico, maestro mayor de Granada, para ver obras del Gabán y casas de Justicia e informaron Pedro de Pineda Góngora y Francisco de Pineda Mesía, y se concedieron 500 ducados del Pósito para ellas en 1591.Tras las nuevas trazas de Ambrosio, en los últimos años Ginés Martínez de Aranda y Miguel de Bolívar fueron los maestros de cantería y tuvieron una gran participación, pues la obra duró hasta 1593. El primero propuso su ampliación por la parte de la casa de María de Leyva en 1590 y una nueva fachada con dos balcones y una baranda, flanqueados por los escudos reales y el de Alcalá. 

-Mucha histroria y documentos, resuma.

-Se sabe que era de dos pisos y, en su parte superior, tenía balcones exteriores y unos corredores y unos marmolillos. Tuvo, al principio, las dependencias básicas (cuartos de dormitorio en la parte superior, escalera grande, miradores que se orientaba a la muralla del Trabuquete del Aire, una cocina). Se le adosaron una cochera y unas caballerizas con sus pesebres de la misma forma que todavía pueden contemplarse en los cimientos de algunas casas de la Mota  ya muy avanzado el siglo XVII. Tenía una portada, a la plaza, con una puerta y, dos huecos que antecedían con un balcón de piedra que sustituyó a unos balcones  de madera teñidos de azul con algunos remates dorados con sus tejadillos y  a otro balcón de hierro en la segunda planta que ocupaba toda la delantera, según la traza; la escalera se  abría  por el cuadro principal  y se propuso  nueva escalera  o Escaleruela que  se ascendía por ella a los corredores y  era servidora  de los distintos aposentos; también se hacía con dos corredores en la parte alta o piso segundo y el cuarto principal quedó desjarretado porque no se hizo la construcción, según las trazas de Ambrosio de Vico, y estaban construidos los demás aposentos.  Al final de año quedaba muy poco por hacer y a punto de finalizar se enconntraban en el año siguiente.  Hasta 1597, no se acabaron los interiores ni quedó definitivamente acabada la Casa de la Justicia. Según un pleito muy interesante entre María de Aranda, hija de Bernardo de Aranda y el ayuntamiento de Alcalá la Real, en  este año se manifiesta que la casa quedó incompleta, porque Francisco de Leiva no quiso dar una parte de su casa para ampliación de la vivienda comprada.
-En 1598, se compraron las casas de Francisco de Leiva, porque se debían llevar importantes reformas en la Casa de la Justicia o del Corregidor. Aparecen en  un  epígrafe con el título “Reforma  de la casa del Corregidor” que se  ha de hacer una Escaleruela en las Casas de  la Justicia   y balcones  de piedra las ventanas,-  comenta un asesor- lo que fue una realidad tras  la compra de a casa de Leyva”[1]“La ciudad dixo que, quando se labró la Casa de la Justicia de esta ciudad por la consideraciones y causas tan importantes del servicio de Su Majestad y bien de esta república, como se contiene en los dichos acuerdos, por entonces no fue posible dar escalera que convenía para el servicio de la dicha casa, por no querer Francisco de Leyva dar de la suya una parte, por donde sea de suvir a los dos corredores, con cuya traza se hizo. Por cuya causa, se echó la escalera por el cuarto principal  que tiene la dicha casa, con que se desjarretó y quedó sin suficiente acomodo los aposentos principales de ella;  y que ahora a entendido que el dicho Francisco de Leyva quiere  dar de la dicha su casa  lo necesario para la fábrica de la dicha escalera;  y ansi  acuerda que,  para quede  con el ornato  y comodidad  necesario,  se  le compre al dicho Francisco de Leyba  el sitio que fuere menester,  y se le pague de propios  de esta ciudad;  y se haga conforme a la dicha traza,  y se derribe la que está fecha. E otrosí que, por quanto esta ciudad tenía acordado se hiciese un balcón de hierro en las dichas casas, que tomase toda la delantera de ella, por el cual piden mil ducados, que esta ciudad no está ahora para tan gran gasto, acuerda ye manda se hagan unos valcones de madera teñidos de azul con algunos remates dorados con sus tejadillos que los cubran y para esta comisión y que lo haga hacer la ciudad nombra a Jusepe Gómez de Villalba e jurado Miguel de Utrilla”.
 -¿ Y el final?

-En 1600, la parte del solar de casa se destinó para cocina de la Casa de la Justicia y correderuela de la casa de Francisco de Leyva, (ascendió a la cantidad de 40 ducados); también se hicieron arreglos en la canalización de las aguas de los tejados para evitar que hundieran las casas colindantes. Por cierto, la cocina estaba en la parte alta de la Casa de Justicia y tenía un caño para despedir el agua e inmundicias y caía a la Plaza y calle Pública.Posteriormente, el resto de reformas fueron insignificantes como en 1611, se repararon la puerta, ensanche a mano izquierda, corredores, pasadizo y chimenea. Algo más significativa fue una de 1636, por un huracán del aire, porque se llevó a cabo una reforma de las Casas de La Justicia por el maestro de obras Miguel Sánchez Meléndez.

-¡Qué lástima, conociendo como se levantan las de Loja, estas se encuentran sin nada de lo que me ha expuesto, ni su mirador hacia la Carrera de Caballos.
- Claro, en 1699, el abandono de la Mota dio lugar a que el corregidor residiera en la parte llana. Cuatro años después,  con motivo de la llegada del corregidor Conde de Torrepalama, se hicieron varias obras en las Casas de Justicia. Para ello, se ordenó al maestro de albañilería, Juan García, que reconociera la situación de la casa, declarase las reparaciones e hiciese tasación.

-Debería ser desastroza su situación.

-Transcribo literalmente:  En la dicha ciudad de Alcalá la Real, en ocho día, mes y año, su mercede el señor don Juan Pacheco de Padilla, caballero de la Orden de Alcántara, corregidor de esta ciudad, para dar cumplimiento a lo contenido en el acuerdo de arriba hizo aparecer a Blas Magaña, maestro alarife  y vecino de ella y le tomó y rcivió juramento a Dios e Veracruz en lo que  el dixo y firmó a decir la verdad y presentado al tenor del dicho acuerdo, dixo que en compañía de los caballeros comisarios ha visto y reconocido Las Cassas de la Justicia que están en el sitio de la Mota, así quartos altos como bajos y que unos y otros están muy arruinados, como es notorio, que para componerse en forma  fuera menester gran suma de ducados y que para la averiguación que se pretende haga en ella  el correxidor  y está para benir halla por los más precisos reparos siguientes. Las puertas de las Caballerizas están caidas en el suelo por falta de marco necesitan de aderezos. El quarto vajo de mano izquierda está demolido de los suelos y quebradas las ventanas. La escalera principal necesita de demoler los tabiques que se están cayendo el hacer de nuevo y adereçar una yda que se está hundiendo, y la puerta que está en dicha escalera, por donde se sube a las cámaras necesita de marco nuevo. La Cocina Principal tiene de pared el testero donde carga la chimenea tienen necesidad de demoler y levantar de nuevo o reedificarla con todo cuidado. La chimenea francesa de la Sala están los tabiques flojos y necesitan de reparos, porque no se caygan en una de las ventanas que miran al Rastro. Todos los tejados de dicha cassa, por la fortaleza de los aires, necesitan a mil e quinientas tejas y había muchas goteras aderezar caballetes y echarles diez  vigas y echarles tijeras y lo que para toda la toda la dicha obra  son menester diez  cahices de hiesso  y así para  lo que toca a la albañilería como a carpintería, manifacturas y todos los gastos de puertas, sogas, clavos y agua que está por no aver en otra parte sino al pie , lo tasa todo en mil doscientos reales  ezepto cerraduras, llaves y lo demás por lo que serviría cura tasación hace s u leal saber entender que visto es la verdad se cargó de juramento y que es de edad de sesenta año y no firma por que no savía firmolo dicho corregidor doy fe y testigos”. En 22 de febrero de 1714, sufrieron el derrumbe de una gran parte de la Cárcel y Casas de Justicia y se vendieron sus materiales, rejas, piedra y maderas.

-Triste final. ¿Y el palacio musulmán?
-Nuestra historia es de muchos siglos, y ese palacio solo queda su nombre. Eso es otra historia. 








[1]      AMAR. Acta de 20 de octubre de 1598.



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