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jueves, 26 de octubre de 2017

NOTAS SOBRE EL ESPIRITISMO Y LA LOGIA LUZ DEL CRISTIANISMO DE ALCALÁ LA REAL


LOS ORÍGENES DEL ESPIRITISMO

El espiritismo, como la mayoría de los movimientos intelectuales, comenzó en España por la región andaluza. Carecen de valor histórico casi todos los antecedentes que cita el Sr. Menéndez y Pelayo. Podrán constituir una vanguardia ideológica, pero no hechos concretos de doctrina, pues todos son anteriores a 1840, fecha en que se observaron los primeros fenómenos calificados de espíritas y aún [516] tardó años en llegar su conocimiento desde los Estados Unidos a nuestra nación. Nada se recuerda anterior a la creación de la Sociedad espiritista establecida en Cádiz el 1855. Este primer núcleo, a instancias de la autoridad eclesiástica, fue disuelto el cónclave en 1857 por la civil.


También en 1857 se publicó con el titulo de Luz y verdad del espiritualismo. Opúsculo sobre la exposición verdadera del fenómeno, causas que lo producen, presencia de los espíritus y su misión, el primer libro espiritista, editado por la Sociedad citada anteriormente. Condenado por el Obispo, con su tirada se celebró un auto de fe. Consistió el segundo auto en la pública cremación de las obras de Kardec en 1861. En el mismo año vio la luz la Carta de un espiritista, por Alverico Perón, a quien Menéndez y Pelayo tomó por un autor francés, a D. Francisco de P. Canalejas, en 1868, La fórmula del espiritismo, por el mismo autor, cuyo verdadero nombre era el de Enrique Pastor y Bedoya, decano del espiritismo en Madrid, notable economista y literato, aunque algo crédulo, que falleció en 1897. 

LAS PRIMERAS SOCIEDADES

Desde 1861 hasta 1865, se funda en Sevilla la segunda sociedad espiritista, dirigida por el General Primo de Rivera, y en Madrid la Sociedad Espiritista Española, que Menéndez y Pelayo cree con error la más antigua, y luego se fundió con la «Sociedad Progreso-Espiritista» y otros innumerables grupos. El núcleo sevillano fue de los más importantes dentro de la nueva dirección, así como la Sociedad Barcelonesa, que editó y divulgó las obras de Allan-Kardec.

LA EXPANSIÓN DEL ESPIRITISMO 

En 1868 comienza la época de engrandecimiento del espiritismo, pues al estremecimiento de la revolución que despertó la conciencia española y la abrió en todas direcciones, se establecieron varios centros en Soria, Andújar y otros puntos. En Madrid se reunió el núcleo de la Sociedad Espiritista [517] Española, que fundó la revista El Criterio, titulada más tarde El Criterio Espiritista y que acabó llamándose La Fraternidad en 1893 ó 1894.
Desde entonces, hasta el 1876, surgen innumerables centros espiritistas.
En Sevilla se inició una Sociedad Espiritista, la cual editó el periódico El Espiritismo, segundo de los periódicos publicados en España y uno de los mejor escritos. Resucitó la Sociedad de Cádiz, se crearon otras en Andalucía y Extremadura, entre ellas una de mujeres en Torre de Miguel Sesmero (Badajoz); apareció la Sociedad Barcelonesa de Estudios Psicológicos con su Revista Espiritista, fundada por José María Fernández Colavida, traductor de Kardec, y se erigió en Tarragona el Centro «Fraternidad humana», de que fue el alma Miguel Vives. 

EL GRUPO Y LA REVISTA DE ALCALÁ LA REAL.

El General D. Joaquín Bassols, ministro de la Guerra y uno de los más fervorosos, creó la Sociedad matritense «Progreso espiritista», llamada más tarde «Sociedad de Estudios Psicológicos», y un periódico titulado también El Progreso Espiritista, que se refundió en El Criterio. Lérida debió su «Circulo cristiano espiritista» a los profesores de la Normal D. Domingo de Miguel y D. José Amigó Pellicer, fundador este último de la revista El Buen Sentido. Córdoba, Almería, Soria, Huesca, Granada, Valencia, Murcia, Málaga, Santander, Castellón, León, Logroño, Ciudad Real, Santa Cruz de Tenerife, Andújar, Sabadell, Alcalá la Real, &c., tuvieron sociedades más o menos florecientes y publicaron periódicos tales como El Espiritualismo (Ciudad Real); La Caridad (Santa Cruz de Tenerife); La Luz del Cristianismo (Alcalá la Real); Lucifer, La Luz de la Verdad y La Luz del Porvenir, distintas etapas del mismo periódico, en Gracia (Barcelona), y El Faro Espiritista (Tarrasa), todos los cuales mantuvieron [518] vivas polémicas con católicos, protestantes y materialistas. 
El grupo de Alcalá la Real, que tuvo por órgano La Luz del Cristianismo, dirigido por el activo e inteligente facultativo Dr. Miguel Ruiz Matas, y el nutrido y entusiasta de Loja, que tenía por médium al simpático Rafael del Rosal, fueron los más importantes de Andalucía, cuando en Sevilla decayó el espiritismo. Ambos grupos perduraron muchos años. 

AUGE
La fiebre ascendía por momentos, los centros, los libros y las revistas se multiplicaban y la ola llegó a salpicar las regiones oficiales. En 1873, el día 26 de Agosto, se presentó a las Cortes Constituyentes una proposición redactada en los siguientes términos: «Los diputados que suscriben, conociendo que la causa primera del desconcierto que por desventura reina en la nación española en la esfera de la inteligencia, en la región del sentimiento y en el campo de las obras, es la falta de fe racional, es la carencia en el ser humano de un criterio científico a que ajustar sus relaciones con el mundo invisible, relaciones [520] hondamente perturbadas por la fatal influencia de las religiones positivas, tienen el honor de someter a la aprobación de las Cortes Constituyentes la siguiente enmienda al proyecto de ley sobre reforma de la 2ª Enseñanza y de las facultades de Filosofía y Letras y de Ciencias. El párrafo 3º del artículo 30, Título II, se redactará del siguiente modo: Tercero. Espiritismo.» Firmaban esta proposición D. José Navarrete, D. Anastasio García López, D. Luis J. Benítez de Lugo, D. Manuel Corchado y el Sr. Redondo Franco.
El encargado de defenderlo era Navarrete, pero no hubo lugar por haber ocurrido antes el golpe de Estado de 3 de Enero de 1874.
Los propagandistas más notables de esta época fueron, además de los ya citados, Modesto Casanovas, El Marqués de la Florida, Luis Román y Ricardo Ruiz, en Canarias; Manuel Navarro Murillo, en Soria; en Andújar, Bernardo Centeno y González Soriano, que escribió El espiritismo es la filosofía, sin duda lo más serio que sobre la materia se ha escrito, en que trata de explicar el espiritismo por la doctrina de Krause.

DECADENCIA
La restauración de la monarquía asestó golpe mortal para el espiritismo. No obstante, Huelbes y Torres Solanot publicaron artículos de propaganda en El Globo y La Tribuna. En 1879, el decidido joven D. Julio Fernández Mateos (1852-920), antiguo seminarista, editó en Sevilla El Espiritismo y dos años después El Faro (1881-6), uno de los mejores periódicos de la escuela, con el cual sostuve el año de su fundación animada y correcta controversia. Fernández Mateos padeció por sus ideas prisión, multas y destierro. [521]
Fundóse algún que otro centro con periódico propio, como la «Sociedad sertoriana de estudios psicológicos», que publicó el Iris de Paz (1882-85), y el centro de Gerona, que tuvo también su periódico.
EL CASÓ DE RUIZ MATAS. FUE PERSEGUIDO Y EXPULSADO DE MÉDICO MUNICIPAL EN TORNO A LOS AÑOS OCHENTA DEL SIGLO XIX.
prueba de su honradez
Escritura pública en 12.12.1881 nombramiento de facultativo 20 de junio de 1

885,  pedía renunciar a su oficio de médico porque  se satisfacía solo con atender a su clientela particular  en 13 de junio. Loa aceptó el ayuntamiento  la renuncia, pero “Siente privarse de los servicios de tan celoso y digno funcionario  a quien se hace presente así manifestándole la estimación  y aprecio en la corporación le tiene”. Aceptaba interinamente la de medico titular y de la cárcel por varias razones, pero ante la petición de la comisión de Cristóbal Vargas y Manuel Mármol, accedió  hasta que se provean  disfrutando de l sueldo  en 20 de junio de 1881.

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