El primer congreso de Castillo de Locubín se celebró durante los días 17 y 18 de marzo en la sala alta del antiguo Pósito, transformado en Biblioteca Municipal. Buen recinto, obra del arquitecto Antonio Martín Espinosa de los Monteros, albergó a un público que llenaba todo el recinto y se mantuvo expectante y muy atento al desarrollo de las comunicaciones que versaron sobre diversos aspectos de la villa castillera. También se acompañó este congreso de un merecido homenaje al catedrático de Lengua Española en la Universidad de Almería Manuel Peñalver Castillo, hombre de bien que trasciende con su creación literaria el mundo de lo local . Se alcanzó una gran altura de aportaciones científicas iniciándose con los saludos del alcalde Cristóbal Rodríguez y del diputado provincial Juan Ángel Pérez Arjona.
Francisco Javier Olmo Contreras abrió el turno de exposiciones con Patrimonio de Castillo de Locubín: Un estado de la cuestión; un canto de reivindicación al patrimonio castillero en medio de muchos elementos perdidos o irrecuperables. Se hicieron apuestas de futuro como las de Rafael Bravo Segovia sobre Los castillos de Locubín: Hisn de Cabeza Alta. Daniel Peinado Navas ilustró La medicina en Castillo sin olvidar el pasado asistencial y el curanderismo. La profesora universitaria Concepción Castillo se remontó al pasado musulmán e hizo un canto lírico con su Castillo de Locubín y sus entornos en textos de al-Ándalus. No asistió, pero su hijo hizo presente a Trinidad Rosales Galán, que trató de reivindicar la figura del famosos arquitecto Juan de Aranda: Salazar con Un castillero que no olvidó sus raíces.
El homenajeado Manuel Peñalver Castillo ilustró con referencias literarias e históricas el origen del término “Locubín, un topónimo con historia”; desde las Trescientas de Juan de Mena hasta Madoz pasando por fuentes literarias diversas relacionaron el término con el agua. No faltaron las reivindicaciones o elogios a los colectivos como el de Rafael Álvarez de Morales con Los maestros de escuela en Castillo de Locubín; y al mundo de los ciegos, José María Peinado encomió la labor de D. Antonio Cristóbal Hernández Contreras del Moral y Lara ("Pajarillo"): El valor del conocimiento; en otra rama, Miguel Contreras con El transporte de viajeros en Castillo de Locubín a través del tiempo; pues se remontó a los primeros vehículos públicos de los años de su abuelo e hizo un canto a la esencia y nobleza castilleras, o la ilustrada y concienzuda de Francisco Quesada con la reivindicación de Pablo Rueda Lara: Museos y colecciones. Se trató sobre los orígenes de la historia local y de las aldeas, y así lo hizo Ángel Olmo Quesada con Ventas del Carrizal: pasado, presente y futuro. Sin faltar el estudio etnográfico del alma castillera, Dolores Ruiz Sevilla trató sobre los: Ritos de nacimiento, bautizo, bodas y defunciones en Castillo de Locubín; o su marido y profeso José Morales Castillo se remontó a los primeros años de la : Historia del fútbol en Castillo.
Labor de Archivo fue Ricardo San Martín con Documentos de Castillo de Locubín, siglos XV al XVI y otros aspectos de la población según varios padrones. Y, también, se propusieron o se refrescaron acontecimientos recientes. Así lo manifestó José Antonio Jiménez Castillo: "Deporte, naturaleza y desarrollo en la Sierra Sur de Jaén. El horizonte infinito".
Cerró el cicló de ponencias Francisco Martín Rosales con una visión global y eco histórico de la conquista de las tierras castilleras mediante a exposición de Repartimiento y roturaciones. Elogió al homenajeado y le dedicó palabas de amistad sacada de Amicitia ciceroniana” la amistad comienza donde acaba el interés”. . No olvidó la colaboración de Peñalver a la comarca de la Sierra Sur y a la ciudad de la Mota sobre todo con la reivindicación alcalaína del. Arcipreste de Hita, y el reconocimiento del diploma de Cultura por parte del ayuntamiento alcalaíno.
Como broche final del acto se homenajeó a Manuel Peñalver, dirigiendo el alcalde de nuevo palabras de gratitud con todos los organizadores y sintiéndose orgulloso de compartir su nacimiento castillero. En las palabras de homenaje, fue anfitrión José Morales que recorrió su biografía y se centró en su último artículo periodista versado sobre la épica del fútbol, un bello canto al esfuerzo de la reciente gesta barcelonista. Peñalver agradeció a todos s participación y dedicó palabras del afecto al ayuntamiento, a los coordinadores-Lola Ruiz y Pepe Morales( y en verdad que pusieron un gran empeño y lograron una excelente organización),-ponentes y paisanos, recogió citas sobre la gratitud y defendió la singularidad de su villa sin olvidar los lazos entrañables y el mismo destino compartido y futuro con la ciudad de Alcalá la Real
En la mañana del sábado, las comunicaciones se transformaron en propuestas de futuro para el municipio castillero con integrantes de diversos sectores en una mesa redonda. Buen colofón. Castillo de Locubín era un municipio eminentemente agrícola en la comarca del sur de Jaén. Ahora te recibe con su polígono industrial y , como en muchas ciudades, el estacionamiento usual se ha trasladado a su carretera de circunvalación. Es muestra de que lo restos de la Villeta sonríen en su entorno fortificado, la iglesia de San Pedro proclama un legado por difundir de pueblo andaluz y sus huertas refrescan las mentes para que nunca decaiga en el abatimiento. Las piedras de su viejo puente son un testimonio de la fortaleza y el esfuerzo de una población que siempre supera la adversidad y forjó el mejor futuro con el trabajo de sus padres- en su tierra y en la emigración- para sus hijos, la conquista de su territroio. La Acamuñay la Nava abrigan esta illa con su sombra alargada en muchos siglos de historia.
CASTILLO DE LOCUBÍN
CELEBRÓ
No hay comentarios:
Publicar un comentario