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jueves, 1 de febrero de 2018

ACABAMOS CON LOS VECINOS DEL CATASTRO DE LA ENSENADA DE LA CALLE REAL


Estos vecinos ni declaraban bienes la mayoría. Eran los siguientes:

Entre las viudas
-Ana Ventura (1060) , con un hijo mayor de 18 años que trabaja a jornal. 
-Jerónima Delgado (1093), más sola que la una.

Evidentemente la expresión no se refiere a “la una” como la hora. El origen lo encontramos en el País Vasco de finales del siglo XIX, en las elecciones locales de Ondarreta en Gipuzkoa. Iñaki Launaguerregaray, popularmente conocido como “Laúna” decidió presentar su candidatura a la alcaldía de su pueblo natal de manera independiente, sin afiliarse a ningún partido político. Todos sus rivales en cambio habían ya pactado cómo repartirse el poder fuera como fuera la votación, por lo que la intención era dejar a Iñaki “Laúna” completamente fuera de la carrera por la alcaldía. La expresión “más solo que Laúna” comenzó a utilizarse de manera despectiva contra el buen Iñaki, que en un golpe de genialidad decidió adoptarla como eslógan de su campaña para subrayar su carácter independiente. Su popularidad creció enormemente en los meses antes de las elecciones pero al final la victoria fue por un puñado de votos para el candidato liberal-moderado-progresista. Las sospechas de pucherazo nunca fueron confirmadas y la expresión comenzó a utilizarse con amargura por lo que pudo ser y no fue…


Isabel de Beas (104). Vivía en el Montecillo de la calle Real,  lindera con corrales de Bartolomé de Oliva por la parte alta, y por la baja, con el montecillo, de  once varas de frente y veinte de fondo ( la Casa del Centro de información, la casa de Eva, la del misterio), compuesta de portal caballeriza, dos corrales, dos pies de olivo y 40 parras, seis cuartos en alto,  cámaras. No era una viuda com la anterior sino que tenía  dos fanegas de secano de sembradura y alameda en la Vereda del Carmen, con celemín y medio de álamos,  y el resto de sembradura de segunda calidad,linderas con don José Contreras (E), doña Josefa Cedillo (O),   vereda del Camen ()N) y tierras de don Manuel de Castro (S).  También una viña ,con una fanega en la Solana de Montefrío, lindera con viñas del cura Ceferino de Torres (E, O, Y N)  y con servidera que atraviesa la finca (S). Gravada con una memoria de 20 misas que pagaban 40 reales a favor del convento franciscano de la Observancia. Y  una fanega en la misma vereda del Carmen de secano  de tres cosechas de trigo y cebada en cinco años, lindera con la que antecede (E, N, y S)  y con el cura don Ignacio Navarro (O). 
Tenía algo de ganado: 21 ovejas que le rentaba 168 reales, y dos borregas, 12 carneros,  un lechón, una lechona para comer; y para el transporte un jumento

Juana de Alcalá, con un hijo de 18 años jornalero (109).
Mariana González, con un hijo de 18 años jornalero, otro menor  y una hija (1133).
María Dionisia de Mesa, viuda con un hijo de 18 años que trabaja de jornalero y dos menores (1139). 
Entre  viudos
José Marqués Rosales, con dos hijos menores y tres hijas (1115).  Con un jumento y una lechona para  transporte y comida. Y arrendaba cuatro fanegas de sembradura en las Carpinteras al 
 cura don Diego de Ortega que le rentaba 40 reales.

Entre doncellas

María Polonia Escribano ( 1140). Poseía un corral arrendado a las monjas trinitarias  que era un solar cerrado con el nombre de las Cuevas de las Cabreras ruedo de la ciudad, que le rentaba diez reales. 

 Tomasa de Muro con una hija ( 1155).

CRIADOS

 Juan de la Torre, sirviente jornalero, de 68 años viudo y una hija (1114), 
Juan de Baeza ,


POBRES

DE SOLEMNIDAD, QUE ASÍ LO EXPRESABAN.
 Alonso López Izquierdo, de 95 años, viudo, 

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