Archivo del blog

sábado, 23 de julio de 2016

PERO PONCE DE LEON ( 1556-1558)

PERO PONCE DE LEON ( 1556-1558)


          Pedro Ponce de León era hijo de María Ponce de León y Rodrigo Mejía Carrillo, VIII señores de Santa Eufemia. Fue caballero veinticuatro de la ciudad de Jaén por los cincuenta de l siglo XVI.
 En el  mes de noviembre se hallaba en Alcalá. corregidor y cumplió  el primero año siguiente al doce de dciembre, cobrando 36.5000 maravedíes y el alcalde mayor  6.000 maravedíes . En Loja, el 16 de diciembre se recibió al nuevo corregidor y fueron sus alcaldes mayores  el licenciado Antonio Rubio, y el bachiller Antonio del Poyo, por  alguacil mayor  Alonso de Aguilera y Hernando de Cáceres. En Alcalá, su alcalde mayor fue el licenciado Pedro Venegas y alguacil mayor Pedro Francisco de Carvajal y Peñalosa y Hernando Rodríguez..
Los años de 1556, 1557 y 1558  fueron de gran esterilidad, en el primero la carencia de trigo dio lugar a que Alcalá  no pudiera responder a la petición de Francisco de Verdugo, abastecedor de la Armada, desde Málaga, pues no había apenas en la ciudad ([1]). Por provisión real se llevó a cabo un registro de trigo en toda la ciudad y el Castillo. Al mismo tiempo se obligó a que sembraran los labradores. Lo mismo aconteció en Loja, donde se embargó todo el trigo procedente de las personas e instituciones de las heredades que no residieran en el término, hasta tal punto se encontraba la situación e la ciudad que, con lo que se sacaba de las iglesias, los hospitales , el  voto de Santiago y los prebendados, no había ni para almacenar 1.000 fanegas, ni para abastecer a la población en el mes de febrero. Hubo necesidad de poner guardas en los caminos para que no sacaran trigo fuera de la ciudad  ([2]). El panorama económico  se  cierra on unos años en los que también es abundante la industria de la seda y hay crisis en el cultivo de vino que no se le deja vender en Granada , Málaga y Vélez.
En su tiempo, las obras de promoción del municipio alcaláino   consistieron básicamente,  en 1556, en  el arreglo de la Puerta de los Arcos,  el patio y el aljibe de las Casas de Cabildo, también se hizo el pilar de la Fuente Nueva, y se arregló el pilar de la Mora por Sancho Menéndez gastándose  grandes cantidades .Se hicieron  también  obras importantes en el Castillo de Locubín: la calle de entrada, las carnicerías y el corral junto al castillo. En Alcalá la obra principal fue la terminación del  matadero, que alcanzó la cifra de 352.414 y medio maravedíes ([3]). En 1557, por su parte, se reparó el puente de Yerbatunal y el del Guadalcotón, viniendo por aquella fecha el maestro Luis de la  Madrid desde Granada.. Durante este segundo año de su mandato vino, desde Málaga, el maestro de aguas Illán Sánchez  para dirigir la obra de conducir las aguas de la Fuente de la Mora de los Llanos hasta la Fuente Nueva  de la Mora del Llanillo. La obra se realizó durante tres semanas de los meses de febrero y marzo interviniendo setenta y ocho peones y un picapedrero, Pedro Alonso. Su costo importó  cincuenta y tres mil cuatrocientos maravedíes. El alumbramiento del nacimiento fue realizado por cuatro peones diarios, un oficial y el maestro de obras Illán Sánchez y consistió en abrir la puerta de la mina y extender el encañamiento. En ello participaron Juan de Bolívar y su hijo, Miguel de Bolívar, junto con otros peones, que se encargaron de los atanores, las pilas, la tricheda, mamparo del trasvinamiento del agua que salía de la Mora, argamasón, azular las juntas y allanar la placeta de la Mora y los sillares y canales de las fuentes. El precio de los trabajos costaban a dos reales y un cuartillo el peón y el picapedrero a cuatro reales y medio. En el mes de julio se abrieron las zanjas para conducirlas a la nueva fuente del las Peñuelas.
En el mes de octubre, Miguel de Bolívar hizo las trazas y realizó las obras de la fuente de la Mora del Llanillo por la cantidad de 125 ducados ( 46.875 maravedíes) según la libranza del mayordomo Rodrigo Sánchez de Tordesillas a 28 de noviembre de 1558. como cantero hizo las labores de entallamemiento Sancho Melendez.  Encima de la fuente, se puso un león pintado y el escudo de las Armas Reales, obra del italiano Pedro Sardo, cuyo costo supuso 6.000 maravedís. La ciudad trajo a Alcalá  y presentó como tasador de las obras a Luis de Machuca, que por aquel tiempo se reconocía como maestro mayor de Obras Reales de Su Majestad en Granada. Este maestro era ya reconocido por los regidores de esta época, palpándole 10 ducados por su labor en la qual se ocupó cinco días de estar en esta ciudad e venir e volver a la ciudad de Granada  de donde vino, que merecía mucho más  Por su parte, el  maestro alcalaíno presentó a Juan de Caderas Riaño. El acuerdo del cabildo fue el siguiente:

“Las tasaron de esta manera que estaba la fuente moliente y corriente a cuatro mil e setecientos e cincuenta reales de mano, piedra e de todos los materiales, como consta del valor del arca, encañamiento de el agua para entrar e solar de la dicha fuente fecha cosa del dicho Boíivar a mil e quinientos e cincuenta e ocho maravedies”
Por la Semana Santa se arreglaron lasa calles de la ciudad para los penitentes y la procesión del Jueves Santo. También se compuso de enlosado las Casas del Cabildo por Sancho Meléndez .Martín Pérez ,carpintero realizó escaños y bancos para la audiencia  y para el cabildo. La puerta Nueva estaba en obras que llevaba a cabo Miguel de Bolívar para traer la piedra y el adobo de la fuente de la Tejuela.     
También se arregló por Luis Hernández un arrecife junto a la fuente  de la Mora y la fuente de la Peñuelas en la cantidad de 208. 245 maravedíes en el mes de noviembre de 1558, siendo alcalde mayor el licenciado Venegas. También hizo un adarve y un pretil la calle Cava. Se llevó la obra del alhorí en la parte alta de la Torre.
En su tiempo vino, como veedor de ciertos edificios,  el maestro de cantería Luis de Madrid, tanto en Alcalá como en Loja, y en ésta última se contó con la presencia de Diego de Siloé destacando las obras del reparo de l Mesón del Arroyo y de Santa Catalina, el nuevo vial  de la Carrera , y la calle Real, puente de Río Frío según las trazas de Pedro de Brenda[4].
En cuanto la relación con la Corte, los letrados de la ciudad pleiteando en la Corte para alcanzar la prórroga de la libertad de impuestos y cualquier tipo d alcabala, lo que se celebró con grandes fiestas de toros al conseguirla en el año 1557 y también se ganó una provisión por los vecinos del Castillo en la invasión de la tierras por la parte del Castillo.
 Por el tres de septiembre de 1558,  se recibió una nueva merced que consistía en el pago del cortijo del Batán y el molino de Francisco de Jamilena..

En cuanto a la gobernación del municipio, hubo varios conflictos de términos con Martos, pues el carácter exento de los alcalaínos chocaba con el cobro del quintado que se imponía por parte de la villa marteña a los vecinos castilleros y en la dehesas del Castillo con Francsico de Aranda y con Pero López y los Mazuelas, interviniendo como letrado en la Chancilleríí  de Diego de Herrera.  En 1557, persiguió a los que  entraban en tierras de realengo, como al comendador  y regidor Juan de Guevara y al licenciado Muñoz que se había apoderado de tierras para realizar un molino en la Rivera..
Se recibió una cédula real a favor de los pobres solemnidad, distinguiéndolos de holgazanes y vagabundos, pues representaban una gran parte de la población. Su fin no era sino establecer criterios con el estamento eclesiástico para repartir algunas rentas de los hospitales entre aquellos en momentos de carestía y cuyos patronos se negaban a ello. Así aconteció en Loja, cuyo hospital tuvo que replantear el reparto del Hospital fundado en tiempos de los Reyes Católicos.
            Y , con la llegada del juez de salinas, el bachiller Gracla Corona, pero, por otro lado,  su procedencia de cargos municipales los acercaba al cabildo en algunas ocasiones de conflicto de intereses ([5]).



ián,  el cabildo de Loja se enfrentó,  pus había cometido vejaciones y hecho embargos contra los vecinos, incluso  puso presos a dos regidores, resultado  cosa extraña la actuación del corregidor que aconsejó, por el mes de abril de 1558,  que éstos  se encerraran en el ayuntamiento junto con el resto de los miembros del regimiento. Esto demuestra el  carácter bidimensional del que participaban los corregidores: por una lado, defensores de
Las casas de Justicia de Alcalá no se ubicaban en un sitio fijo, pues tenemos noticias que se alquilaban casas de la Mota con caballerizas en 1557 y esta torre sirvió de vivienda y botica del físico Tauste, que murió en ese año en la ciudad,, hasta que en  ese año  el corregidor  Pero Ponce de León las cambió, por las que anteriormente vivía que se transformaron en Cárcel Real, sitio más holgado y  recuperando que hubiera cárcel en la ciudad. En la  casas de Justicia, se hicieron unas caballeriza y  por Martín Pérez varios bastidores, el cajón y , bancos para la Justicia.


            En cuanto a la labor normativa en 116 de febrero de 557, se llevó a cabo la regulación del aceite y sus molinos, y , según los registros de producciones oleícolas de años posteriores, debieron estar centradas en la zona del Castillo de Locubin. Para evitar la dispersión del mercado y la falta de control por el cabildo municipal, tres días después, se promulgó una ordenanza que impedía la compraventa de esclavos, leña y otras cosas en la Fuente del Rey en otros lugares del municipio. Por una real provisión, se repartió en aquel año trigo para la sementera a los labradores.
            En 1559, por el tres de enero, se llevó a cabo una ordenanza que regulaba el precio del agua que portaban y venían los aguadores desde la Fuente de la Mora hasta la Mota y partes altas de la ciudad. También, seis días antes regularon las funciones de los guardas y de los testigos, y participación en las penas sobre los infractores de los montes. En el día catorce, se insistía en regular las propiedades , por los daños que causaban los ganados entrando en ellas.  En 1558, se recibió una provisión real , por la que se permitieron repartir tierra para la sementera, ya que fue año de  carestía y sequedad.  En el 15 de diciembre del 1559, se permitió la licencia de que se pudieran desmochar las encinas viejas en Sotoredondo y se hizo una ordenanza para los que trajeran cargas de leña verde.
En cuanto a las funciones militares tuvo que mantener la misma postura real ante las evasivas de las dos ciudades, que, una vez rota la Paz con Francia y  con motivo de la posible entrada en guerra de Felipe II por diversos flancos, dilataron el envío de tropas mediante correos a a la Corte, alegando que mantenía compañías en defensa de la Costa, solicitadas por el Conde de Tendilla.. Sin embargo, lo que sí cooperaron las ciudades de Alcalá, Loja y Alhama, fue  con el conde de Alcaudete , en la plaza de Orán, incluso nombrando a un miembro de la familia Cabrera como lugarteniente suyo  con motivo de una de las incursiones en tierras africanas .
En el año 1558 murió el primer conde de Alcaudete don Martín  Fernández de Córdoba, señor  de Alcaudete, de Montemayor y de dos Hermanas, en el asalto de Mazagran;  y  el segundo conde don Alonso Fernández de Córdoba y Velasco fue visitado por Juan de Aranda Figueroa en nombre de la ciudad con el fin de darle el pésame  de la muerte del primer conde y la enhorabuena por haber accedido a su puesto[6].


Es un momento en el que se reclaman compañías de soldados para ir a la costa por el mes de noviembre en defensa de Málaga, atacada por  el pirata Barabarroja, rey de Argel y Túnez. En Loja se pusieron al frente del capitán general don Antonio de la Cueva. En Antequera desertaron algunos, y otros llegaron hasta Huelva y Málaga, muriendo Francisco de Maldonado, hijo del alcaide de Zagra. Las de Alcalá se pusieron a las órdenes del conde de Tendilla.

En cuanto a la labor gubernativa, tuvo que hacer frente a varios conflictos con la ciudad de Martos en 1556  por la entrada de vecinos desde el límite con el Castillo de Locubín y se entabló un pleito por la parte de Navalperal. También, salieron condenados los mayordomos de propios anteriores Alonso de Córdoba y Rodrigo Sánchez de Tordesillas.
Este corregidor junto con los regidores y oficiales que componían el cabildo, fueron condenados por haber hechos gastos sucesivos, según se muestra en la condenación del juicio de residencia. Afectaron las condenas a un censo solicitado por la ciudad, gastos de viaje a Alcaudete y todos aquellos referidos a las obras de la fuente de la Mora, arrabal y demás por no haberlos pregonado y puesto en almoneda.

            En la madrugada del 3 de octubre  del año 1558, en Yuste, moría el emperador Carlos V y la ciudad dispuso celebrar las exequias funerarias. Para ello, se vistieron de luto con ropa de paño negro todos los oficios de la ciudad,  el alcalde mayor en nombre del corregidor, regidores, jurados,  alguacil mayor, pregonero y portero y la ciudad se sirvió de los dominios de arquitectura de Miguel de Bolívar para  trazar el túmulo de la iglesia Mayor, y de Pedro Sardo, que pintarlo. Incluso hubo necesidad de que el carpintero Martín Pérez realizara algunos bancos en la iglesia. Esta se cubrió con tafetán y faisán negro y se iluminó con cera  de Granada traída por el mercader Juan García Cobo. La iglesia se adornó con colgantes negros puestos por el pertiguero, campanero y sacristanes. Doblaron las campanas en honor de la muerte del emperador y en la ceremonia se emplearon ocho ornamentos negros que se alquilaron en Granada, estoraque, ajenjo e incienso. Asistió la ciudad y se predicó con el púlpito del convento de San Francisco que se trasladó a la Iglesia Mayor. No sólo se dijeron misas en ella sino en todas las iglesias de monjes de la ciudad. Todos estos gastos importaron la cantidad de 129.917 maravedíes que se libraron el dos de diciembre.

            PREGÓN QUE SE DIO EN LA CIUDAD DE ALCALÁ LA REAL POR EL FALLECIMIENTO E LUTO DEL MUY ALTO E MUY PODEROSO EMPERADOR NESTRO SEÑOR  QUE ES EN GLORIA AL QUAL SE DIO N DOMINGO DESPUÉS DE COMER VEINTE E TRES DÍAS DEL MES DE OCTUBRE AÑO DEL SEÑOR DE MIL UINIENTOS E CINCUENTA Y OCHO AÑOS.

            PREGÓN
            Sepan todos los vecinos y moradores de esta ciudad de Alcalá la Real e su villa del Castillo de Locubín que es de su jurisdicción y otras qualquier personas estantes en ella de qualquier estado e condición que sean como la serenísima princesa nuestra señora gobernadora de estos reinos  por cédula y  carta a fecho saber a esta cibdad la pérdida y fallecimiento del muy alto y mui poderoso emperador Nuestro Señor, que es en gloria, para que como sus subditos e vasallos lo sientan y hagan en este caso el sentimiento que sta ciudad suele y acostumbra y al servicio de su Majestad conviene como por la dicha cédula real manda su thenor de la qual dize así:

            AQUÍ LA CÉDULA REAL

            La qual dicha cédula real y carta real vista por los ilustres señores, Justicia y regimiento de esta ciudad en su cabildo e ayuntamiento que para la vez hizieron e hordnaron pesándoles y sintiendo la pérdida de tan alto y poderoso prícipe la obedescieron con oon el acatamiento y reverencia debida a su Majestad y obedecida dixeron son prestos a cumplir ya aziendo lo que por ella se manda y conviene al servicio de su majestad mandaron hacer  y tener lutos y otras obras pías como esta ciudad los face y tiene por costumbre de tiempo inmemorial al fallecimiento de príncipes y reyes pasados de gloriosa memoria, nuestros señores, y para que todos lo sepan e sientan la pérdida del muy alto y muy poderoso emperador nuestro señor lo mandaron pregonar públicamente y sobre la horden que todos han de guardar  y tener sobre el tener el luto mandaron lo siguiente:
-Primeramente           que todos los vecinos de esta ciudad  y su jurisdicción y estante en ella de qualquier estado y condición que sean traygan  luto conforme a la salida de sus personas y posibilidad que tienen  treyendo lobas y capuces los que pudieren traer y los demás caperuças y  capas negras si las tubieren y los que no tubieren se pongan las capillas de las capas sopena  al que lo contrario hiziere de mil maravedís para cámara de su majestad y treinta días.
-Otro sí mandan que las mugeres de qualquier estado e condición que sena traygan lutos  y tocas negras y no traygan sayas ni otra ropa de color so la dicha pena  y de abellas perdido por el alguacil y Justicia que los tomare.
-Item que ninguna  persona, hombre  de qualquier estado e condición  que sea no trayga ropa de color so la dicha pena que es en el capítulo antes de este.
-Otro si mandan que de noche ni dedía ninguna s personas de qualquier estado e condición que sean en sus casas ni fuera de ellas no taña vigüelas ni adufes  ni sonajas ni hagan juego ni otros instrumentos de plazer so la dicha pena e treinta días de cárcel al que lo contrario hiziere.
-Otrosí mando que no haya juegos  de esgrima en la plaza ni en otras partes de esta ciudad ni los barberos afeiten ni fagan barbas a ninguna persona sopena de privación de los dichos oficios e treynta ducados.
-Otrossí mandan  los dichos vecinos que todo lo susodicho se haga guarde y cumpla como en este dicho pregón es que por el tiempo que a esta ciudad le paresce en cumplimiento de la dicha cédula e mandamiento real se lo guarde y no lo quebrante so las penas  las siguientes e demás, que se procederá contra ellos como contra personas de desobedientes al cumplimiento  del sevicio de Su Najestad  lo mandan pregonar  primeramente e lo firma los susodichos
            El licenciado Venegas Rodrigo de Aranda  Martín de Jamilena            
En el 3 de octubre de 1558, se recibió una carta  de la princesa doña Juana comunicando la muerte del emperador entre las dos y tres de la mañana, y se llevaron a cabo todos los preparativos para el túmulo y exequias locales en la Iglesia mayor,



[1] AMAR. Legajo  46  Pieza  12  Libro de Cuentas del año 1563-64.
[2] AML. Actas del cabildo del 11 de enero y del 24 de febrero de 1557.
[3] AMAR Legajo 62 Pieza   Libro de cuentas del año 1556-57. Libranzas.
[4] AML. Acta del cabildo del 12 de octubre de 1557.
[5] AML. Acta del cabildo del 30 de abril de 1558.
[6] RIVAS MORALES,Antonio Rivas. Historia de Alcaudete. Pp. 218-22.Granada 1992 .Francisco Fernández de Córdoba. Historia de los señores y condes de Alcaudete. Edición preparada. Por Antonoio Rivass. Biblioteca Alcaudetenese. Ganada 1992 .ULIERTE RUIZ, Telesforo. Los Otros Fernández de Córdoba de la Casa de Alcaudete. Alcaudete 1999.  

No hay comentarios:

Publicar un comentario