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lunes, 13 de noviembre de 2017

RELACIONES DE LAS ADVOCACIONES DEL CRISTO DE LA SALUD DE LA IGLESIA DE SAN AGUSTÍN DE CÓRDOBA Y EL DE SAN JUAN DE ALCALÁ LA REAL




                       
Hace unos días, en la casa de un coleccionista alcalaíno tuvimos la suerte de contemplar una litografía  del Cristo de la Salud y , en el  mismo cuadro, otra de la Virgen de las Angustias de la parroquia de San Andrés de Granada.  Esto nos llevó a estas reflexiones para la Historia de la Hermandad.
No ha sido siempre inamovible la estructura de las hermandades ni su relación con las imágenes, ni siquiera  con la pervivencia de las advocaciones de los santos, cristos o vírgenes a cuyo patrocinio se cobijan.
En Alcalá la Real, tenemos comprobado que  la imagen de la Coronada llegó a denominarse de la Caridad, de los Desamparados y Madre de Dios, y estuvo relacionada con otras cofradías hasta convertirse en  la devoción actual en la ermita de la Fuente del Rey, no sin antes haber constituido una esclavitud en el Hospital del Dulce Nombre de Jesús en los arrabales de  la Mota, una famosa hermandad  a lo largo de los siglos XVI-XVIII y fusionarse con la del Dulce Nombre de Jesús en el siglo XIX.

           
                         UNA IMAGEN DE UN CRISTO SIN NOMBRE 

Algo parecido debió sucederle  a  la imagen del Crucificado de la iglesia de San Andrés de Granada, cuya talla fue atribuida a  Diego de Siloé y  recibió culto sin advocación concreta  a principios del siglo XVI. Luego, más tarde, este Cristo se le puso la advocación de “La Agonía” . En principio, este crucificado estaba integrado dentro de la Hermandad de la  Ánimas de esta iglesia y recibía culto en la capilla de enterramiento de don José Callejas de Cañaveral. Caballero santiaguista y veinticuatro del cabildo municipal de Granada. Después, llegó a fusionarse esta imagen y hermandad de las Ánimas dentro de la cofradía sacramental de San Andrés con la denominación de esclavitud y , junto con una imagen de las Angustias, bajo la advocación del Buen Suceso, se le daba culto en la capilla de la imagen mariana. Esta imagen tenía por costumbre realizar una Vía Sacra que se practicaba hasta la iglesia de San Antón, donde se celebraba un septenario, con siete estaciones en su recorrido que tenían lugar en cada una de las iglesias del itinerario, Solía tener una corona de espinas con auras o potencias de crescite, donadas por Francisco de la Hoz.
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            Curiosamente, en la ermita de San Blas de Alcalá la Real, existía una cofradía bajo la advocación de este santo obispo, pero en uno de sus laterales  ya en el siglo XVI  se rendía culto a una imagen, de origen desconocido con muchos caracteres iconográficos similares al Cristo granadino ( su movimiento del torso, la inclinación de la cabeza hacia la izquierda, la corona de espinas y las potencias de plata, la posterior peluca, el faldón  o perizoma, su arcaísmo en la composición y diseño , la cruz de madera, etc). También , la primera Vía Sacra se levantaba en Alcalá la Real en la  Cuesta del Cambrón, por lo que tiene más fiabilidad la hipótesis de la estancia del Cristo en aquel lugar  No es de extrañar, pues, que, mientras la cofradía de san Blas ejerciera el control y la autoridad  dentro de la organización eclesial, hubiera un grupo de devotos bajo la advocación de Esclavitud del Cristo, más tarde  de la Salud, que cuidaran del culto de esta imagen. Por cierto muy relacionado con  la Escuela de Cristo que se estableció en esta ermita a mediados del siglo XVI, que fueron trasladando su organización a la iglesia de San Juan San Francisco, Veracruz y San Antón a lo largo de los siglos.

            EL CRUCIFICADO RECIBE LA ADVOCACIÓN DE CRITO DE LA SALUD

            Curiosamente, esta imagen del Crucificado de la ermita de San  Andrés recibió la advocación de Cristo de la Salud en 1679, cuando tuvo lugar una gran epidemia que asoló a la ciudad y , según  Antonio Radial Bailón, “ los enfermos apestados eran colocados en la explanada del triunfo, extramuros de la barbacana que  existía protegiendo a la Puerta de Elvira. Allí, desde la cercana iglesia de San Andrés., se llevaba en andas  la imagen para procesionaria entre los enfermos esparcidos en el ejido, extramuros de la ciudad”.

            LA LEYENDA DEL MILAGRO DEL CRISTO DE LA SALUD DE GRANADA            Según el articulista anterior “ En una de las salidas del Cristo de la Salud al Campo del Triunfo,  para que los enfermos le impetraran  por su curación, una paloma  “ que el fervor de los apestados identificó con el Espíritu Santo  , siguió en su vuelo al Crucificado en todo su recorrido. Sobrevolando a los enfermos y postrándose en uno de los brazos de la cruz, produciéndose aquel día algunas curaciones milagrosas. Desde este suceso, el Cristo tomará la advocación, dada por el pueblo, de Cristo de la Salud. Como consecuencia  y para que quedara constancia de aquellos sucesos curativos, una representación de la paloma realizada en orfebrería de plata se le agregó a la imagen paloma que aparece posada en el brazo derecho del Cristo, como podemos aun hoy contemplar”
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LA HERMANDAD DEL CRISTO DE LA SALUD DE  SAN ANDRÉS

            Se creó, entonces, la Hermandad del Cristo de la Salud en 1697 para darle culto a esta imagen, cuyas reglas se aprobaron en 18 de enero de 1698 por el provisor de la diócesis Andrés Rafael de Ascalgorta. La hermandad se mantuvo cierto tiempo, pero decayó resistiendo en algunos cultos y número de devotos  gracias al carácter milagroso de la imagen.  Como era frecuente,  el número de hermanos se reducía a 72  y sus cultos se celebraban el 3 de mayo con motivo de la Invención de la Cruz, y su función benéfica radicaba en el siglo XVII en el auxilio de su hermanos en caso de muerte.
            Esta hermandad se fusionó de nuevo con la del Santísimo Sacramento en el siglo XIX. En 1818, la imagen se salvó de un pavoroso incendio que destruyó la iglesia de San Andrés y cuidó de la misa solemne de los primeros viernes de mes. En la epidemia de 1833, la cólera  morbo  asoló a la ciudad de Granada y se hizo una rogativa en honor del  Cristo de la Salud el 28 del mes de septiembre. En 184, inauguró la costumbre de un Septenario basado en las Siete Palabras y que se celebraba tras la Pascua de Resurrección. En 1854, se repitieron cultos y rogativas  por la epidemia de la misma cólera. También el Cristo de la Salud de la iglesia del Sagrario recibió  los mismos cultos ante la misma epidemia
Desde 1857, a la hermandad  se unió  una imagen de la Virgen de las Angustias, que donaron los Condes de Heredia Spinola , y se colocaron ambas imágenes en la capilla del fondo de las naves laterales junto a la capilla mayor La llegada de la imagen de las Angustias servirá de revulsivo a la  hermandad del Cristo de la Salud a finales del siglo XIX acudiendo a su septenario famosos grupos de capillas de música a sus septenarios. También, se invocó a la imagen el la iglesia de San Andrés con motivo de la peste de 1895 con motivo de la epidemia del maligno cólera. Y se amplió su culto con la comunión general del Jueves Santo en 1890.
En 1913,  participó la hermandad del Cristo de la Salud y Nuestra Señora de las Angustias en el Santo Entierro Antológico de la Semana Santa de aquel año. Con la imagen de las Angustias. Pero, ya tan sólo se celebraron dos septenarios en honor de la Virgen de las Angustias y el Cristo de la Salud hasta los años cincuenta del siglo XX. Hace unos años , la Hermandad de Jesús en Jerusalén sacó en Vía Crucis la imagen del crucificado.

LA HERMANDAD DEL CRISTO DE LA SALUD DE ALCALÁ LA REAL    

No hay fecha exacta de cuando la imagen del crucificado  se transformó en la del Cristo de la Salud.  Pero debió acontecer por 1680, cuando la epidemia también afectó a la ciudad alcalaína, aunque se cebó con el Castillo de Locubín y la Abadía requirió los auxilios de Santa Ana, a la que atribuyó su intercesión por lo milagrosa que era. Por este tiempo, la imagen de San Roque, también en la ermita de San Blas fue declarado patrón de la ciudad por ser protector de los apestados. 
También, era frecuente que en las ermitas de extramuros se colocaran los enfermos y la ermita San Blas así se encontraba por estos años como hospital provisional para recoger a los enfermos. Por otro lado, Bartolomé de Melgar, provisor de la abadía, fue nombrado capellán de la capital Real de Granada y debió transmitir al pueblo alcalaíno la milagrosidad del Cristo de la Salud de Granada para que fuera asumida dicha advocación en Alcalá la Real. Por otro lado, la advocación de hermandad de San Blas anuló por estos años a la esclavitud del Cristo de la Salud e, incluso hasta el siglo XX se confundía a la hora de realizar cultos y actividades.
. Sin embargo,  la  hermandad del Cristo de la Salud fue sustituyendo a la de San Blas alrededor del siglo XVIII, de lo que  hay constancia en grabados y donaciones, y ya que se había marchado la Escuela de Cristo de la ermita de San Blas. Además, la imagen del Cristo de la Salud comenzó a participar de las rogativas de la ciudad como en 1800. En 1885, se convirtió la ermita en un hospital de aspestados y retrasladaron las imágenes a la iglesia de San Juan, pero, debió invocarse al Cristo de  la Salud en otras muchas epidemias como la de 1599-1604; 1622, 1637; 1650-1652; 1676-1682, 1720, 1800 y ,sobre todo, en 1834 y 1885 .
Por lo tanto, la relación de la hermandad granadina con la del Cristo de la Salud no es casual, debió influir  muchísimo en el desarrollo y expansión de nuestra hermandad.   




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