ASOCIACIÓN DE VECINOS
HUERTA DE CAPUCHINOS DE ALCALÁ LA
REAL (JAÉN)
Este es el libreto que hemos escrito para esta ruta de 64 ruteros.Lo titulamos.
BOLETÍN 203
DOMINGO 26
DE NOVIEMBRE DE 2017
SALIDA DE
HUERTA DE CAPUCHINOS. PARQUE DE LOS
SAUCES A LAS 7. Y cumplimos el itinerario con estas salvedades:
ITINERARIO Y
HORARIOS
7.05.- SALIDA
DE PARQUE DE LOS SAUCES.
8.30.-
DESAYUNO EN RUTA EN LOS ABADES.
10.30.-
INICIO DE RUTA DEL LOS CASTAÑARES(Y NO LO IMPIDIÓ EL TIEMPO).
14.- COMIDA. SOPA, PLATOS COMBINADOS Y CARNE DE SECRETO, NATAS-
16.- VISITA
DE RONDA.
19.-
REGRESO.
RUTA DEL
CASTAÑAR ENTRE PARAUTA, IGUALEJA
COMPROBAMOS QUE Parauta e
Igualeja son dos pueblecitos cercanos a unos 30 minutos en AUTOBÚS coche desde Ronda,
hacia la carretera de San Pedro. Pero, nos acercamos por unas secundarias entre curvas cerradas y un paisaje muy bello entre las Sierras agrestes y el valle frondoso de castañales, que debíamos recorrer a pie.
Caminamos entre estos pueblos por un antiguo sedero que los
comunicaba de más de 5 , y, en parte, acondicionado para la práctica
del senderismo.
Parauta es más pequeño con apenas 200
habitantes, un pueblecito blanco precioso en medio del Bosque de Castaños.
Tiene a su entrada una fábrica de castañas. La antigua fuente manantial con el
árbol del pinsapo típico de la serranía de ronda. Sus callejuelas son estrechas
y llenas de encanto, silencio y limpieza, claro origen árabe. Los alojamientos rurales son alternativas
recientes. Tiene su iglesia y una plaza principal.
Destacar la encina de Valdecilla de unos 20 m
de altura al inicio de la ruta, donde nos paramos. Vimos casitas de campo con su pequeño huerto,
y baja mos hasta un pequeño arroyuelo con agua donde hicimos de equilbristas. Subimos por un sendero llenos de
encanto otoñal, con hojas y castañas por el suelo, el multicolor verde, ocre,
amarillo lo llenan todo y las sensaciones son espectaculares. Hay una línea de
alta tensión que cruza el valle y se escucha el chirrido de sus cables. Y con zumaques y algunas chumberas, de ellas parte con la enfermedad de la cochinilla. Paradas para paliar los desniveles y posar sobre un puente mirador.
Al llegar a lo alto en el cruce, seguimos de
frente para iniciar la bajada hacia Igualeja, llegando a sus casas por zona
alta que fuimos bajando, hasta llegar al cauce principal de río Genal y fuimos a su nacimiento acondicionado con una hoquedad en las rocas, balsas intermedias y un parquecito colindante. Hay bares y restaurantes en la
zona, y las fábricas de castañas.
Aquí nos recogiò el autobús para ir al
restaurante en Ronda a las 13.30. Sobre seis Kilómetros-.
EN EL CORTIJO, CON LOS OJOS DE OCRES Y AMARILLOS, Y TEÑIDA LA IRIS DEL ORO DE LAS HOJAS DE LOS CASTAÑARES, Y LAS MOTAS ROJIZAS DE LOS ZUMAQUES, COMIMOS CON UNA BUENA ATENCIÓN DE SERVICIO.
Fue nuestro guía excelente y generoso y compañero socio senderista Fernando del Pino quien preparó minuciosamente toda la visita tanto en los castañares como en Ronda. Con breves anotaciones de su hijo coguía y el que suscribe. La vista panorámica que nos realizó ffue fantástica-
A las cuatro en Ronda, ya habíamos comentado:.
RONDA
Ronda es una de las ciudades más antiguas de España. Sus orígenes se
remontan al Neolítico, según los descubrimientos arqueológicos realizados en su
casco antiguo. Sin embargo, la presencia del hombre por estas tierras es mucho
anterior. De ella son buena prueba una serie de yacimientos en cuevas, entre
los que destaca la Cueva de la Pileta, por ser uno de los mejores exponentes
del arte rupestre del Paleolítico andaluz.
Durante la Prehistoria Reciente se asistiría a una proliferación de asentamientos por todo el territorio que, en lo que atañe a los restos que han llegado hasta nuestros días,quedarán representados por una de sus manifestaciones culturales de mayor relevancia y monumentalidad, como son las necrópolis megalíticas: Dólmen del Chopo, de Encinas Borrachas, entre otros.
Fue en esta época, pues, cuando se consolidaron igualmente los dos poblados más importantes de la comarca, Acinipo y Ronda, aunque sus períodos respectivos de apogeo no se den sino con posterioridad; el primero en época romana y el segundo en la medieval.
Durante la Prehistoria Reciente se asistiría a una proliferación de asentamientos por todo el territorio que, en lo que atañe a los restos que han llegado hasta nuestros días,quedarán representados por una de sus manifestaciones culturales de mayor relevancia y monumentalidad, como son las necrópolis megalíticas: Dólmen del Chopo, de Encinas Borrachas, entre otros.
Fue en esta época, pues, cuando se consolidaron igualmente los dos poblados más importantes de la comarca, Acinipo y Ronda, aunque sus períodos respectivos de apogeo no se den sino con posterioridad; el primero en época romana y el segundo en la medieval.
De la ocupación romana de la Península quedan
en nuestro área numerosos vestigios, entre los que se hallan los descubiertos
en la propia ciudad de Ronda. Pero, sin lugar a dudas, es el yacimiento
arqueológico de la ciudad romana de Acinipo el que goza de mayor importancia,
dado el estado de conservación del mismo así como de algunos de los elementos
más emblemáticos de una urbe clásica, como es el teatro.
Desaparecida Acinipo, tras el período convulsivo que supuso la caída del Imperio Romano, el centro de atención se dirigirá hacia Ronda, la cual, aún siendo un núcleo muy reducido durante la primera Edad Media, será desde entonces la protagonista de todos los avatares históricos que se dieron cita en este territorio.
De éstos, el que destaca por su trascendencia y por el legado cultural que nos ha dejado y que aún es perceptible en muchas de sus manifestaciones (urbanismo, gastronomía, tradiciones, sistemas de cultivo, etc), fue el período islámico.
Es en este momento cuando Ronda se configura y consolida como ciudad, llegando a ser la capital de una de las Kuras (Provincias) en las que se dividió al-Andalus (la de Takurunna) e, incluso, constituirse en reino independiente (los llamados reinos de taifas) tras la desarticulación del califato cordobés.
Pero el papel más significativo, y por el que es mejor conocida, le llegará con el reino nazarí de Granada, ya que su proximidad a los territorios conquistados por los castellanos le supondrá eregirse, tanto a la ciudad como a la comarca, en enclave fronterizo de especial importancia.
Con la conquista de la ciudad por los Reyes Católicos(1485) se producirán profundas transformaciones económicas y culturales que aún hoy es posible apreciar en la fisionomía de la estructura urbana: apertura de plazas antes inexistentes, ensanches de calles, etc.
Pero será el siglo XVIII el que marque, en esta época moderna, las pautas definitivas del papel que Ronda tendrá en el contexto de Andalucía.Es en esta época cuando se construyen los monumentos más significativos y emblemáticos de la aristocracia de entonces y de la Ronda actual: el Puente Nuevo y la Plaza de Toros.
A Partir de entonces, y durante todo el siglo XIX, se forja la imagen romántica de la ciudad, así como de su Serranía, en la que el mundo del bandolerismo y de la tauromaquia causarán una profunda impresión en muchos insignes viajeros.
Ambos aspectos se han convertido desde entonces en símbolos de nuestra cultura y tradición. No obstante, la riqueza cultural y tradicional de Ronda es mucho más amplia y diversa que la que ofrece esta imagen que, por agradable, no deja de ser tópica. Es en esa diversidad en la que se basa el atractivo actual de Ronda y su Serranía.. Comentamos
Desaparecida Acinipo, tras el período convulsivo que supuso la caída del Imperio Romano, el centro de atención se dirigirá hacia Ronda, la cual, aún siendo un núcleo muy reducido durante la primera Edad Media, será desde entonces la protagonista de todos los avatares históricos que se dieron cita en este territorio.
De éstos, el que destaca por su trascendencia y por el legado cultural que nos ha dejado y que aún es perceptible en muchas de sus manifestaciones (urbanismo, gastronomía, tradiciones, sistemas de cultivo, etc), fue el período islámico.
Es en este momento cuando Ronda se configura y consolida como ciudad, llegando a ser la capital de una de las Kuras (Provincias) en las que se dividió al-Andalus (la de Takurunna) e, incluso, constituirse en reino independiente (los llamados reinos de taifas) tras la desarticulación del califato cordobés.
Pero el papel más significativo, y por el que es mejor conocida, le llegará con el reino nazarí de Granada, ya que su proximidad a los territorios conquistados por los castellanos le supondrá eregirse, tanto a la ciudad como a la comarca, en enclave fronterizo de especial importancia.
Con la conquista de la ciudad por los Reyes Católicos(1485) se producirán profundas transformaciones económicas y culturales que aún hoy es posible apreciar en la fisionomía de la estructura urbana: apertura de plazas antes inexistentes, ensanches de calles, etc.
Pero será el siglo XVIII el que marque, en esta época moderna, las pautas definitivas del papel que Ronda tendrá en el contexto de Andalucía.Es en esta época cuando se construyen los monumentos más significativos y emblemáticos de la aristocracia de entonces y de la Ronda actual: el Puente Nuevo y la Plaza de Toros.
A Partir de entonces, y durante todo el siglo XIX, se forja la imagen romántica de la ciudad, así como de su Serranía, en la que el mundo del bandolerismo y de la tauromaquia causarán una profunda impresión en muchos insignes viajeros.
Ambos aspectos se han convertido desde entonces en símbolos de nuestra cultura y tradición. No obstante, la riqueza cultural y tradicional de Ronda es mucho más amplia y diversa que la que ofrece esta imagen que, por agradable, no deja de ser tópica. Es en esa diversidad en la que se basa el atractivo actual de Ronda y su Serranía.. Comentamos
El medio físico en el que estamos encuadrados
se caracteriza por ser eminentemente montañoso, por lo que la investigación
arqueológica se ha dirigido especialmente hacia el conocimiento de sus
numerosas cuevas, muchas de ellas estudiadas ya por Obermaier y Breuil a
principios de siglo.
La más famosa es sin duda la de La Pileta,
situada en Benaoján y descubierta en 1905. Fue declarada Monumento Nacional en
1924. Contiene un importante conjunto de pinturas rupestres de cabras,
caballos, cérvidos, bóvidos, etc. Entre ellas destacan "La yegua
preñada" y "El pez".
Los restos que se conservan del Paleolítico
denotan una ocupación destacable por parte de grupos cazadores-recolectores. Se
caracterizan por tener un hábitat estacional en vinculación directa con
actividades de subsistencia, fundamentalmente la caza. En todos estos
asentamientos aparecen útiles y desechos de talla con clara tipología musteriense.
Esta cueva, además de ser hábitat para el
hombre prehistórico, fue lugar de enterramiento, así se demostró con el
descubrimiento de restos humanos en diferentes espacios de la cueva. En
definitiva, estamos ante la cueva con pinturas rupestres más importante de
Andalucía.
YACIMIENTO DE ACINIPO
El yacimiento arqueológico de Acinipo, se
ubica en una gran mesa caliza de origen terciario, con una altitud media de 999
mts. sobre el nivel del mar. Su prominencia en la Depresión de Ronda le
confirió un claro valor estratégico, factor este que fue tenido en cuenta en
época prerromana y romana a la hora de emplazar el núcleo poblacional.
Acinipo es uno de los asentamientos cuyo
nombre aparece por primera vez en un texto clásico como el de Ptolomeo y Plinio.
Este yacimiento ha sido objeto de atención por muchos investigadores; las
primeras noticias aparecen ya en, el siglo XVI con Lorenzo de Padilla, siendo
Fariña del Corral, en 1650, quién identificó el teatro como de época
romana.Aunque la mayoría de los restos visibles son romanos, no podemos olvidar
los importantes restos prehistóricos de la ciudad. Los hallazgos más antiguos
se remontan al Neolítico, teniendo continuidad en la Edad del Cobre y la del
Bronce. Va a ser en la fase prehistórica y con el impacto colonizador fenicio
cuando Acinipo tenga un auge importante, que se verá rematado en época romana,
precedida de la fase ibérica..
La factores que intervinieron en la ubicación
de Acinipo, en el espacio actual son múltiples. De una parte su prominencia en
la depresión, como uno de los puntos más altos de ésta, le confirieron un claro
valor estratégico y de dominio visual del territorio circundante. De otra, el
enclave romano de Acinipo se encuentra en una zona de fácil comunicación con
otras áreas de la provincia romana. Los accesos al Valle del Guadalquivir, a la
costa gaditana y al rosario de depresiones del surco intrabético, son bien
perceptibles, lo que le permitió fáciles contactos y relaciones comerciales con
otras áreas, según se desprende de los hallazgos numismáticos (Acinipo gozó de
la potestad de acuñar monedas).
Otro factor que influyó en la ubicación de
este núcleo fue la disponibilidad de tierras potencialmente fértiles para uso
agrícola. Estas tierras explotadas desde el Neolítico, tuvieron una gran
importancia en época romana, e incluso en nuestros días siguen siendo las más
aptas para la agricultura de la Depresión de Ronda.
Por otro lado, el municipio de Acinipo, se
benefició, de recursos existentes en su espacio natural próximo, tales como
mármol, piedra para la construcción, mineral de hierro y arcilla de excelente
calidad para la producción alfarera.Dado el espacio excavado, la fase romana es
la más importante. No obstante, existen estructuras asignables a la fase
prehistórica reciente, como las cabañas circulares con porche empedrado.
Desde finales del siglo I. a. C. se observa
una trama urbanística y de construcción típicamente romana, siendo su máxima
expresión el teatro de la ciudad que por sus rasgos técnicos constructivos se encuadra
cronológicamente a fines del siglo I. a. C. Del mismo modo, en la parte central
de la Mesa podemos apreciar los restos de lo que pudo ser el foro o la plaza
pública de Acinipo. Junto a este centro social, político, económico y
religioso, en el área de esta ciudad amurallada, existían otros edificios de
carácter público como las termas (baños públicos) de las que se conservan tres
piscinas, el teatro, templos, uno de los cuales estuvo en pie hasta pincipio de
siglo, etc. Esto nos demuestra el auge urbanístico que adquiere Acinipo en
estos primeros siglos del Imperio y el fuerte desarrollo que alcanzó la ciudad,
a la vez que elocuente reflejo de un poder bien establecido. Todo lo contrario
parece ocurrir a partir del siglo III d.C. en el que Acinipo decae, siendo en
el IV d.C. cuando dicho núcleo urbano pierde su papel dominante en la zona,
pasando éste a la cercana Arunda (Ronda).
Y en Ronda, nos bajamos en la Estación de Autobuses y caminamos hacia la Plaza de Nuestra Señora del Socorro. I GLESIA DE NUESTRA SEÑORA DEL SOCORRO
Nos retratamos con Blas Infante.
Se encuentra si en la plaza de su mismo nombre. Sustituye a otra anterior que existió en este mismo lugar y que fue incendiada y destruida en el año 1936. La actual iglesia responde a un proyecto del arquitecto malagueño Enrique Atencia, realizado entre los años 1950 y 1956.
Su origen se remonta a la existencia en este mismo lugar de una primitiva ermita donde estuvo el Real Maestre de Calatrava en los tiempos de la conquista de la ciudad.
Posteriormente el lugar sería destinado a lazareto y por último a hospital de pobres y peregrinos, que acabó recibiendo el nombre de El Socorro.
Este hospital que sería consagrado el día 2 de noviembrede 1557 por el obispo de Málaga, don Francisco de Pacheco de Córdoba.
Durante los años del régimen de Franco, la plaza en la que se encuentra ubicada la iglesia fue conocida como "Plaza del General Franco", pero a partir de 1981, ya después de la transición a la democracia, el alcalde de esta ciudad, Juan Harillo Ordóñez, firmó un decreto de fecha 21 de abril 1981 por el cual oficialmente se cambiaba el nombre de la plaza al actual de Plaza del Socorro, ordenando también la retirada de placas en las paredes en memoria de Franco.
La iglesia actual es de planta cuadrada y está organizada interiormente en tres naves. En su cubierta, ornamentada a base de yeserías de tipo barroco, se incluyen un total de cinco cúpulas, una principal sobre tambor con ventanas circulares en el crucero, ante un profundo presbiterio; y las otras cuatro, una en cada ángulo del cuadrado. El resto de las cubiertas son a base de bóvedas de cañón con lunetos que permiten la apertura de amplios ventanales con vidrieras, que aportan gran luminosidad al interior.
La fachada de la iglesia, perfectamente simétrica, está flanqueada por dos torres cuadrangulares con el cuerpo de campanas achaflanado y en planta algo más reducido que la base. Ambas torres están coronadas por chapiteles de azulejos.
La portada, situada en el centro de la fachada, está realizada en piedra y presenta hueco de acceso acabado en arco de medio punto entre pilastras pareadas que sostienen un frontón partido. Sobre la puerta de acceso, una hornacina cobija una imagen del Niño Jesús. Toda la portada se corona con un frontón curvo de líneas quebradas sostenido por grandes ménsulas, en cuyo tímpano aparece un escudo imperial de gran tamaño entre cartelas.
hABLAMOS DE LA ASAMBLEA DE RONDA DE 1918
Se conoce como Asamblea de Ronda, o Asamblea de las provincias andaluzas en Ronda a una asamblea andalucista convocada por los Centros Andaluces que tuvo lugar en la ciudad malagueña de Ronda en enero de 1918. Se trató de la primera asamblea regionalista andaluza, donde se acordó la adopción de lo que Blas Infante llamó las insignias de Andalucía: la banderay el escudo de Andalucía.1
En esta asamblea, además, se asume el proyecto de Constitución Federal para Andalucía de 1883, conocido como Constitución de Antequera, como Carta Magna para Andalucía y se esboza un programa político de actuación, que supondría la continuación del despliegue del movimiento andalucista iniciado a finales del siglo XIX y cuyos antecedentes más inmediatos fueron la fundación en 1916 del primer Centro Andaluz en Sevilla, presidido por Infante, y de la revista Andalucía, órgano de relación entre los correligionarios del andalucismo. En la asamblea se debatieron temas como centralismo, caciquismo, hambre y pan, y se reclamó la autonomía de «la Patria Andaluza» ante la Sociedad de Naciones. En ella se llama a Andalucía «país» y «nacionalidad».La Asamblea de Ronda sería continuada por la Asamblea de Córdoba de 1919.
PUENTE NUEVO SOBRE EL TAJO
El Puente Nuevo constituye, junto con la Plaza de Toros de la Real Maestranza de Caballería de Ronda, el símbolo y el alma de la ciudad.
Hubo dos grandes proyectos para la realización de esta obra. El primero del año 1.735, reinando Felipe V, que consistió en un arco de35 metros de diámetro, y cuyas obras duraron tan sólo 8 meses, pero que resultó infructuoso pues seis años después se derrumbó, ocasionando la muerte a unas 50 personas aproximadamente.
Pocos años más tarde comenzaron las obras, concretamente en 1751 y finalizaron en Mayo de 1793, coincidiendo con la celebración de la Real Feria de Mayo en Ronda. En total se invirtieron más de 40 años, estando al frente de las mismas el arquitecto D. José Martín de Aldehuela, natural del pueblo turolense de Manzanera.Esta obra maestra de98 metros de altura, construida en sillares de piedra extraídos del fondo de la garganta del Tajo, permitió la conexión del barrio moderno o del Mercadillo con el barrio antiguo de la ciudad y posibilitó la expansión urbanística de la ciudad. Desde sus balcones, las vistas de las casas colgando sobre el mismo borde del precipicio, son espectaculares.
Este majestuoso monumento alberga en su interior un moderno concepto de Centro de Interpretación, sobre esta magna obra de ingeniería dieciochesca y sobre los diferentes aspectos de su entorno: fauna, vegetación, geológicos, urbanísticos, históricos, etc.
Hubo dos grandes proyectos para la realización de esta obra. El primero del año 1.735, reinando Felipe V, que consistió en un arco de
Pocos años más tarde comenzaron las obras, concretamente en 1751 y finalizaron en Mayo de 1793, coincidiendo con la celebración de la Real Feria de Mayo en Ronda. En total se invirtieron más de 40 años, estando al frente de las mismas el arquitecto D. José Martín de Aldehuela, natural del pueblo turolense de Manzanera.Esta obra maestra de
Este majestuoso monumento alberga en su interior un moderno concepto de Centro de Interpretación, sobre esta magna obra de ingeniería dieciochesca y sobre los diferentes aspectos de su entorno: fauna, vegetación, geológicos, urbanísticos, históricos, etc.
Y en el Tajo
Recorrimos sus calles.
Sus murallas,
Bajamos a los toros puentes
Y Fernando del Pino nos ilustró extensa y muy profundamentye.
PLAZA DE TOROS
No se nos permitió entrar a pesar de que en los folletos anunciaban la gratuidad de la visita dos horas antes del cierre en el mes de noviembre. Vimos los exteriores y el Parador y mirador.
La Plaza de Toros de Ronda, por su historia y
por su arquitectura, por su carácter y belleza está reconocida como una de las
más antiguas de España y una de las más monumentales que existen.
No es por casualidad, Ronda se considera
una de las cunas de la tauromaquia moderna, surgida en el Siglo XVIII, en una
ciudad donde se conservaba muy viva la tradición de la caballería al existir
una corporación dedicada a que no se perdiera el arte ecuestre. Las necesidades
de defensa del territorio hicieron que Felipe II fundase en 1.572 La Real
Maestranza de Caballería de Ronda, para que se mantuviese el necesario manejo
de los caballos. Para ello este cuerpo dedicó un espacio de la ciudad para los
ejercicios ecuestres, entre los cuales, como es tradicional en España desde la
Edad Media se incluyeron los juegos de destreza con toros.
Cuando en el siglo XVIII los toreros a
pie toman el relevo de los caballeros en los juegos con el toro, surge en Ronda
la familia de los Romero, que durante tres generaciones reúne a los toreros mas
singulares de la época. Entre ellos, destacó sobre todos Pedro Romero
(1754-1839), figura cumbre y la más representativa de la tauromaquia. Se
retiró después de estoquear más de 5000 toros sin recibir el más mínimo
rasguño. Su personalidad consiguió que su oficio alcanzara dignidad social y
respeto, al reunir valor, destreza, y sentido estético.El auge del toreo llevó
a la Real Maestranza de Caballería de Ronda a erigir su famosa plaza, obra que
se atribuye a Martín de Aldehuela, el mismo arquitecto del grandioso Puente
Nuevo sobre el Tajo de Ronda.
La construcción de la plaza duró seis años y
fue inaugurada en 1785, con una corrida de toros en la que actuaron Pedro
Romero y Pepe Illo. Concebida en piedra arenisca con un esquema monumental, la
nobleza de su traza arquitectónica, con su doble galería de arcadas y la
ausencia de tendidos al descubierto, le confiere un espíritu más de claustro
que de recinto para espectáculos taurinos, recordando al patio circular del
famoso Palacio de Carlos V en la Alhambra de Granada. Su ruedo de 66 metros de
diámetro está circundado por un callejón formado por dos anillos de piedra. Los
tendidos tienen cinco filas de gradas, de dos pisos, con 136 columnas formando
68 arcos de columnas toscanas, salvo las del Palco Real. Cubierta con tejado a
dos aguas de teja árabe, la elegancia de su interior no tiene parangón en
ninguna otra plaza de toros.
En el siglo XX, una segunda dinastía de
toreros rondeños, los Ordóñez, constituye otra aportación de Ronda a la
historia de la Tauromaquia. Cayetano Ordóñez y su hijo Antonio Ordóñez
despertaron, por su manera de concebir el toreo, el interés de personajes tan
ilustres como Orson Wells y Ernest Hemingway.
Fue precisamente Antonio Ordóñez quien en 1954
creó la mundialmente conocida corrida goyesca, donde el exorno y la vestimenta
nos trasladan a la época del pintor Goya.
En el interior de la Plaza de Toros de Ronda
se pueden visitar el museo de tauromaquia, la Real Guarnicionería de la
casa de Orleans y la Colección de armas de fuego antiguas.
ALAMEDA DEL TAJO
Antiguamente llamada Alameda de San Carlos.
Situada junto a la Plaza de Toros y al borde de la cornisa del Tajo, se trata
de un excelente paseo arbolado del Siglo XIX que ofrece unas magníficas vistas
panorámicas de la Serranía de Ronda y de los paisajes cercanos a Ronda.
IMAGEN La forman cinco avenidas paralelas
repletas de una gran variedad de especies vegetales, que vienen a desembocar en
un paseo con una impresionante balconada situada sobre el mismo borde del
abismo. Desde el punto de vista botánico, cabe destacar que algunos de sus
árboles bicentenarios figuran en la guía de árboles notables de la provincia de
Málaga: el cedro del Himalaya, el enorme pino piñonero o la acacia de tres
espinas, junto al estanque de los patos.
El paseo se prolonga hacia el Norte, bordeando
la cornisa hasta el Hotel Victoria, por el llamado paseo de los ingleses. Bajo
él se encuentra la espectacular formación geológica conocida popularmente como
el "Asa de la Caldera". Hacia el sur, se une al Paseo de Blas Infante
para, a través de las terrazas del Parador Nacional de Turismo, concluir en el
mismo Puente Nuevo.En este pulmón verde se localiza el teatro Vicente Espinel.
Y de allí, el paseo, por Museo de Lara, nos impresionó la Inquisición.. Y calle adelante,
I
PALACIO DE MONDRAGÓN-MUSEO MUNICIPAL
El Palacio de Mondragón, conocido también como
Palacio del Marqués de Villasierra, constituye un magnifico bien
arquitectónico, sin duda el monumento civil más significativo de Ronda.
Dice la leyenda que fue residencia del gran rey Abbel Malik o Abomelic, hijo del sultán de Marruecos Abul Asan. A los pocos años de la muerte de Abomelic, el reino de Ronda pasó a depender del de Granada, sabiendo que el último gobernador musulmán Hamet el Zegrí también residió en este palacio.
Resulta difícil, sin una exploración arqueológica, determinar cómo sería este palacio en fase musulmana, aunque se puede asegurar que se organizaría alrededor del patio más cercano al tajo, con el actual jardín incorporado, no existiendo, desde luego, la actual crujía de la fachada.
En época cristiana es cuando se realizaron las obras más importantes del palacio. Es de ésta época el patio más cercano al Tajo por el que se accede al jardín. Es un patio muy original con triple arquería baja en tres de sus lados, a partir de arcos de medio punto primorosamente aparejados en ladrillo raspado sobre columna de mármol con basa capitel y ábaco. Una fina moldura labrada en ladrillo saliente del paramento recuadra los arcos a modo de alfiz, creando una franja horizontal continua, tangente al trazado de los arcos.
La cornisa también se organiza basándose en ladrillo moldurado dejando una faja lisa entre la cornisa y la franja que trasdosa los arcos, la cual se decora con riquísima azulejería. Igualmente se decoran los triángulos curvilíneos que se forman entre el tracdos de los arcos y el recuadro molturado que los envuelve con círculos de clara vocación renacentista.
El segundo patio es de estilo tardo gótico, portado con columnas de piedra y capiteles reutilizados que soportan zapatas de madera de acceso a la planta intermedia donde se encuentran las diversas salas del Museo.
El patio de entrada es primoroso, con galería en dos de sus testeros, con arcos de medio punto, alquitrabe, friso decorado con triglifos, metopas y cornisas. Todo ello magníficamente labrado en ladrillo, sobre columnas con basa y capitel corintio renacentista de gran calidad. Muy parecido a este patio, se construye uno en Sevilla en el desaparecido Patio de Levies y que actualmente se encuentra montado como galería en los Reales Alcázares.
En el siglo XVIII se construyó el cuerpo exterior de fachada, con importante sillería y portada con doble orden de columnas marcadas sobre pedestal dórico el bajo y jónico apilastrado el alto, coronándose la organización con un frontón curvo que se rompe en el centro para alojar un tercer orden decorativo con columnas corintias apareadas. Todo este cuerpo dieciochesco se ocupa en planta baja con el apeadero y las antiguas cuadras.
Mención especial merece el Salón noble del palacio con extraordinario artesonado mudéjar.
Dice la leyenda que fue residencia del gran rey Abbel Malik o Abomelic, hijo del sultán de Marruecos Abul Asan. A los pocos años de la muerte de Abomelic, el reino de Ronda pasó a depender del de Granada, sabiendo que el último gobernador musulmán Hamet el Zegrí también residió en este palacio.
Resulta difícil, sin una exploración arqueológica, determinar cómo sería este palacio en fase musulmana, aunque se puede asegurar que se organizaría alrededor del patio más cercano al tajo, con el actual jardín incorporado, no existiendo, desde luego, la actual crujía de la fachada.
En época cristiana es cuando se realizaron las obras más importantes del palacio. Es de ésta época el patio más cercano al Tajo por el que se accede al jardín. Es un patio muy original con triple arquería baja en tres de sus lados, a partir de arcos de medio punto primorosamente aparejados en ladrillo raspado sobre columna de mármol con basa capitel y ábaco. Una fina moldura labrada en ladrillo saliente del paramento recuadra los arcos a modo de alfiz, creando una franja horizontal continua, tangente al trazado de los arcos.
La cornisa también se organiza basándose en ladrillo moldurado dejando una faja lisa entre la cornisa y la franja que trasdosa los arcos, la cual se decora con riquísima azulejería. Igualmente se decoran los triángulos curvilíneos que se forman entre el tracdos de los arcos y el recuadro molturado que los envuelve con círculos de clara vocación renacentista.
El segundo patio es de estilo tardo gótico, portado con columnas de piedra y capiteles reutilizados que soportan zapatas de madera de acceso a la planta intermedia donde se encuentran las diversas salas del Museo.
El patio de entrada es primoroso, con galería en dos de sus testeros, con arcos de medio punto, alquitrabe, friso decorado con triglifos, metopas y cornisas. Todo ello magníficamente labrado en ladrillo, sobre columnas con basa y capitel corintio renacentista de gran calidad. Muy parecido a este patio, se construye uno en Sevilla en el desaparecido Patio de Levies y que actualmente se encuentra montado como galería en los Reales Alcázares.
En el siglo XVIII se construyó el cuerpo exterior de fachada, con importante sillería y portada con doble orden de columnas marcadas sobre pedestal dórico el bajo y jónico apilastrado el alto, coronándose la organización con un frontón curvo que se rompe en el centro para alojar un tercer orden decorativo con columnas corintias apareadas. Todo este cuerpo dieciochesco se ocupa en planta baja con el apeadero y las antiguas cuadras.
Mención especial merece el Salón noble del palacio con extraordinario artesonado mudéjar.
Según los estudios arqueológicos desarrollados en la zona, esta iglesia se ubicó muy próxima a los restos de una basílica paleocristiana del siglo V d.C. También algunos historiadores se remontan a la época romana en la que tuvo la función de templo. Este último extremo aún no se ha contrastado arqueológicamente.
En el mismo lugar se construyó después, bajo la dominación islámica, la mezquita mayor de la Medina. De ella solo se conserva en la actualidad el arco del Mirhab y un trozo del muro del mismo con decoración de ataurique, oculto tras el retablo del altar del sagrario.
Los Reyes Católicos, tras la conquista de la ciudad, ordenaron levantar en el lugar de la mezquita el templo, cuyas obras se iniciaron en 1485 y tras muchas vicisitudes, se concluyeron a fines del siglo XVII.
E l estilo gótico queda representado en sus tres naves. Aunque el terremoto de 1580 destruyó parte de la fábrica ocultando la pureza del gótico, éste puede apreciarse aún en las columnas exentas o adosadas y en las ojivas de los arcos que sustentan. Estos a su vez se apoyan sobre capiteles corridos con ornamentación vegetal de cardinas y antropomórfica.
Destacable es el área renacentista de la iglesia conservando un coro primoroso de dos pisos, realizado en madera de nogal y cedro. La sillería baja está compuesta por 12 sitiales con respaldos tallados con los símbolos de las letanías de la Virgen María, mientras que la parte alta lo componen 24 sitiales respaldados con bellas tallas del Sagrado Corazón, apóstoles y santos.
La iglesia remata con diferentes elementos barrocos, coincidentes con la finalización de las obras en este periodo, destacando el retablo de la Virgen del Mayor Dolor, que se organiza en tres calles con una profusa decoración lateral. Un gran hueco con arco de medio punto abre al camarín donde se localiza la imagen de la Virgen de los Dolores, atribuida por unos a Montañés y por otros a “La Roldana”.
AYUNTAMIENTO
Situada en la plaza Duquesa de Parcent, la
actual sede del Ayuntamiento de Ronda fue cuartel de milicias y su construcción
se remonta a 1.734. Tras su restauración se construyó sobre antiguas
tiendas con soportales de la Plaza Mayor, a las que se unieron la antigua
alhóndiga y el pósito.
El edificio consta de tres plantas y un
sótano. Las superiores llevan arquerías superpuestas que recorren toda la
fachada. Arquerías, impostas y portada son de piedra, mientras que el resto del
muro está revocado.
La portada es adintelada entre pilastras,
albergando a cada lado un escudo, uno el correspondiente a Ronda y otro que
representa a Cuenca. Ambas ciudades se encuentran hermanadas.
En su interior cabe destacar el magnífico
Salón de Plenos y el artesonado mudéjar, ubicado en la escalera principal del
edificio.
Y BAJAMOS
MURALLAS Y PUERTAS ISLÁMICAS
La ubicación de Ronda en un promontorio rocoso
le ha conferido a lo largo de la historia un marcado valor estratégico y
defensivo. En época musulmana se localizaba la Medina Musulmana, claramente
delimitada tanto por la barrera natural que supone la garganta excavada por el
Guadalevín como por las propias murallas de la ciudad.
De la importante cerca amurallada conservada debemos destacar la puerta de Almocábar situada en el sector sur de la medina, construida en el siglo XIII y reestructurada en el periodo de Carlos V. Esta puerta toma su nombre de la palabra “Al-maqabir“, cementerio, por estar cerca de la necrópolis principal extramuros, según costumbre islámica. Fue una de las puertas principales de acceso a la ciudad y daba entrada al Barrio Alto, actualmente del Espíritu Santo y a la medina musulmana.
A mediados del S. XVI, se le añadió otro cuerpo de acceso en su parte delantera de planta cuadrangular y con puerta principal almenada de estilo renacentista, consistente en un arco de medio punto en piedra, sobre el que figura un gran escudo real sostenido por el águila imperial.Otro hito importante de la cerca amurallada se localiza en el sector este de la Ciudad: las murallas y puertas de la Cijara. Este área se compone de una doble línea defensiva que albergaba los arrabales islámicos de Ronda, donde se localizaban los Baños Árabes.
Por último, destacar en el sector Oeste de la ciudad, las murallas de la Albacara, cuya función era defender áreas productivas de la ciudad (molinos) y albergar el ganado en caso de riesgo.
En este sector se localizan otras dos puertas de acceso a la medina: la puerta denominada del Cristo o de los Molinos y la puerta del Viento.
De la importante cerca amurallada conservada debemos destacar la puerta de Almocábar situada en el sector sur de la medina, construida en el siglo XIII y reestructurada en el periodo de Carlos V. Esta puerta toma su nombre de la palabra “Al-maqabir“, cementerio, por estar cerca de la necrópolis principal extramuros, según costumbre islámica. Fue una de las puertas principales de acceso a la ciudad y daba entrada al Barrio Alto, actualmente del Espíritu Santo y a la medina musulmana.
A mediados del S. XVI, se le añadió otro cuerpo de acceso en su parte delantera de planta cuadrangular y con puerta principal almenada de estilo renacentista, consistente en un arco de medio punto en piedra, sobre el que figura un gran escudo real sostenido por el águila imperial.Otro hito importante de la cerca amurallada se localiza en el sector este de la Ciudad: las murallas y puertas de la Cijara. Este área se compone de una doble línea defensiva que albergaba los arrabales islámicos de Ronda, donde se localizaban los Baños Árabes.
Por último, destacar en el sector Oeste de la ciudad, las murallas de la Albacara, cuya función era defender áreas productivas de la ciudad (molinos) y albergar el ganado en caso de riesgo.
En este sector se localizan otras dos puertas de acceso a la medina: la puerta denominada del Cristo o de los Molinos y la puerta del Viento.
PALACIO DEL REY MORO
Se localiza en la calle Cuesta de Santo
Domingo. La primera prueba documental de esta imponente casa-palacio data del
siglo XVIII, aunque ha sufrido frecuentes reestructuraciones fruto de los
sucesivos cambios de propietario. La planta de la casa es irregular y
laberíntica, con abundantes escaleras y pasillos que sirven para salvar los
desniveles. La fachada, de gran longitud, se adapta a la curva de la calle y
presenta dos torres de distinta altura así como dos puertas.
En su interior se conserva la mina de
captación de agua, de origen árabe. Se trata de una compleja obra islámica que
desciende al fondo del Tajo donde discurre el Río Guadalevín, que se construyó
aprovechando una diaclasa en la roca o grieta natural vertical donde se
desarrolla una escalera tallada en la roca con más de 200 peldaños y que
desciende en vertical unos 100 metros. En su interior se localizan una serie de
estancias, desde aljibes a habitaciones, que fueron utilizadas como polvorín y
depósito de grano.
El edificio que alberga esta obra
islámica se encuentra actualmente cerrado al público, aunque si son visitables
la mina y sus valiosos jardines aterrazados, con presencia constante de agua en
fuentes y canalillos diseñados y construidos en 1.923 por el prestigioso
arquitecto y paisajista Forestier, de origen francés, por encargo de la Duquesa
de Parcent. Se trata de un jardín en diferentes niveles salvados por
escalinatas decoradas con azulejos y jalonadas por fuentes y estanques
cubiertos por nenúfares.
BAÑOS ÁRABES
Este recinto termal de época musulmana es
el mejor conservado de la Península Ibérica. Se localiza en el Antiguo
Arrabal Islámico de la Ciudad, actualmente denominado Barrio de San Miguel en
el extraradio de lo que fue en su momento la Medina Musulmana de Ronda.
Fueron construidos junto al Arroyo de las
Culebras, lugar perfecto para el abastecimiento de agua, que se desplazaba a
través de un sistema de noria, perfectamente conservado en la actualidad.
La cronología de los Baños Árabes de Ronda se
remonta a los siglos XIII-XIV d.C., estructurándose estos en tres zonas
fundamentales, siguiendo el modelo romano: salas de baño frío, templado y
caliente. Hasta la actualidad ha llegado prácticamente en su integridad el
sistema hidráulico de los mismos.
La sala central es la más grande y consta de
tres cuerpos, separados mediante cuatro pares de arcos de herradura sobre
columnas de ladrillo y piedra, que sostienen bóvedas de cañón (semiesféricas)
con bellos tragaluces en forma de estrella cerrados con cristales
ARCO DE FELIPE V
Tras el hundimiento del primer puente nuevo en
el año 1.741, se planteó la necesidad de mejorar esta entrada de la ciudad
debido al gran flujo de personas y mercancías que de nuevo se vieron obligados
a utilizarla.
La vieja Puerta Árabe de la Puente fue
sustituida y agrandada por la actual durante el reinado del primer Borbón del
trono español Felipe V, en el año 1742, según consta en la inscripción en
piedra situada próxima a la puerta.
Este emblemático monumento de la ciudad consta
de un arco doble de sillería, coronado por tres pináculos y adornado con la
concha de los Anjou y el escudo real de los Borbones en su cara exterior.
PALACIO DEL MARQUÉS DE SALVATIERRA
Localizado en el Conjunto Histórico de Ronda y
próximo al Barrio de Padre Jesús, posee una espléndida fachada barroca n
sillería de piedra con puerta adintelada, columnas corintias y un gran balcón
de forja rondeña. La fachada se remata con un frontón quebrado que alberga
figuras desnudas, de clara influencia indiana.
Las figuras masculinas se burlan y sacan sus
lenguas; mientras las femeninas ocultan pudorosamente "sus
partes". Ambas soportan el dintel en el que se encuentra el
escudo nobiliario de la familia que encabezara Vasco Martín de Salvatierra,
continuo de los Reyes Católicos tras la conquista de Ronda.
El interior del Palacio representa la
austeridad de la casa rondeña palaciega de los siglos XVII y XVIII.
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