I
EL MARTIRIO DE SAN ESTEBAN
Es un cuadro que pertenece al retablo mayor de la iglesia de Santo Domingo de Slos de Alcalá la Real, se conserva en la colección del anticuario Manuel González. Recoge el momento del martirio del santo vestido de diácono ( alba blanca y dalmática roja) y muestra una actitud de rodillas y martirial reflejada en la devoción de su rostro y las manos, la aureola de santo y su actitud quietista con una piedra sobre su cabeza y en su derredor de la dalmática y alba-su símbolo-, frente a los judíos que , dirigidos por el Sumo Sacerdote, le apedrean con una actitud agresiva ( vestidos a la usanza de los hombres de calle del siglo XVI). La autoridad se representa con lujoso traje y vestimenta, vara de lapidacíón y turbantes. El paisaje refleja las afueras de la ciudad de Jerusalen, cerca de una puerta de entrada, extramuros y corrillos de gente presenciando el martirio. Los dos ejes del santo y el grupo de los verdugos se encuadran en la línea áurea que se equilibran con el juego de las líneas de las puertas y de la muralla compensando los volúmenes. Probablemente, el cuadro proceda del Cardenal Mendoza, ya que el retablo fue una donación suya a la ciudad durante su estancia en Alcalá antes de tomar Granada, y es de origen italiano.
San Esteban
Fiesta de san Esteban, protomártir, varón lleno de fe y de Espíritu Santo, que fue el primero de los siete diáconos que los apóstoles eligieron como cooperadores de su ministerio, y también fue el primero de los discípulos del Señor que en Jerusalén derramó su sangre, dando testimonio de Cristo Jesús al afirmar que lo veía sentado en la gloria a la derecha del Padre, siendo lapidado mientras oraba por los perseguidores (s. I).
No hay comentarios:
Publicar un comentario