Por un contrato de arrendamiento en julio de 1542
ante el escribano Bernabé Rodríguez. Juan Garrido, donado del monasterio de la Cartuja de Granada firmó con Rodrigo Alonso como vecino de la ciudad de Granada en la parro quia de San Andrés, el arrendamiento de un molino de pan moler que estaba en las Juntas de Mures, junto a un pedazuelo de huerto de los manzanos, por tiempo de dos años a partir de primero de agosto de 1542. La trenta consistía en 60 fanegas de trigo anuales, pagaderas en 14 celemines en cada una de la semana, en caso de no pagar, se le podía ejecutar el arrendamiento, y acababa la última semana del año. Se hacía el arrendamiento según las normas de la ribera. Por no estar completo el documento , estas normas eran la limpieza del caz, un horario de utilizar el agua y otro de descanso para los regantes.
Cuarenta años después Juan Quijada, vecino de Moclín lo subarrendaba por la misma cantidad (Escribano Hernán Sánchez 4776, folio 108) y una haza de unas siete fanegas de tierra .
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