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domingo, 19 de octubre de 2014


DIARIO DEL RUTERO POR CARTUJA

 

 

        Un numeroso grupo se juntó en los aledaños del bar Tipi Tapa para emprender la ruta de la Cartuja. Una larga fila de coches marchó hacia ese paraje de tierras de Granda por la comarca de Montillana y Colomera, cercanos a los términos de Frailes, Moclín y Alcalá la Real por los partidos de campo de las Riberas y Mures. Al llegar al Km 403 hicimos parada en un gran estacionamiento, que era recuerdo  de una era comunal  para uso de los propietarios de aquellas grandes extensiones cerealísticas, hoy día transformadas en  tierras de olivos. Desde allí divisamos  las tierras del cortijo de la Melera , el pantano de Colomera, y,. al frente , pasando la carretera autonómica el subeje básico Guadix-Estepa, una cortijada abandonada, que muchos recuerdan como la Cartuja. Tras pasarla , nos adentramos por un camino que n os llevó a una cruz de término con una inscripción en su pie de 1790. Unos pasos más adelante, varias casas agrupadas en torno a dos portones que cierran el recinto del casería, cuyo centro preside una ermita dedicada a San Isidro. Se nos ilustró por el amigo y antiguo vecino del lugar sobre el uso comunal del lavadero, el agua, el horno y el monte y la propiedad privada de las casas ,que se reservan  varios propietarios actuales, antiguos compradores de los bienes de los señores que recibieron este bien inmueble junto con las tierras desamortizadas en tiempos de Mendizábal. Pero las tierras fueron tierras  de frontera, compradas por los cartujos que los arrendaban a labradores con gran número de criados o las administraban directamente y venían a recoger los  frutos de los labradores. Nos sirve para ilustrar el recinto y recogemos estas palabras del profesor Rodríguez Molina en estos momentos históricos, seleccionadas del Libro del principio, fundación y prosecución de la Cartuja de Granada, obra del padre cartujo Rodrigo de Valdepeñas:.  

 

-“ La Cartuja de Granada

A comienzos del siglo XVI existían en lo que se considera provincia cartujana de Castilla varios monasterios, fundados desde finales del siglo XIV, entre ellos
Santa María de las Cuevas (Sevilla), y
La Defensión de Santa María (Jerez de la Frontera), en 1478.

Los intentos de invertir los excedentes en la fundación de una nueva casa en la Provincia de Castilla, por parte del Monasterio del Paular, en 1458, debieron esperar hasta que, en 1506, el Capítulo General encarga al Prior de Aniago la búsqueda de emplazamiento para la nueva Casa por tierras de Galicia o de Castilla-León. Las dificultades para establecerla en las proximidades de la ciudad de Zamora, propiciaron la entrada en contacto con Gonzalo Fernández de Córdoba, el Gran Capitán (1453-1515), admirador de la Orden, quien se ofreció a costear la obra con la idea de ser sepultado en su iglesia, cuando falleciese. Obtenidas las oportunas licencias, se dió a la nueva fundación el título de Santa María de Jesús. De mutuo acuerdo eligieron para su emplazamiento la parte alta del bello y fértil pago de Aynadamar, amplia y atractiva zona en las afueras de la ciudad de Granada, donde el brillante militar le donó, el 8 de diciembre de 1513, dos huertas situadas al pie de la Golilla, una llamada del Alcudia y otra conocida como la de los Abencerrajes.
 . La Cartuja Vieja, por tanto, no quedó emplazada, como quiere la hipótesis tradicional, en el actual cementerio de los jesuitas.. Ella fue la morada de los pocos monjes que llegaron a Granada hasta que se bajaron a la Nueva Casa, con la correspondiente licencia del Capítulo General”.

-“ Sus ingresos: dotación, mandas y rentas

Fundada La Cartuja de Granada como filial del Paular, fue generosamente dotada por éste, que le capacitó para hacer frente a sus gastos cotidianos, a la formación de su patrimonio y a la construcción del Monasterio.

Cuando en 1550 se firma el último concierto de dotación por valor de 18.800 ducados (7.050.000 mrs.) para que se inviertan "en la compra de medios y posesiones para la dotación de esta nueva Casa", se recuerda que el Paular lleva puestos ya en gastos de obra, sitio, renta y hacienda de la Cartuja de Granada más de 45.000 ducados. La conclusión es simple: en esa fecha el monto de la dotación ascendía a 63.800 ducados (23.925.000 mrs.), suma considerable, de gran valor adquisitivo, ya que por 100.000 mrs. se podía comprar un Carmen de 30 marjales en el Pago de Aynadamar”. Otra fuente de ingresos fueron las mandas testamentarias, capellanías y diezmos.

-“ Los ingresos recibidos, la austeridad de los monjes, las numerosas ofertas de rozas y monte en la frontera, y la obligada venta de tierras y casas por una población morisca cada vez más hostigada, propiciaron que los priores, "viendo que era hacienda sana y segura y buena", invirtiesen sin pausa, con gran habilidad, en la adquisición de bienes.
  Tierras de secano

Desde su asentamiento en Granada, las tentadoras ofertas de rozas y monte en tierras de la antigua Frontera, entre Granada y Alcalá la Real, no dejaron de atraer el interés de La Cartuja, que invirtió en su adquisición, buena parte de su hacienda, entre 1515 y 1568.  Localizadas, fundamentalmente, en la Cañada de Almaguel, término de Alcalá la Real, adquirieron, entre 1526 y 1530, unas 58 peonías (6'5 fa. cada peonía) y varias caballerías (13 fa. cada caballería), de rozas y monte, donadas por los Monarcas a otros tantos vecinos en recompensa por su ayuda en la Guerra de Granada. Numerosos lotes de tierra de variadas superficies, localizados en las Caballerías y en los Manchones de Íllora, entraron, asímismo, desde 1515, a formar parte del patrimonio rústico de la Cartuja. Se pueden contar entre ellos las amplias extensiones territoriales compradas hasta 1534: dos cortijos a un Aranda de Alcalá, el cortijo de Acequia, de 100 fa. y el cortijo del Moralejo, en Almoguel, también de 100 fa. de extensión; 150 fa. de rozas, montes y baldíos, propiedad del jurado Jorge de Mosquera; 130 fa. de Francisco Sahagún, que le había donado el Rey; 270 fa. de Rodrigo de Bazán, veinticuatro de Granada, también donadas por el Rey; 300 fa. de tierra del Lic. Cuenca, que éste había comprado a Valencia de Benavides, a quien las había donado el Rey; 200 fa. en las Juntas, y otras extensiones de tierra parecidas. Tentaron suerte en Iznalloz, e incluso en Alhendín-Escúzar, pero pronto abandonaron el proyecto, para centrar casi exclusivamente su atención en las tierras localizadas en los términos de Alcalá la Real, Íllora y Moclín.

Sus contactos en esta zona pudieron estar motivados por los orígenes y activa participación en ella del Gran Capitán, cuya familia tuvo siempre importantes intereses y fieles servidores en Alcalá (30). Fue, además, alcaide de Íllora y había reunido un vasto patrimonio territorial de unas 957 has. (31) en la parte de la Vega de Granada próxima a la franja de frontera,. Las escrituras de compraventa registradas en el Libro de la Fundación de la Cartuja ofrecen un claro balance de las tierras de secano adquiridas, hasta 1568, en la antigua frontera.

          Nos detuvimos  contemplando el lavadores común, Los aljibes de agua, las casas, los dinteles de ladrillo y con adornos de cruces, y en seguida marchamos para adentrarnos camino abajo hacia el cortijo de los Marchales, Siguiendo por la parte alta un cortado de sierra con flora mediterránea de encinar y rocas cortadas y abajo el olivo conquistador de este monte, paramos junto a una carretera que trochamos para dirigirnos a la gran encina de Marchal en medio de las explicaciones de Juan Antonio, que nos aclaró lamina de Mures ( de plomo, hierro y plata), Un abrazo de coro de  silvanos y nereidas.   En la encina la foto solemne  en medio de una cúpula abovedada que formaban las ramas de esta majestuosa encina que competía con la de Merced y no llegó a alcanzarle en su extensión y grandeza a pesar de sus 1200 años de antigüedad(¿) y estar apuntalada y cosida con grandes travesaños. Luego, pasamos por el cortijo abandonado de los Marchales, y bordeando el tajo llegamos junto a la raja pequeña de los Marchales, que contemplamos desde abajo y algunos osaron subirse por su estrechura. .Nuevos rutistas se unieron a un copioso grupo  que superó las cien personas.

           Más adelante, seguimos hasta cerca del cortijo del Burrufete, nos perdimos en el bosque mediterráneo y volvimos para entrar por la cima por una puerta del  cercado de las ovejas. Contemplamos los tacones y pilones de las ovejas, las cabrerizas y la cantera, y, desde este recinto natural, divisamos  los bellos parajes desde contemplamos el pantano de Colomera.
El amarillo otoñal nos dio un beso de oro al traspasar el puente de la ribera del Velillos cuando nos dirigíamos a Alcalá.
Gracias a todos los que han hecho posible la ruta, sus leyendas , sus costumbres ( San Isidro, los petardos reventados, los hombres de la sierra, la ruta de los muleros, la huella de los Cartujos...los bandoleros, los estraperlistas…), gracias a Paco García y a los  que se han sacrificado para hacerla lo mejor posible, gracias José Luis, familia Esteo, Milesio, Fernando, los Paco, Manolo, Maria Luisa y Domingo,  los cocheros, todos los ruteros...
 


 

 























 

 

 
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EL PRÓXIMO DÍA, POR LA DEHESA DE CHARILLA, CON COMIDA DE AMIGOS Y RUTISTAS. HAY QUE AVISAR ANTES DE JUEVES POR INTERNET , FACEBOOCK, BLOGS Y OTROS RECURSOS ORALES ….
 
 
 
 

3 comentarios:

  1. Buenos días! Os dejamos un enlace con algunas de las fotos que hicimos ese día en la Raja Marchales, ¡Qué buen día!

    https://www.facebook.com/media/set/?set=a.661779643920998.1073741832.259396697492630&type=3

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    1. En Cartuja me cuenta la madre de Paquitina de Mures, que nació allí que vivieron 16 Familias de 4 a 5 hijos permanentemente.Luego iban temporeros a las aceitunas y grano y hoy han dicho Paco Mures que se llegaba a 350 personas viviendo allí para recoger el trigo y otras labores.Los fines de semana se bajaba a un cortijo cercano al pantano de colomera a los Bailes. El 15 de Mayo se celebraba San Isidro Labrador sacándolo de la capilla y llevándolo en romería a la cruz actual junto la carretera y se festejaba con petardos que una vez estalló al que los llevaba en las tripas y al compañero y un camión los trasladó creo que a colomera.Esto me lo ha contado creo que se llama Martín que tiene un cortijo arriba de Cartuja. Tambien en las fiestas subían a lo alto de las rajas de marchales para disfrutar de las espectaculares vistas.Los dueños venían una vez en autobús hasta la Gaviota, junto la Gineta y luego en mulos los recogían porque no había accesos. Por delante de Cartuja hay vía pecuaria actualmente señalizada con balizas de punta verde, y por ella pasaban Toros dos veces al año a las Faldas de Sierra Nevada y hacia Sierra Morena. Hay un estanque con sillares delante de la capilla y bueno lo indico por considerarlo un elemento importante del entorno.Los cochinos de las familias los cuidaba uno y por la tarde los llevaba a las pilas a beber y cada uno se iba solo a su cuadra...Hay dos zonas y por eso tres portones.Una la zona de la Capilla y otra la de los dueños que eran de Marchales creo...cerca sierra Nevada...Allí no se pasó hambre me dice la madre de Paquitina.Tenían mulos para arar...hacían queso con la leche de cabra...tenían un horno comunitario para el Pan. No tiene electricidad de Sevillana.Nos contaba Jose Luis Alcala que nació allí, Paco Martín lo ha fotografiado en su casa natal, que las primeras televisiones las veían con baterías de coches. En la cabreriza de arriba vivía una familia y nos cuentan que por filas de tejas se asignaba la propiedad a las familias.Hemos visto tocones encastrados en roca para abrevaderos que nuestros perros usaron delante nuestra, 6 medianos rectangulares y circulares de 70-80cm aprox y uno circular más pequeño de 35 cm de diâmetro.El camino que va para la encina de marchales cuenta Paco López que lo hicieron militares en la guerra civil para ir a Frailes. Allí hubo un destacamento de Republicanos en esta guerra.En la parte superior hay restos de muros en círculo de la epoca Algar.El agua del manantial esta muy rica.Hay pozo entre el manantial y los pilones abrevaderos.Hay pilones en piedra centrales a dos filas rectangulares y en la pared del muro de piedra hay otra fila de pilones con algunos circulares.Muchas casas están en ruinas y abandonadas.Actualmente vive un pastor con su esposa, que me dice que esta sola pero que no se aburre porque está ocupada siempre.Tienen coches y vienen familiares.En las cabrerizas altas hay sal gorda en alginas piedras para que la coman las cabras y ovejas que hay.Bueno si me equivoco en algo por favor indicarlo para corrección.Un saludo

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