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domingo, 31 de agosto de 2014

FIESTAS DE LA FUENTE DEL REY IV. Más apuntes sobre la


ALGUNOS APUNTES PARA LA HISTORIA DE LA CORONADA

 

 

EL SITIO DONDE  SE COLOCÓ LA PRIMERA  ERMITA  DE LA CORONADA Y EL BACHILLER CALVO

 

            Por el cabildo  del 19 de enero de 1532,  sabemos  el lugar donde se ubicó la ermita de la Coronada, porque pertenecía a una finca  del cura  y bachiller Calvo, a su vez párroco de Santo Domingo de Silos (por cierto hombre muy culto y  experto en lengua latina, tal como apreciamos en los textos de las partidas del Libro  II de la parroquia que regentó):

 

            “En este cabildo el dicho jurado Juan de Aranda  que vido lo que pedía  lo que pedía el bachiller Calvo, a la ciudad en el camino de la Pasada del molinillo de la Fuente del Rey e que le parece  que se puede facer lo que pide porque es cañada de ganados e se estrecha mucho el camino  e si concede la desecha e  se a quitado a la que va   entregado sobre ello”.

            Como se observa la tierra del cura Calvo se encontraba en un lugar de paso ( camino por donde se va de un sitio a otro), en este caso en dirección al único molino que  existía fuera del río de  Frailes, en el arroyo de la Fuente del Rey

           

LA COFRADÍA AUMENTA EN DEVOTOS QUE APORTAN BIENES PARA SU CULTO Y ERMITA

 

UN CENSO SOBRE UNA CASA DE LA CALLE UTRILLA

 

            En el  legajo segundo de la caja  32 del Archivo Municipal de Alcalá la Real, el vicario  Luis de Ortega   manifestaba que, en  1553, Sebastián Gallego y su mujer Ana Jiménez, pagaban un  censo de 5.000 maravedíes sobre unas casas de la calle Utrilla ( por este tiempo, la propiedad de este memoria  religiosa en beneficio de la Coronada a través del Hospital del Dulce  Nombre de Jesús  la tenía Enrique Díaz, sobrino de Feliz Díaz de Arjona) .Por problemas de solvencia económica, las pagó Miguel García de Monturque, y Gabriel Rufián.

 

OTRO CENSO SOBRE FANEGA Y MEDIA DE LAS CUEVAS DEL HUMILLADERO

 

            MAYORDOMO BARTOLOMÉ SÁNCHEZ NAVARRO

 

Por ele legajo cuarto de la caja  32 del mismo archivo, conocemos otro censo  de ocho de diciembre de 1562 sobre las siguientes propiedades:

-        fanega y media en el sitio de las Cuevas y Humilladero de la Tejuela, camino  de Charilla,

-        - aranzada y media de viña , linderas con las  viñas de Isabel Hernández, de la Iglesia mayor, dos caminos  y viña de Herederos de Antón Hernández..

-          .La pagaba  el barbero Miguel de Ibáñez, y después su hijo Sebastián; y en los últimos años Joan de la Rosa el Ciego, Manuel de Miranda..Pagan 680 maravedíes; se tenía la obligación de estas labores de viña: labrar, beneficiar, podar, arar, amugronar, decepar,  y cavar.

     - Pertenecía  la memoria a Joan Rodríguez de Medina e Isabel Rodríguez y se entregaba el dinero a la Cofradía y  al Hospital.

 

                        OTRO CENSO DE LOS ORTIZ Y DÍAZ DE ARJONA

 

            Del   5 de diciembre de 1564 ,  tenemos el  legajo  quinto de la caja 32, por la que se impone un  Censo a  Martín Hernández tintorero y su mujer Inés Gómez, a favor del  Hospital del Dulce Nombre de Jesús y con el valor de dar siete reales.  Por esta fecha los pagaba Joana de Burgos, viuda de Diego Ortiz; años más tarde  María de la Encarnación Moya, monja dominica;  y en fechas posteriores  Gabriel Martín   de la Tejuela. Y, ya en  siglo XVIII Manuel del Mármol, en concreto el  1754.

            Se cargaba sobre un haza de 7 celemines en el paraje de las Viñas Viejas (que estaban linderas con viñas de Juan de Mazuela, hondonada de Andrés Martínez de Alcalá, clérigo, y Juan de Aranda Guillén; vendidas primero a Felipe de Figueroa, y luego a Juan Díaz de Castillo).

            Pedro de Alcalá las trabajó en los primeros años ganando 4.380,  de renta  238 maravedíes, más el  censo de   7 reales: Años después pagaba la  viuda de Rodríguez de Alcaraz, que vivía  en una casa más arriba del mesón.

            Por las cláusulas del censo, se  expresa que iban destinadas a Nuestra Señora de la Coronada y se gravaban sobre esta tierra situado en el Olivillo del Ruedo junto al  Barrero, propiedad de  del doctor Alonso de Pereyra, vecino de Granada.

            Estas tierras fueron compradas por  Pedro González de Alcaraz en  1647.

 

 

OTRO CENSO DEL SIGLO XVII

 

            Con fecha de 28 de mayo de 1602, el Rector del hospital del Dulce Nombre de Jesús. Diego Martínez Izquierdo, clérigo  ante Licenciado Gutiérrez de Pineda,  y además  provisor, recibe el censo del licenciado Alonso de Molina y su mujer Juana Ramírez que  le entregaron gravado sobre un haza de siete fanegas en la Alfábila, linde con Pedro de Pineda  y don Fernán Hurtado  e camino de Martos al Castillo al Hospital ante el escribano Juan de Salcedo. Hipotecaron para ello  la casa de la calle Zacatín

 

HERMANOS MAYORES  DE LA COFRADÍA Y MAYORDOMOS DE HOSPITAL DEL SIGLO XVI

 

            Desde  2 de septiembre de 1557, el clérigo Felipe de Figueroa fue hermano mayor hasta 1564. Al final de su mandato, se nombró al regidor Pedro Serrano de Alcaraz, hermano mayor  nombrado por el vicario Luís de ortega para suplir a Figueroa, y como  mayordomo a Bartolomé Sánchez Navarro.

 

 

LA  VIRGEN DE LA CORONADA BAJA DE LA CAPILLA DEL HOSPITAL DE LA MOTA AL LLANILLO

 

            Muy interesante el legajo séptimo de la caja  33 del mismo archivo, donde se recoge un   traslado del cabildo del Hospital del Dulce Nombre de Jesús con fecha de  7 de julio de 1585. Presidía  Palacio, canónigo colegial de Alcalá de Henares  y  provisor y vicario Nicolás por el abad Maximiliano de Austria.  Fueron asistentes oficiales y hermanos de la cofradías, miembros  hospital del Dulce Nombre de Jesús y cofradía de la Caridad  que en el y de la Santa Veracruz de Alcalá la Real. A saber:

-Licenciado Bernabé Serrano beneficiado de la Iglesia Mayor.

-Francisco López, teniente de beneficiado y capellán

-Francisco de la Torre teniente de beneficiado de Santo Domingo.

-Andrés de Molina, sochantre de Santo Domingo.

-Juan de Trasierra y Gregorio de Vera, clérigos presbíteros capellanes  en la ermita de la Veracruz.

-Juan de Cueto mayordomo del Hospital  de l Dulce Nombre de Jesús y cofradía de la Santa Caridad.

-Andrés del Moral, prioste de la cofradía de la Santa Veracruz, Fernando de Carrión y Bartolomé de Capilla, alcaides.

-El licenciado Francisco de Bormar, Lorenzo de Alcalá, el licenciado García de Hermosilla, jurado miguel de arrulla, jurado pedro del Castillo, Pedro Sánchez de Espejo, Pedro del Corral el mozo, el licenciado Jerónimo de Torreblanca, Francisco Jiménez escribano, Francisco  Cabrera Aranda, el jurado Juan de Lábaro, Francisco Méndez, Luis de Ibáñez, Alonso Jiménez , y  los escribanos

Primero se había dado la petición  sobre el traslado del hospital de la Mota a la ermita de la Veracruz por los dos priostes al abad y este lo aprobó en 11 de julio de 1585. Ahora, en este cabildo tan interesante para conocer la ubicación de la imagen se sacan estas palabras sobre el traslado del hospital desde la Mota a la Veracruz

-“El hospital de enfermos, fue fundado por el provisor Diego Hernández, se encontraba en una parte yerma y muy fría y sin tener refrigerio. el que es necesario para los enfermos sin agua, sol y trato y comunicación de gente, escuro y dañoso  para la salud de lo cul se ha visto que han resultado muchos daños e inconvenientes padeciendo los dichos enfermos mucho detrimento  sin poder convalecer  ni ser favorecidos a el reparo de sus enfermedadesY continua el testimonio de los miembros de la junta  contadas las cosas importantes a que se mueren muchos con estas palabras ” se podría  solucionar con el traslado a la ermita y hospital de la Veracruz, m más ancho, más cómodo, más sol, más agua, está en el llano, y nueva población,  del lugar y en donde está todo el concurso de gente y tratos y pasaje, y está tan llano y tiene sitio donde poder librar los aposentos y las demás cosas donde estén los enfermos con mucho consuelo  y, es que,  de meterse el agua del remanente de la fuente de la Mora,   demás que hoy tiene un pozo muy caudaloso,  el tiene paso para los caminantes  y con las del ejido y con la alameda, que es el espacio que tiene la ciudad con más recreación,  y al tiempo de su edificación fue con nombre de Hospital Y  así lo ha tenido siempre”(…) y se señala que “tenga el nombre de  D.N.J y Santa Veracruz”. Además aprueban que  el día de la Cruz de Mayo se nombre mayordomo de  la nueva unificación de los dos hospitales, y además,  se designen un veedor y veinte cuatro asistentes a los que  se les asigna el oficio de  ver los enfermos mensualmente. Se recalca que se  mantenga  el gasto que  la cofradía  ha tenido hasta este momento. Y lo que es más interesante:

 

-“Que trasladado el dicho hospital, la imagen que tiene y la Cruz de la dicha cofradía de la Caridad se  ponga todo en un altar y capilla que dicha ermita  la cual altar o capilla tenga el nombre de la Caridad”.

            Acabado el cabildo los acuerdos  y las peticiones se trasladaron  al señor abad.

Se acometieron para hacer constituciones y capitulaciones al señor Bommar, Juan de Cueto y Francisco de la Torre y licenciado de la Torre.

-

 

“INFORMACIÓN  SOBRE LA CASA DONDE SE ALBERGABA LA VIRGEN DE LA CORONADA DENTRO DEL HOSPITAL”

 

            El  día 12. de julio de 1585, el  cura Gonzalo de Aranda Godoy clérigo y  presbítero beneficiado de la iglesia del Castillo dijo:

-

“El Hospital del DNJ ha ido muchas veces, es una casa muy estrecha, mal trazada,  para hospital,  que no da sol hasta metida en una rinconada de manera que no se tiene mucha  notación ni frecuentación  de la ella por estar atrás mismo de  ella y desviada de vecindad  y, por estar tan metida y arrinconada de  de invierno y de verano, no tiene sol e tiene muy poco claridad que cualquier conocedor está oscuro  y yermo de esta manera que tiene , está edificada la dicha casa  y hospital  que a los dichos enfermos,  que allí acuden, pocos pueden escapar con salud e, los que salen con ella, salen malsanos de suerte que los dichos enfermos que allí acuden conforme se les  se  acrecienta por ser casa melancólica y triste  y sin frecuentación  que tiene el hospital de la Santa Veracruz

 

 

 

La ermita y hospital de la Veracruz, por ser sitio , llano tener sol y agua, trato y paso de gente, más ancho, donde puede ser visitado por gente caritativa, pozo caudaloso, . y es tan cómodo que acudirá mucha gente de la ciudad y forasteros porque está junto a la alameda y los mesones  y todo el trato  y frecuentación de público , la mujeres acudían los viernes con mucho fervor  y caridad a dar regalos  menesterosas  para los convalecientes  y se pueden enterrar en un cementerio d l al  lado.

 

Andrés de Moral nos los sitúa por entre el Albaicín de la Mota:

 

“en una umbría debajo de unas peñas, que no le dan el sol e,  que muchos mueren en el dicho hospital. Tenía una sola enfermería pequeña y malsana, de veinte que entran mueren dieciocho; los techos muy bajos, sin entrada”.

 

Martín Cano, bachiller, dice:

 

“en parte yerma y desacomodada,  debajo de unas peñas e umbría, triste y sin sol e poca claridad y apartada del concurso e trato  de la gente, pues está en una rinconada y que, si no es acaso, no se puede dar con ella y la casa es estrecha y mal trazada de  dicho hospital de manera que los enfermos  mueren…”

 “Y está la dicha alameda  junto al camino real donde está el paso de toda la entrada y salida de los caminantes  e la mayor parte del lugar e la dicha  la dicha casa en llano e calle más principal e más frecuentada junto a los mesones e de ordinario está el mayor trato de la ciudad  y la casa muy frecuentada de ordinario por la devoción particular en los lugares tienen principalmente los viernes  acude mucha gente,  porque allí tiene indulgencias,  a que allí se consigue  estando los dichos visitadores a que la casa  e que siendo el hospital  e trasladado en el  santísimo,  ni. ser de mucha importancia  a los pobres e aquella ocurrieren serán visitado  de la gente caritativa  e regalados y limpiados de ella personas devotas y forasteros  e naturales devotos de la dicción

Pueden enterrarse  el bachiller Martín cano. Darán más limosna.”

 

                                                           EN EL SIGLO XVII

 

            Jacinto Sánchez de Navarra ocupaba el cargo de rector del Hospital  en medio de un  ambiente decadente de la cofradía por los años comprendidos entre  1647 y 1652.

 

 

                                   ALGUNAS NOTAS CURIOSAS EN EL SIGLO XIX

 

 

            Por la probanza de los bienes del abad  don Pedro de Moya, varios testigos declararon  sobre sus rentas en 1804. Ante el vicario Mateo Díaz de Castaño, el rector Juan Ramírez de Tordesillas contestó a  las siguientes preguntas.

 

-El hospital del Dulce nombre se fundó en 1580  y todavía  poseía memorias, censo, y bienes propios.

- Tenía como fin: el cuidado de enfermos y de los transeúntes

- Existía  otra  residencia para rector, sirvientes,  y los enfermos.

-Van pocos enfermos a curarse  por no tener mucho prestigio.

 

             Y lo que es más interesante  para la  historia de la cofradía

 

            “Dicho Hospital tiene anejo dentro de sus claustros la Iglesia de Nuestra Señora de la Caridad, en la que diariamente se celebra el sacrificio de la misa, par que los convalecientes la oigan desde su coro o sacristía, en cuyo templo se le da sepultura a los que fallecieren, gozando al mismo tiempo  el beneficio de confinar y estar contiguo de la iglesia de la Veracruz, coadjutriz de la parroquia de Santo Domingo de Silos  por la pronta administración de las sacramentos”.

 

 

            También, por el legajo primero de la caja  64, sabemos que,  en 1811, la hermandad de La Coronada todavía alquilaba una casa de la Fuente  del  Rey por  la cantidad de 13 reales a Manuel Escobar; también que la Coronada se hallaba en este paraje, porque en  1810 se arreglaron la s cerrajas de la ermita de  La Coronada y se pagaron a maestro Mateo Méndez 16 reales.

 

 

FRANCISO MARTIN ROSALES

-

FIESTAS DE LA CORONADA EN LA FUENTE REY IV.


ALGUNOS APUNTES PARA LA HISTORIA DE LA CORONADA


 
Torre de la Especería

 

EL SITIO DONDE  SE COLOCÓ LA PRIMERA  ERMITA  DE LA CORONADA Y EL BACHILLER CALVO

 

            Por el cabildo  del 19 de enero de 1532,  sabemos  el lugar donde se ubicó la ermita de la Coronada, porque pertenecía a una finca  del cura  y bachiller Calvo, a su vez párroco de Santo Domingo de Silos (por cierto hombre muy culto y  experto en lengua latina, tal como apreciamos en los textos de las partidas del Libro  II de la parroquia que regentó):

 

            “En este cabildo el dicho jurado Juan de Aranda  que vido lo que pedía  lo que pedía el bachiller Calvo, a la ciudad en el camino de la Pasada del molinillo de la Fuente del Rey e que le parece  que se puede facer lo que pide porque es cañada de ganados e se estrecha mucho el camino  e si concede la desecha e  se a quitado a la que va   entregado sobre ello”.

            Como se observa la tierra del cura Calvo se encontraba en un lugar de paso ( camino por donde se va de un sitio a otro), en este caso en dirección al único molino que  existía fuera del río de  Frailes, en el arroyo de la Fuente del Rey

           

LA COFRADÍA AUMENTA EN DEVOTOS QUE APORTAN BIENES PARA SU CULTO Y ERMITA

 

UN CENSO SOBRE UNA CASA DE LA CALLE UTRILLA

 

            En el  legajo segundo de la caja  32 del Archivo Municipal de Alcalá la Real, el vicario  Luis de Ortega   manifestaba que, en  1553, Sebastián Gallego y su mujer Ana Jiménez, pagaban un  censo de 5.000 maravedíes sobre unas casas de la calle Utrilla ( por este tiempo, la propiedad de este memoria  religiosa en beneficio de la Coronada a través del Hospital del Dulce  Nombre de Jesús  la tenía Enrique Díaz, sobrino de Feliz Díaz de Arjona) .Por problemas de solvencia económica, las pagó Miguel García de Monturque, y Gabriel Rufián.

 

OTRO CENSO SOBRE FANEGA Y MEDIA DE LAS CUEVAS DEL HUMILLADERO

 

            MAYORDOMO BARTOLOMÉ SÁNCHEZ NAVARRO

 

Por ele legajo cuarto de la caja  32 del mismo archivo, conocemos otro censo  de ocho de diciembre de 1562 sobre las siguientes propiedades:

-        fanega y media en el sitio de las Cuevas y Humilladero de la Tejuela, camino  de Charilla,

-        - aranzada y media de viña , linderas con las  viñas de Isabel Hernández, de la Iglesia mayor, dos caminos  y viña de Herederos de Antón Hernández..

-          .La pagaba  el barbero Miguel de Ibáñez, y después su hijo Sebastián; y en los últimos años Joan de la Rosa el Ciego, Manuel de Miranda..Pagan 680 maravedíes; se tenía la obligación de estas labores de viña: labrar, beneficiar, podar, arar, amugronar, decepar,  y cavar.

     - Pertenecía  la memoria a Joan Rodríguez de Medina e Isabel Rodríguez y se entregaba el dinero a la Cofradía y  al Hospital.

 

                        OTRO CENSO DE LOS ORTIZ Y DÍAZ DE ARJONA

 

            Del   5 de diciembre de 1564 ,  tenemos el  legajo  quinto de la caja 32, por la que se impone un  Censo a  Martín Hernández tintorero y su mujer Inés Gómez, a favor del  Hospital del Dulce Nombre de Jesús y con el valor de dar siete reales.  Por esta fecha los pagaba Joana de Burgos, viuda de Diego Ortiz; años más tarde  María de la Encarnación Moya, monja dominica;  y en fechas posteriores  Gabriel Martín   de la Tejuela. Y, ya en  siglo XVIII Manuel del Mármol, en concreto el  1754.

            Se cargaba sobre un haza de 7 celemines en el paraje de las Viñas Viejas (que estaban linderas con viñas de Juan de Mazuela, hondonada de Andrés Martínez de Alcalá, clérigo, y Juan de Aranda Guillén; vendidas primero a Felipe de Figueroa, y luego a Juan Díaz de Castillo).

            Pedro de Alcalá las trabajó en los primeros años ganando 4.380,  de renta  238 maravedíes, más el  censo de   7 reales: Años después pagaba la  viuda de Rodríguez de Alcaraz, que vivía  en una casa más arriba del mesón.

            Por las cláusulas del censo, se  expresa que iban destinadas a Nuestra Señora de la Coronada y se gravaban sobre esta tierra situado en el Olivillo del Ruedo junto al  Barrero, propiedad de  del doctor Alonso de Pereyra, vecino de Granada.

            Estas tierras fueron compradas por  Pedro González de Alcaraz en  1647.

 

 

OTRO CENSO DEL SIGLO XVII

 

            Con fecha de 28 de mayo de 1602, el Rector del hospital del Dulce Nombre de Jesús. Diego Martínez Izquierdo, clérigo  ante Licenciado Gutiérrez de Pineda,  y además  provisor, recibe el censo del licenciado Alonso de Molina y su mujer Juana Ramírez que  le entregaron gravado sobre un haza de siete fanegas en la Alfábila, linde con Pedro de Pineda  y don Fernán Hurtado  e camino de Martos al Castillo al Hospital ante el escribano Juan de Salcedo. Hipotecaron para ello  la casa de la calle Zacatín

 

HERMANOS MAYORES  DE LA COFRADÍA Y MAYORDOMOS DE HOSPITAL DEL SIGLO XVI

 

            Desde  2 de septiembre de 1557, el clérigo Felipe de Figueroa fue hermano mayor hasta 1564. Al final de su mandato, se nombró al regidor Pedro Serrano de Alcaraz, hermano mayor  nombrado por el vicario Luís de ortega para suplir a Figueroa, y como  mayordomo a Bartolomé Sánchez Navarro.

 

 

LA  VIRGEN DE LA CORONADA BAJA DE LA CAPILLA DEL HOSPITAL DE LA MOTA AL LLANILLO

 

            Muy interesante el legajo séptimo de la caja  33 del mismo archivo, donde se recoge un   traslado del cabildo del Hospital del Dulce Nombre de Jesús con fecha de  7 de julio de 1585. Presidía  Palacio, canónigo colegial de Alcalá de Henares  y  provisor y vicario Nicolás por el abad Maximiliano de Austria.  Fueron asistentes oficiales y hermanos de la cofradías, miembros  hospital del Dulce Nombre de Jesús y cofradía de la Caridad  que en el y de la Santa Veracruz de Alcalá la Real. A saber:

-Licenciado Bernabé Serrano beneficiado de la Iglesia Mayor.

-Francisco López, teniente de beneficiado y capellán

-Francisco de la Torre teniente de beneficiado de Santo Domingo.

-Andrés de Molina, sochantre de Santo Domingo.

-Juan de Trasierra y Gregorio de Vera, clérigos presbíteros capellanes  en la ermita de la Veracruz.

-Juan de Cueto mayordomo del Hospital  de l Dulce Nombre de Jesús y cofradía de la Santa Caridad.

-Andrés del Moral, prioste de la cofradía de la Santa Veracruz, Fernando de Carrión y Bartolomé de Capilla, alcaides.

-El licenciado Francisco de Bormar, Lorenzo de Alcalá, el licenciado García de Hermosilla, jurado miguel de arrulla, jurado pedro del Castillo, Pedro Sánchez de Espejo, Pedro del Corral el mozo, el licenciado Jerónimo de Torreblanca, Francisco Jiménez escribano, Francisco  Cabrera Aranda, el jurado Juan de Lábaro, Francisco Méndez, Luis de Ibáñez, Alonso Jiménez , y  los escribanos

Primero se había dado la petición  sobre el traslado del hospital de la Mota a la ermita de la Veracruz por los dos priostes al abad y este lo aprobó en 11 de julio de 1585. Ahora, en este cabildo tan interesante para conocer la ubicación de la imagen se sacan estas palabras sobre el traslado del hospital desde la Mota a la Veracruz

-“El hospital de enfermos, fue fundado por el provisor Diego Hernández, se encontraba en una parte yerma y muy fría y sin tener refrigerio. el que es necesario para los enfermos sin agua, sol y trato y comunicación de gente, escuro y dañoso  para la salud de lo cul se ha visto que han resultado muchos daños e inconvenientes padeciendo los dichos enfermos mucho detrimento  sin poder convalecer  ni ser favorecidos a el reparo de sus enfermedadesY continua el testimonio de los miembros de la junta  contadas las cosas importantes a que se mueren muchos con estas palabras ” se podría  solucionar con el traslado a la ermita y hospital de la Veracruz, m más ancho, más cómodo, más sol, más agua, está en el llano, y nueva población,  del lugar y en donde está todo el concurso de gente y tratos y pasaje, y está tan llano y tiene sitio donde poder librar los aposentos y las demás cosas donde estén los enfermos con mucho consuelo  y, es que,  de meterse el agua del remanente de la fuente de la Mora,   demás que hoy tiene un pozo muy caudaloso,  el tiene paso para los caminantes  y con las del ejido y con la alameda, que es el espacio que tiene la ciudad con más recreación,  y al tiempo de su edificación fue con nombre de Hospital Y  así lo ha tenido siempre”(…) y se señala que “tenga el nombre de  D.N.J y Santa Veracruz”. Además aprueban que  el día de la Cruz de Mayo se nombre mayordomo de  la nueva unificación de los dos hospitales, y además,  se designen un veedor y veinte cuatro asistentes a los que  se les asigna el oficio de  ver los enfermos mensualmente. Se recalca que se  mantenga  el gasto que  la cofradía  ha tenido hasta este momento. Y lo que es más interesante:

 

-“Que trasladado el dicho hospital, la imagen que tiene y la Cruz de la dicha cofradía de la Caridad se  ponga todo en un altar y capilla que dicha ermita  la cual altar o capilla tenga el nombre de la Caridad”.

            Acabado el cabildo los acuerdos  y las peticiones se trasladaron  al señor abad.

Se acometieron para hacer constituciones y capitulaciones al señor Bommar, Juan de Cueto y Francisco de la Torre y licenciado de la Torre.

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“INFORMACIÓN  SOBRE LA CASA DONDE SE ALBERGABA LA VIRGEN DE LA CORONADA DENTRO DEL HOSPITAL”

 

            El  día 12. de julio de 1585, el  cura Gonzalo de Aranda Godoy clérigo y  presbítero beneficiado de la iglesia del Castillo dijo:

-

“El Hospital del DNJ ha ido muchas veces, es una casa muy estrecha, mal trazada,  para hospital,  que no da sol hasta metida en una rinconada de manera que no se tiene mucha  notación ni frecuentación  de la ella por estar atrás mismo de  ella y desviada de vecindad  y, por estar tan metida y arrinconada de  de invierno y de verano, no tiene sol e tiene muy poco claridad que cualquier conocedor está oscuro  y yermo de esta manera que tiene , está edificada la dicha casa  y hospital  que a los dichos enfermos,  que allí acuden, pocos pueden escapar con salud e, los que salen con ella, salen malsanos de suerte que los dichos enfermos que allí acuden conforme se les  se  acrecienta por ser casa melancólica y triste  y sin frecuentación  que tiene el hospital de la Santa Veracruz

 

 

 

La ermita y hospital de la Veracruz, por ser sitio , llano tener sol y agua, trato y paso de gente, más ancho, donde puede ser visitado por gente caritativa, pozo caudaloso, . y es tan cómodo que acudirá mucha gente de la ciudad y forasteros porque está junto a la alameda y los mesones  y todo el trato  y frecuentación de público , la mujeres acudían los viernes con mucho fervor  y caridad a dar regalos  menesterosas  para los convalecientes  y se pueden enterrar en un cementerio d l al  lado.

 

Andrés de Moral nos los sitúa por entre el Albaicín de la Mota:

 

“en una umbría debajo de unas peñas, que no le dan el sol e,  que muchos mueren en el dicho hospital. Tenía una sola enfermería pequeña y malsana, de veinte que entran mueren dieciocho; los techos muy bajos, sin entrada”.

 

Martín Cano, bachiller, dice:

 

“en parte yerma y desacomodada,  debajo de unas peñas e umbría, triste y sin sol e poca claridad y apartada del concurso e trato  de la gente, pues está en una rinconada y que, si no es acaso, no se puede dar con ella y la casa es estrecha y mal trazada de  dicho hospital de manera que los enfermos  mueren…”

 “Y está la dicha alameda  junto al camino real donde está el paso de toda la entrada y salida de los caminantes  e la mayor parte del lugar e la dicha  la dicha casa en llano e calle más principal e más frecuentada junto a los mesones e de ordinario está el mayor trato de la ciudad  y la casa muy frecuentada de ordinario por la devoción particular en los lugares tienen principalmente los viernes  acude mucha gente,  porque allí tiene indulgencias,  a que allí se consigue  estando los dichos visitadores a que la casa  e que siendo el hospital  e trasladado en el  santísimo,  ni. ser de mucha importancia  a los pobres e aquella ocurrieren serán visitado  de la gente caritativa  e regalados y limpiados de ella personas devotas y forasteros  e naturales devotos de la dicción

Pueden enterrarse  el bachiller Martín cano. Darán más limosna.”

 

                                                           EN EL SIGLO XVII

 

            Jacinto Sánchez de Navarra ocupaba el cargo de rector del Hospital  en medio de un  ambiente decadente de la cofradía por los años comprendidos entre  1647 y 1652.

 

 

                                   ALGUNAS NOTAS CURIOSAS EN EL SIGLO XIX

 

 

            Por la probanza de los bienes del abad  don Pedro de Moya, varios testigos declararon  sobre sus rentas en 1804. Ante el vicario Mateo Díaz de Castaño, el rector Juan Ramírez de Tordesillas contestó a  las siguientes preguntas.

 

-El hospital del Dulce nombre se fundó en 1580  y todavía  poseía memorias, censo, y bienes propios.

- Tenía como Fin: el cuidado de enfermos y de los transeúntes

- Existía  una  residencia para rector, sirvientes,  y los enfermos.

-Van pocos enfermos a curarse  por no tener mucho prestigio.

 

             Y lo que es más interesante  para la  historia de la cofradía

 

            “Dicho Hospital tiene anejo dentro de sus claustros la Iglesia de Nuestra Señora de la Caridad, en la que diariamente se celebra el sacrificio de la misa, par que los convalecientes la oigan desde su coro o sacristía, en cuyo templo se le da sepultura a los que fallecieren, gozando al mismo tiempo  el beneficio de confinar y estar contiguo de la iglesia de la Veracruz, coadjutriz de la parroquia de Santo Domingo de Silos  por la pronta administración de las sacramentos”.

 

 

            También, por el legajo primero de la caja  64, sabemos que,  en 1811, la hermandad de La Coronada todavía alquilaba una casa de la Fuente  del  Rey por  la cantidad de 13 reales a Manuel Escobar; también que la Coronada se hallaba en este paraje, porque en  1810 se arreglaron la s cerrajas de la ermita  La Coronada y se pagaron a maestro Mateo Méndez 16 reales.

 

 

FRANCISO MARTIN ROSALES

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sábado, 30 de agosto de 2014

FIESTAS DE LA FUENTE REY iii. LA CORONADA


LA CORONADA EN EL CONVENTO DE LAS MADRES DOMINICAS DE ALCALÁ LA REAL

 
En el Archivo Histórico Provincial de Jaén, encontré un documento referente a Nuestra señora de la Coronada[1]  durante el periodo en el que  se levantó un altar dentro de la iglesia del convento de Nuestra Señora de la Encarnación de las Madres Dominicas. Por cierto, muy interesante. Data de 30 de marzo de 1658 y se levanto el documento en la propia iglesia. Fueron las partes: fray Silverio de Valenzuela , prior del convento de Nuestra Señora de del Rosario y vicario de las monjas, representando al provincial de Andalucía fray Luis de Espinosa, y  , por otra parte , la priora  sor Catalana Marañón, que  estaba reunida con la superiora sor María Clara  Ramírez, sor Beatriz de Valenzuela, doña  Francisca y doña Catalina de Castillo, , sor Juan de Herrera, sor María de Guzmán,  sor Isabel de los Ángeles, sor Jacinta de Solís, sor Juana de Herrera y sor Juana de Briones.

El objeto del  contrato consistía envender a la Cofradía de Nuestra Señora de la Coronada una capilla del  convento en la que estaba la imagen de San Antonio”  con el fin de tener los hermanos allí su imagen  y hacer la fiesta en la dicha iglesia, así como recibir el derecho de poderse enterrar en dicha capilla y, a su vez, las monjas disfrutarían de una limosna que les daría la hermandad”.

E hicieron la escritura con esta frase rotunda por parte de las monjas del convento.” Guardar y hacer  gracia y donación a los hermanos y cofrades de la dicha Hermandad de la Virgen Coronada de  la de la capilla de San Antonio con el retablo  que tiene para que en ella pongan la imagen  y hagan fiestas que les pareciere, que las han de guardar”,

Para ello se fijaban las condiciones siguientes:

1º.-“La campana de la ermita, que tenía en el sitio de la Fuente del Rey, se ha de poner en depósito y el convento ha de hacer de lo que quiera para sacarla y traerla para sí.”.

2º.-El convento ha de tener aderezado el al altar de lo necesario, y los hermanos han de cuidar de la imagen todo lo necesario.

3º.- Que los hermanos  han de poder sacar la imagen y demás que se ofreciere, con solo de que lo han de devolver a la capilla.

4º.-que los hermanos han de poner los escaños en la dicha capilla y sentarse sin ningún impedimento.

5º.-El convento se obliga a ofrecer la música sin interés alguno en la fiesta.

6º.-Que la hermandad se obliga a pagar por el edificio y otros gastos al convento cien ducados en los siguientes bienes:

-Una cáliz de plata con su patena con señales en el pie de Jesús, un Cristo  y vía Crucis.

-Una  casulla, estola  y manguitos de tafetán tornasolado.

-Cuatro pares de manteles, dos albas de medianillo, un amito viejo.

-Un frontal viejo, un frontal de tafetán carmesí, otro de color pajizo y otro o celeste con flecos negros.

-Dos bolsas de corporales, unos corpiños, y paño de cáliz color carmesí.

-Un misal, una campanica pequeña.

-Un cajón con su bayeta",

            Por este año eran su hermano mayor Juan del Arca Serrano y el capellán Diego Bravo.

  




[1] AHPJ. Legajo 5020. Folio 156.
 

viernes, 29 de agosto de 2014

LA VID EN LOS CAMPOS ALCALAÍNOS. II)


 

            Época  medieval

 

            Anteriormente, unos datos científicos fueron expuestos en el tomo I  de  la Historia de Alcalá por Maite Murcia, cuando aludía a varios pleitos en los que se hacía referencia al vino con los árabes y en el mismo momento de la conquista, en el que aparecen alguna que otra referencia al sarmiento en alambradas y elementos del asedio.

            Muchas leyendas, forjadas de la época medieval se remontan a la aparición de  grandes vasijas árabes que se han encontrado en las antiguas alquerías musulmanas. En ellas siempre estaba ligado el descubrimiento de un tesoro, con collares, sortijas, diademas de oro, monedas de plata, los dirhan y otros enseres de cerámica. Su funcionalidad no era otra sino para el almacenamiento y transporte del vino.

El cultivo del vino tuvo que existir en estas tierras, pues en la cercana Priego se manifiesta que uno de sus cultivos más importantes fue el viñedo. Los testimonios y yacimientos más frecuentes se hayan en la zona de la Rábita, antiguo Ribat, cenobio de "monjes" y guerreros en la frontera entre el reino musulmán y castellano. Por citar algunas, aparecen en las leyendas de los restos musulmanes del Cortijjo Nuevo, Peñon Gordo, o la Fuente de Malaguilla, el de la Cueva del Tesoro en Frailes o el de la  Ciudad Quemada en el límite entre las provincias de Jaén, Granada y Córdoba,  la Cueva de Rubio en la Hoya de Charilla, la Encina Leona de la Pedriza  y el cerro del Águila en el puente de Suarez.   Tres  tesoros de esta época son fiel refrendo de esta documentación: El hispano musulmán de Charilla, actualmente en el Museo Arqueológico Nacional, el de Ermita Nueva en el  futuro Museo de  Alcalá la Real y el de la Pedriza. 
 

 Nos muestran que, antes de la conquista de4 Alcalá la Real, la  venta de vino era un recurso muy importante para muchas alquerías, y, sobre todo, el libro de Pero Martín relata la liberación de los esclavos cristianos del reino musulmán y en escenas curiosas , cuando se esconden o pasan por caminos llenos de cepas.
 

 

 

 

 

            La conquista cristiana.

 

           

Con la conquista cristiana, desaparecida la inestabilidad de la frontera y la posible tala de campos y vides,  la expansión del viñedo es un hecho innegable. Además, de elemento esencial para la vida y de productor de riqueza, el vino impregnaba  todas las actividades de la vida. Así lo recoge  la poetisa alcalaína María Pilar Contreras:

 

            “Tremolado el estandarte de la Cruz en las torres de la Alhambra, lanzados del suelo   español los hijos de Mahoma, ya Alcalá entró en una vida tranquila, tan de desear, después de una serie no ininterrumpida desangrientas y ncarnizadas luchas. Los capitanes que mandaban y los nobles que siguieran, formaron la primera clase social, los demás habitantes cultivaban el hermoso terreno virgen. A las márgenes de los arroyuelos que brotaban al pie de las gigantescas rocas, levantabánse las humildes casas de campo, hoy aldeas, hiciéronse plantaciones de extensos viñedos, espesos bosques de álamos y frutales, dando rápido impulso a la agricultura y a la ganadería”.

            Con la conquista de Alfonso XI se mantuvieron y renacieron. Por noticias indirectas, se observa que en el primer repartimiento se componía entre las familias de un cortijo de 100 fanegas, varios pedazos de cereal y  varias aranzadas de viñas.

            El paisaje  de viñas solía estar en las proximidades de laos pueblos( La Viñuela en Alcalá y Castillo), se entremezclaban las viñas con las casas; en las zonas rurales, el cereal y viñedo.

            Forman una extensión de una a cinco aranzadas, que se agrupan para su custodia con un chozón de támaras, piedras, ...para proteger  de los furtivos y tienen un lagar común: muestra el gran número de nombres de l Cortijo  del lagar, lagarillo)

Hablando de lagares, los hay:
 
 
 
LAGARES RURALES

            -de grandes dimensiones dentro del cortijo( vivienda, tinado, lagar, horno y caballeriza)

-de pequeñas dimensiones o ( cobertizo , lagar y habitación de bodega)

- solo, de     cobertizo de retama

LAGARES URBANOS
 
 
Claro ejemplo son los que se conservan en la fortaleza de la Mota con su prensa, cana de conducción, receptáculo y bodega.

      

ALGUNAS ORDENANZAS DEL VINO

           

 

EL el viñedo estaba muy protegido en medio de una sociedad eminentemente pecuaria por medio de algunas ordenanzas que impedían la entrada del ganado a  los viñedos y el correspondiente aviso por medio de los garabato -  hierro y campanos de los perros-  para que los viñaderos, viñadores y guardianes de viña se protegiesen ante la llegada del ganado.

Los viñadores vigilaban varias heredades, y tenían que tener permiso del corregidor para ejercer su oficio. Se protegían de pequeños cobertizos o cuevas de piedra que todavía jalonan el término alcalaíno. Cobraban su peón, y no podían llevarse ni la uva para su casa ni para su familia, salvo la que le entregaba su patrón ( tres racimos). Tampoco comprar ni arrendar viñas ni hacer trato alguno. Cualquier robo y hurto que llegara a la cantidad de media arroba era castigado con 15 días de cárcel, 3.000 maravedís de multa y una mañana de vergüenza pública en la argolla. Consistía nada menos en sentar al reo sobre el cadalso asido a un madero por una argolla, sujeta al cuello, donde debía permanecer en esta postura  para vergüenza pública o mientras otro u otros condenados sufrían la pena capital.
También e prohibía el trato del apareador con los limosneros o demandante, criados o familiares mientras se pisaban las uvas.

La venta de vino en estos años llegó a alcanzar una gran cifra de taberneros, mesoneros o particulares.  La razón no ea otra sino que la mayoría de la población  tenía propiedades de vino y gran parte se exportaba.

Los primeros meses del año, la venta del vino se centraba por igual a pueblos granadinos y jiennenses. Decaía en primavera, y en mayo volvía a renacer con la venta de vino a la ciudad de la Alhambra. Poco a poco, la plantación de viñedos en pueblos cercanos a la capital del Santo Reino hizo que su venta decayera a mediados del siglo XVII y se centrara en los pueblos granadinos.

           

            El vino ocupaba , aparte de su  función alimenticia fundamental. uno de los ingredientes en tres actividades  festivas: las mascaradas o fiestas de víspera, los juegos de caña y toros y las máscaradas o gremios.  Solían celebrarse con motivo de las fiestas más importantes de las ciudades y las villas y por las extrao
 
rdinarias, que  tenían lugar con motivo de la llegada de un nuevo rey o el propio parto de una reina y , el triunfo del ejército español en algunos de sus extensos territorios. Se anunciaba con lumbres en las partes de los castillos, mientras los caballeros recorrían la ciudad anunciándolas el día anterior. Con motivo de la fiesta, se agasajaba con la bebida a los hidalgos caballeros que acudían de otras localidades, mientras participaban en juegos que consistían en simulaciones de luchas de caballeros cuerpo a cuerpo o contra una alcancia, figura de trapo a la que trataba de clavar alguna de sus armas.

            Los gremios representaban ingenios, que no eran otra cosa que pequeñas comedietas graciosas referentes a sus distintas especialidades, los tintoreros, los zapateros, los albañiles,...y sobre todo, los campesinos, que eran los que más pervivieron. A ellos se  les convidaba a vino y así ejercitaban con mayor agudeza todo tipo de excentricidades que no eran capaz de hacerlo estando cuerdos.

            Eran conscientes de la presencia del vino en la fiesta como esta canción de un moriscos en las fiesta de san Diego de Alcalá:

 

            Mala fiesta te dé Dios,

            Y luego tan mal San Juan

            Que te falte vino y pan

            Y tengas catarro y tos.

 

Pues nuestros antepasados vivían enraizados en  una cultura religiosa muy ligada con la Agricultura, en la que el santoral servía de prretexto para cualquier actividad y de horóscopo zaragozano anticipado: