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miércoles, 17 de agosto de 2016

JUAN DE SARMIENTO SOTOMAYOR








A principios del mes de enero de 1595, tras el nombramiento de corregidor, se envió a la Corte al regidor alcalaíno, Francisco de Herrera, para que felicitara al nuevo corregidor Juan de Sarmiento Sotomayor, relacionado con el miembro del Consejo  Real Juan Sarmiento Valladares y Diego de Sarmiento Sotomayor, señor de Achas y Diego  Sarmiento de Acuña, conde de Gondomar, que fue embajador de Inglaterra y corregidor de Toro. Además tenía un hermano canónigo de Sevilla. ([1])..
 Vino a la ciudad el día ocho de febrero de 1595, provisto de  una provisión anterior dada por Felipe II. Nombró en Alcalá por alcalde mayor al licenciado Juan de Sismago, alguacil mayor Pedro Vázquez, Juan González  y alguaciles  menores Tomás de Simancas y Gabriel Peñalver, alcaldes ordinarios del Castillo de Locubín, Cristóbal Muñoz y Miguel Rodríguez Collado. En Loja, el alcalde mayor fue el licenciado Luis Baca, y el alguacil mayor Juan Mayor, sustituido por Alonso Méndez de Sotomayor,  y el menor Melchor Pérez de Ortega. Vino a tomar la residencia del anterior corregidor, el licenciado Gaspar de Zapata. En el dos de marzo del año 1596, se  pidió a la Corte la prórroga del corregimiento y vino a tomar residencia el anterior juez. En el mes de marzo de 1597,  tuvo que hacer frente a un gran trabajo de poner en marcha muchas provisiones reales y asuntos de la guerra contra la armada inglesa y tuvo que nombrar de teniente  de corregidor al licenciado Luís Baca de la Vega  y `para asuntos de la justicia  mantuvo a su anterior alcalde mayor, informando por ello a la ciudad [2].
Una rama de los Sarmiento  provenía de Burgos, que, a través de don Antonio Sarmiento, caballero de la orden de Santiago,  se casó con doña María de Mendoza, hija del conde de Monteagudo, tuvo un don Luís de Sarmiento Mendoza, también caballero de la Orden de Santiago y Calatrava, caballerizo mayor de la Princesa de Castilla, natural de Burgos, casado doña Catalina de Pesquera. A su vez tuvo un hijo don Antonio de Sarmiento de Mendoza, casado con doña Isabel Barba de Acuña, caballero de la Orden de Calatrava natural de Burgos, que tuvieron un hijo canónigo de Jaén y era licenciado.
Apoyó, en su gestión con el abad de la ciudad Maximiliano de Austria, que los beneficios de la ciudad pasaran a los hijos naturales de ella, cosa que que por este reinado no pudo conseguir de la Corona y los mismos se inclinó  de parte de la mayoría de los regidores en  el nombramiento del síndico, que trato de que se mantuviera en el cargo por su veteranía y experiencia.
Al principio del corregimiento debió notar que  las buenas formas ni la cortesía no eran las adecuadas en la celebración de los cabildos municipales, teniendo en cuenta que se habían alterado mucho en tiempos del anterior corregidor. Por eso, ordenó, tras un auto contra los regidores, que los cabildos fueran ordenados a la hora de  las intervenciones, prohibió la salida de regidores y jurados durante el desarrollo de la sesión, impidó que los asuntos se trataran fuera del cabildo, las intervenciones se caracterizaran por la quietud y decencia , el orden y la costumbre actual a la hora de llevar a cabo algún negocio o propuesta, partiendo de las intervenciones por antigüedad y pidiendo licencia  al corregidor a la hora de  exponer el voto o puntos de vista con su razones y en pleno ejercicio de la libertad e impuso un castigo de 20000 maravedíes para quien infligiera las normas ([3]) En esta misma línea, se ordenó el protocolo del cabildo municipal en las celebraciones religiosas, ocupando la mano derecha de las capillas mayores,  y en  procesiones  del Corpus y letanías en un lugar posterior al prelado[4]. En un terreno diferente, la labor normativa se mantuvo en la reelección de los guardas por una año más para conservar los montes de las talas y en que se pusiera una alhóndiga que favoreciera el comercio, sobre todo, del trigo[5].
Se mantuvo el debate sobre el impuesto de las cabezas y asaduras para el pago de millones, que venía  relacionado con el clientelismo y amiguismo de los  regidores a la hora de usurpar tierras, que, por cierto, eran muchas,  en los nuevos terrenos roturados para el pago de dicho impuesto. Más la mitad de los regidores están emparentados o eran amigos de los que  habían pujado por las tierras. En concreto, un bando estaba relacionado con  Pedro de Pineda ([6]), Francisco Narváez, Francisco Alonso Castillo, Gamboa, Góngora y los Zamorano, poseedores de tierras, y propugnaban que se mantuvieran las tierras usurpadas hasta tanto  se pagara el impuesto de millones. En frente de ellos Alcaraz, Alarcón, Mazuela, Vázquez Messía, licenciado Ribera, Frías, Ocón y Ortega, que se relacionaban con las nuevas carreras y las profesiones liberales, se oponían a la medida y pretendían que se aplicaran la justicia. . Y no sólo, se veían afectados estos caballeros y los hidalgos,  sino que los clérigos también pretendía que se les quitaran y se les hiciera la refacción. Algo similar acontece en Loja, pues, por una parte , se trató de pactar el nuevo encabezamiento de las rentas reales Pero surgieron varios pleitos sobre comunidad de pastos conn Vélez, con la independencia de Huétor y los tradicionales con el estamento eclesiástico Se pidió la exención del impuesto de millones, y el arrendamiento por diez del arbitrio de bellota.
Además, algunos miembros del segundo bando estaban relacionados con los jurados en un antiguo pleito que defendía el  regidor doctor Frías[7], que le estaba costando al cabildo más de dos mil ducados, dándose la paradoja que era primor hermano del jurado Luís de Arjona, y parecía que las dilaciones respondían más a interes4es cremástísiticos que al interés de la ciudad.
Pero las necesidades hacendísticas tenían más fuerza que las razones de legalidad, y se mantuvieron todo este tipo de desastres de los montes, con su  asentimiento y por la mayoría de los regidores, a pesar  de la oposición de uno de los sectores y de los jurados y de una reforestación que se hizo de pinos en algunos puntos del municipio alcalaíno.



[1] ADOJ. Expediente con signatura 488 –6ª. Relacionado con Francisco de Sarmiento Sotomayor , se nos muestra que es originario de Salvatierra, jurisdicción de Tuy ( Pontevedra), Era canónigo, su padre don García Sarmiento de Mendoza, señor de la villa de Salvatierra y mayordomo de la emperatriz y su madre doña Leonor de Sarmiento natural de Burgos. Lo que nos pone la relación de esta familia en la Corte y la obtención de prebendas y cargos civiles y religiosos. Su abuelo era don Juan de Sarmiento de Sotomayor, señor de Salvatierra y sus bisabuelos, el conde de Camuña y de Rivadavia por la parte paterna, por la materna, era don luis Sarmiento de Mendoza , mayordomo del Príncipe don Carlos,  y el conde de Monteagudo..
[2] AMAR. Acta del cabildo del 15 de marzo de 1597.
[3].AMAR .Actas   de los  cabildos de los días 11 y 25 de agosto de 1595.
[4] AMAR. Acta del cabildo del  20 de mayo de 1597.
[5] AMAR. Acta del cabildo del 4 de agosto de 1597
[6] AMAR. Acta del varios cabildos del mes de agosto de  1595. Poseían tierras de millones Francisco Méndez Zamorano, Francisco de Góngora, Pedro Pineda Jiménez, Gonzalo de  Valenzuela, cuñado de Antonio de Gamboa, Juan Zamorano, sobrino de Francisco Méndez, Pedro de Pineda Góngora, primo hermano de Francisco de Góngora, Francisco de Narváez, cuñado de Francisco de Góngora, Gutierre de Argüello, casado con sobrina de Francisco de Góngora y Francisco Valenzuela.
[7] AMAR.  Acta del cabildo del cuatro de octubre de 1595.. 

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