Archivo del blog

jueves, 17 de agosto de 2017

ANTES DE QUE SE LLAMARA MERCEDES

ANTES DE QUE SE LLAMARA MERCEDES Y  EN LA CAPILLA DE NUESTRA SEÑORA, DONDE SE CONSIGUE Y GANA EL SANTO JUBILEO



 Era frecuente que en los testamentos se llevaran a cabo mandas, memorias, fundaciones y aniversarios de misas para que las cumplieran sus descendientes. Con frecuencia, se muestran datos muy interesantes sobre la vida de las personas que testan. Y curiosamente, se vio nacer la advocación de Nuestra Señora de las Mercedes. En los ´últimos decenios del siglo XVI y primer decenio del siglo XVII, se frecuentan ofrecer misas por el alma de los fallecidos en el altar primero de la capilla del Evangelio de Santa de Santa María la Mayor de la Mota, capilla que tuvo varias denominaciones ( Santiago, Santa Catalina…). Antes de que se llamara Mercedes, muestra de los pasos para que aquella imagen de Nuestra Señora,  encontramos testamentos como este presentado ante Alonso Ordoñez en 29 de septiembre de 1601,  en el que Alonso Gutiérrez de Linares manifestaba sus deseos de que le dijeran la misa en esta capilla, que aparecía con estos textos:
  El día de mi entierro si pudiera , por la mañana,. Y, si no, otro día siguiente se diga una misa cantada de réquiem, sin ofrenda  respecto a mi pobreza, Y  EN LA CAPILLA DE NUESTRA SEÑORA, DONDE SE CONSIGUE Y GANA EL SANTO JUBILEO, una misa rezada, y digan misas todas los clérigos que se hallaren en mi enterramiento y lleven de limosna un real  y cuatro maravedíes por la cera…

Y digan por mi ánima  ocho misas rezadas de réquiem  y algunas en la dicha capilla y una misa se diga del Señor Santiago, y otra de San Jacinto cada una en su capilla.”

NO ES ESTE ES EL ÚNICO CASO QUE BARTOLOMÉ lÓPEZ DE GUELTE A FINALES DEL SIGLO XVI   MANDABA QUE SE LE DIJERAN MISAS EN LA CAPILLA DONDE SE CONSIGUE EL SANTO JUBILEO, TRES MISAS EN EL OFICIO DE NUESTRA SEÑORA Y OTRAS DOS EN LA SEÑORA SANTA ANA. 










               

Este vecino estaba casado en primeras nupcias con Catalina López, de la que tuvo por hijos Catalina López y Andrés Gutiérrez,  y, en segundas nupcias, con Mari López. Quería ser sepultado en la Iglesia Mayor de la Mota, y era cofrade del Santísimo Sacramento y Concepción, Santa Ana,  de Nuestra Señora de la Soledad, las cuales, junto con los beneficiados, obligaba a que le acompañaran en su entierro y misas de réquiem con cruces y ceras.  También cooperaba con el aceite de la iglesia. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario