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domingo, 21 de enero de 2018

RUTA DE LA INFANCIA DE JUAN MARTÍNEZ MONTAÑÉS

ASOCIACIÓN DE VECINOS
 HUERTA DE  CAPUCHINOS DE  ALCALÁ LA REAL  (JAÉN)
RUTA DE  LA INFANCIA DE JUAN MARTÍNEZ MONTAÑÉS
BOLETÍN 210 
DOMINGO 21 DE ENERO DE  2018
SALIDA DE HUERTA DE CAPUCHINOS- PARQUE DE LOS SAUCES A LAS 11




 Se cambió el itinerario por razones de horario con las misas de la iglesia de las Angustias. Unos cuarenta ruteros. Entramos a la iglesia de las Angustias y comentamos. EN LAS  ANGUSTIAS






Juan Martínez Montañés nació el 15 de marzo de 1568 en Alcalá la Real y fue bautizado un día después, como era costumbre. Y murió en Sevilla18 de junio de 1649) fue un escultor español. Su obra conserva la sobriedad clásica propia del Renacimiento, aunque aportando la profundidad de la escultura del Barroco.1​ Se formó en Granada con Pablo de Rojas y completó su educación en Sevilla, donde se estableció para el resto de su vida, convirtiéndose en el máximo exponente de la escuela sevillana de imaginería. Prácticamente toda su obra fue de tema religioso, menos dos estatuas orantes y el retrato de Felipe IV. Recibió y realizó encargos para diversas ciudades del continente americano. En su tiempo fue conocido como el «Lisipo andaluz» y también como el «dios de la madera» por la gran facilidad y maestría que tenía al trabajar con dicho material.2
La partida fue descubierta por un amigo del académico de Bellas Artes don Adolfo Rodríguez Jurada, que la divulgó,  interviniendo en su búsqueda don Pedro de Pineda y el párroco don Manuel Santiago y Garrido. Y el 24 de febrero de 1911 se publicó la noticia por Alfredo Cazaban en la Lealtad.
La pila plateresca procede la iglesia de Santo Domingo de Silos, y en ella fue bautizado.  El que descubrió la partida fue


En diez y seis días e dicho mes baptize yo francisco de la Torre a Joan, hijo de Joan matn broslador y martha González, su mujer, fueron sus padrinos el sº sor licenciado gil Fernández provisor y dona mª mujer de francisco daranda regidor.
  y los cuadros de la iglesia de Santo Domingo de Silos- 




De allí al Llanillo para comentar  

Veracruz y Llanillo (el Hospital del Dulce Nombre de Jesús)
Fue administrador mayordomo su padre Juan Martínez Montañés, por los años setenta, unos años que se trasladara su edificio al Llanillo en la Alhondiguilla, frente al torno del convento de la Trinidad. Ante el corregidor Gome Mesía de Figueroa, siendo testigos Juan de Villalobos y Luis de Jaén, se presentó en 18 de marzo de 1568 Bartolomé Hernández de Arjona, mayordomo de la cofradía de la Santa Caridad y del Hospital del Dulce Nombre de Jesús y declaró lo siguiente:
-Este mayordomo ejercía el cobro, administración, y distribución de los bienes, rentas y limosnas de ambos. Presentó el libro de cuentas al corregidor y al regidor Pedro Serrano de Alférez.
-Se fundó en 1488 la COFRADÍA DE LA SANTA CARIDAD, con la licencia y permiso del abad Alonso de Burgos, por el celo de la caridad de muchos devotos. Se dieron constituciones, eligieron PRIOSTE  Y  oficiales mayores y admitieron a un gran número de hermanos.
-Compraron cruz y paño para los enterramientos de los hermanos.
-Sus ingresos procedieron de los bienes que estos hermanos y otras personas devotas aportaron con estos fines para pagar los gastos de un hospital situado en unas casillas pequeñas y maltratadas donde se acogían a los pobres y se les daba alojamiento y sustento-
-El provisor abacial Diego Hernández, beneficiado y vicario de las iglesias de Priego trató de dar aumento a la cofradía y al hospital y compró e hizo unos nuevos edificios y repartimientos para mayor sustento de los pobres  en el arrabal Nuevo para sede del hospital, donde pudiesen estar y ser curados los pobres,  vendiendo las antiguas casas y con sus propios. Lo hizo bendecir y fundó una capilla donde se decía misa todos los más días del año  y puso camas de ropas donde se curasen los pobres.
-En 1546, por el testamento de Diego Hernández, año de su muerte,  dejó de heredero a la cofradía y hospital y reste último recibió el remanente de 70.000 maravedíes y el cortijo de la Fresneda de la Rábita, que debía dar de renta  de 25 fanegas de pan terciado (dos de trigo y una de cebada) en forma de censo perpetuo. Con este se obligaba el arrendador a conceder 300 libras de carne (cien en la libra del Natal, cien en las Carnestolendas y cien el Sábado Santo, las tres Pascuas) a cien pobres
-Se cita que la administración de esta limosna de alimento debía darla el prioste de la Cofradía y el mayordomo del hospital, cuyos dos cargos debían estar  unidos.
-Tras la muerte se hicieron unos censos a cumplir y con las rentas  y las limosnas de la cofradía y las nuevas entradas de bienes  que se dieron al hospital y a la cofradía, se pagaron estas comidas de pascuas a los pobres naturales y extranjeros, se alojaron  en camas y se curaron. 
-Todos estos fondos se emplearon en estos gastos, y en medicinas, médicos, servicios hospitalarios, limosna de misa y enterramientos.
-En un libro de cuentas aparecían los gastos y entradas de bienes que debían ser aprobados por el prelado o su representante anualmente. 
-En 1568 disponía de los siguientes fondo: renta de  24.000  maravedíes de un censo de 337.000; otros censo de 18156 maravedíes anuales; la renta del pan terciado del cortijo de la Rábita, que pagaba Miguel de Utrilla; 6.000 maravedíes del bacín de la limosna del Jueves Santo, entradas de hermanos, enterramientos y otros donativos; camas y ropas





Primero,  estuvo El Hospital del Dulce Nombre de Jesús o Santa Caridad,  ubicado al principio de su fundación en el barrio de las Entrepuertas de la Mota; luego se edificó en torno a la Alhóndiga por la calle Cava, Y BAJÓ DE NUEVO AL LLANILLO  para acabar definitivamente, en 1601, a la iglesia de la Caridad del Hospital del Dulce Nombre, iglesia que dio el nombre a la calle Ramón y Cajal o Caridad donde se mantuvo hasta mediados del siglo XIX.
 Y nos fijamos en la veleta de la iglesia de la Caridad.


En la calle Bordador (su padre vivió), 
EN EL MOSAICO
En 1927, a instancias de un grupo de vecinos, siendo alcalde don José Benavides, se puso este mosaico, de la escuela sevillana de pintores ceramista, copia del rostro y medio busto de Velázquez. En la calle de El bordador. 
CUADRO DE VELÁZQUEZ
PACHECO GRABADO
RETRATO DE MONTAÑÉS , HECHO  POR VARELA, CURIOSO DICE QUE ES SEVILLANO















y el mosaico de las cerámicas trianeras de un pintor ceramista copiador de Velázquez.












EN LA  PLAZA DEL AYUNTAMIENTO
Este monumento fue encargado al escultor jiennense Jacinto Higueras, que se valió de algunos modelos anteriores, sobre todo Velázquez y la nariz de algunos paisanos. Según cuenta D. Jacinto Mercado, director del Museo Jacinto Higueras, el busto del insigne escultor fue la última obra de Jacinto Higueras antes de su fallecimiento en 1953, el resto de la obra, corrió a cargo de su hijo, el también escultor Jacinto Higueras Cátedra. Y fue inaugurado en 1955 por el ministro Joaquín Ruiz Jiménez. En bronce sobre pedestal de piedra.





E





Calle de Braceros y Llana o de Martínez Montañés (casa arrendada),

 calle Real , la casa de la esquina, su lugar natal:

.

                                                                                  








 EN LA CALLE ENTRE BORDADOR Y  LLANA

Según Carmen Juan, esta fue la ubicación de su casa. En marzo de 1914, se le cambió el nombre de la calle Llana de Gutierre de Burgos por la de Juan Martínez Montañés.

Según documentos del Archivo provincial en la calle Rea lMARTÍNEZ MONTAÑÉS NACIÓ EN LA CALLE LLANA



            Recibe la calle llana el nombre de Martínez Montañés, por eso probablemente de darle un nombre ilustre con motivo del descubrimiento de que Juan Martínez Montañés había nacido en Alcalá la Real y no en Sevilla como se venía atribuyendo erróneamente hasta principios de siglos.

            He tenido la suerte de encontrar un documento del Archivo Histórico Provincial de Jaén, firmado por el escribano dibujante Gómez Muñoz Monte, en el que se manifiesta que Juan Martínez Montañés registra un contrato de arrendamiento de unas casas en la calle Llana. El documento es de 1564, cuatro años antes que naciera el artista. Lo firma el propio padre Juan Martínez, bordador.

El arrendatario es Juan Martínez, bordador. Como vecino de Alcalá-a la Real. 
-La fecha del documento en 5 de diciembre de 1564 y ocupa el   folio 13 del mencionado escribano.

-El propietario de la casa que contrata es Bernardino de Escaladas que no sabía firmar.

-La ubicación de la casa es "unas casas que vos tenéis en la calle Llana, que lindan con casas de Marcos Ruiz del Moral e con casas de Leonés el Viejo e la calle Real".

Su alquiler era de 3 ducados.
-No eran otras que las que hacían esquina de la calle Llana, frente al antiguo convento del ROSARIO, pues no podían ser linderas de dos calles a no ser que fueran esquina o el corral diera a una de ellas.
Testigos Alonso de Brazueloa, Alonso Galindo y Juan Garrido.


 SUBIMOS LA CALLE REAL Y COMENTAMOS LOS RAXIS Y LA FAMILIA DE PABLO DE ROJAS
EN EL ENTORNO DE LA FAMILIA DE LOS RAXIS


Recordamos que se fue con Pablo de Rojas a Granada. Y de allí, a Sevilla compartió taller con Gaspar de Raxis o su cuñado Francisco de Villegas, casada con Mayor de Raxis, hija de Melchor. En estas casas debió acudir como aprendiz el niño Martínez Montañés, porque su padre fue avalado por el propio Pedro de Raxis en el estandarte que hizo para la Virgen de la Cabeza en 1560 con motivo de la fundación de la cofradía romera de Alcalá.



Comentamos LOS ARCOS,  y LA ESTATUA DE PABLO DE ROJAS Localización


Situada en la salida del sur de la ciudad, por  el camino de la Corte,- de Madrid a Granada-,  se levantaba junto al comienzo del ejido, alameda y paseo de la Ciudad. Este lugar se denomina “Los Arcos” y era uno de los monumentos más representativos de Alcalá la Real.

Descripción
         
Era una puerta, monumental, con finalidad de protección de la ciudad en los momentos de peligro, guerra, entrada de bandoleros, o moriscos. Además, servía de control de todo tipo de mercancías que se transportaban desde los pueblos de la Campiña de Jaén y Córdoba hacia Granada y Málaga. A ello se añadía la función de filtro en los momentos de epidemias y peste.
La puerta tenía adosada una pequeña caseta, donde se resguardaban los caballeros guardianes en el control de los vecinos  Esta era de inferior calidad, de mampostería y tejado.  tuvo otros usos como lavadero y fielato.
          Esta puerta respondía al urbanismo de la nueva ciudad que surgió a las faldas de la Mota desde principios del siglo XVI y donde había que encauzar  un eje radial para prever las incidencias  que hemos comentado. Fruto de su paralelismo, y de su importancia con la Torre de la Imagen, en ésta se sustituyó la antigua imagen de nuestra Señora, por el de la Patrona, Santa Ana, devoción muy extendida a   mediados del siglo XVI.
          Corresponde a un tripe arco de triunfo que hace de entrada a la ciudad, con dos cuerpos y un pequeño dintel. De estilo renacentista muy italianizante. El primero con tres arcos de medio punto que le servían de vano y puerta de entrada a la ciudad; el central de mayor altura que los laterales, superior a los cuatro metros desde el suelo al, intradós permitía el paso de grupos humanos, carros y animales de carga; y los laterales servían de acceso de parejas de personas y una altura inferior a los cuatro metros. Se apoyaban sobre unos de más de dos metros de altura,  de carácter toscano Una cornisa, partida por la elevación del cuerpo central, dividía el segundo cuerpo. Sobre los arcos laterales, en cada uno de ellos, se alzaban un pináculo y dos orejuelas confrontadas, muy típicas de los Bolívar. Sobre el arco central, un segundo cuerpo a modo de templete, con una hornacina, daba a cada cara o fachada de la puerta. Algunos autores consideran que este tipo de obra responde a los retablos montañesino Para Lázaro Gila, este segundo cuerpo no es sino un ático, en el que se abre una hornacina, donde se albergaba la santa Ana Triple, patrona de la ciudad desde el siglo XVI hasta el siglo XVIII. 
          En la cara norte, en su segundo cuerpo, dentro de una hornacina, se encontraba la imagen de Santa Ana, labrada con piedra de cantería de los Llanos, Obra probable de los hijos de Pedro Sardo, presentaba la imagen de Santa Ana triple, con la Abuela, María y el Niño Jesús sentados sobre la primera. De rasgos esquemáticos, y deteriorados por el tiempo presentaba una iconografía simulando a la que se encontraba en la ermita de Santa Ana, estilo más bien gótico Hay cierto primitivismo en su trazado y ejecución.,. Actualmente se conserva en el convento de la Encarnación de las RR:MM de Alcalá la Real. $n la cara sur el hueco correspondiente con la imagen  de Santa Ana, se rellenaba con una cruz de hierro. 
          Se remataba toda la puerta, con un dintel, donde estaba colocado el escudo de la ciudad y el real en cada una de las caras, orlado por dos pequeños pináculos, muy del estilo de los Sardos y una cruz de hierro.
          Creemos que su origen proviene de sus funciones defensivas y de control, aunque posteriormente se caracterizaba, según lázaro Gila” por su misión ornamental, al igual que otras muchas puertas que por estos mismos momentos, se hacían realidad en Sevilla o Córdoba:  básicamente advertir al sufrido viajero que transitaba por el camino de Granada que arribaba a una ciudad realenga, altamente privilegiada”.
          Las imágenes responden al sentido protector de la ciudad por la patrona, Santa Ana. Esta  jugó un papel fundamental y único desde el tercer  tercio del siglo XVI  hasta finales del siglo XVII, plasmándose artísticamente en imágenes, retablos y cuadros del mobiliario municipal. Por su parte, la Cruz, corresponde a una moda en la que las entradas de la ciudad se abrían con este signo iconográfico, a lo que aludía Caro Baroja, para espantar los malos espíritus y símbolo de una ciudad cristiana

Se e encuentra en  calle de los Álamos y Pablo de  Rojas. Realizada en noviembre de 2006 por el escultor Ramiro Mejía, que realizó la escultura de Andrés, ubicada en fachada gótica de Catedral jienense. De bronce, presenta  al maestro alcalaíno con su su mazo y gubia y traje de oficio de la época, el cabello ondulado abierto con dos muñones en la frente y una mirada melancólica, con una postura manierista. Con un deseo de transmitir la creatividad espiritual DE SU melancolía y la mirada al frente, se apoya sobre un pequeño taburete y un manto simulando una estera donde está inscrita su firma de bello trazo renacentista. En su 450 Aniversario del año 1999,  se celebraron importantes actos de homenaje y, se levantó la estatua  en 2006 Con él nace la Escuela Andaluz porque fue el maestro de la escuela de arte granadina y de Martínez Montañés, padre de la escuela sevillana.  

PABLO  DE ROJAS SU MAESTRO
 Pablo de Rojas nació en Alcalá la Real en el año 1549 y fue bautizado en la parroquia de Santo Domingo de Silos el día 15 de noviembre del mismo año. Sus padres fueron Pedro Sardo y Catalina González. El primero, de profesión pintor, procedía de Cagliari (Cerdeña) y se estableció en el segundo decenio del siglo XVI en la abadía de Alcalá la Real, donde se casó y tuvo doce hijos. Formó un famoso taller en el que participaron varios de ellos en distintas obras municipales y eclesiásticas. Entre todos sus hijos, por sus cualidades artísticas destacaron los pintores Pedro de Raxis el Mozo, y Miguel de Raxis y los escultores Melchor y Nicolás Sardo Raxis. Algunos de ellos fueron enviados a Jaén donde trabajaron en el taller artístico de otro pintor afincado en la capital del Santo Reino, llamado Pedro Sánchez Ceria.




Pablo de Rojas, probablemente, habiéndose iniciado en el mundo de la imaginería con el resto de sus hermanos y otros escultores y entalladores que se habían establecido en Alcalá la Real- Jusepe de Burgos y Martín Pérez-, marchó en torno al año 1575 a Granada, atraído por su movimiento artístico y económico. Allí, se formó en el taller de Rodrigo Moreno, un artista desconocido que algunos críticos lo relacionan con Pedro de Machuca. Estableció su taller en la colación de Santiago, donde convivían muchos artistas que trabajaban en las distintas iglesias y conventos que se levantaban por aquellos años en la ciudad de la Alhambra. 

Por los años, tuvo, entre otros discípulos y aprendices, a  su paisano e ilustre imaginero Juan Martínez Montañés a quien le inculcó todos los saberes y dominio del arte de la imaginería, sobre todo, en la adquisición de los modelos iconográficos que en el futuro predominarán en la Escuela Andaluza de Imaginería: los Crucificados, la Inmaculada y los Santos Juanes.

Por este tiempo, se relacionó con Sebastián de Solís, que sería un importante imaginero jiennense a quien se le atribuye la imagen de Nuestro Padre Jesús Nazareno, denominada popularmente el Abuelo.

Trabajó en el  famoso retablo de San Jerónimo junto a famosos imagineros como su propio maestro, Juan Vázquez o Melchor de Turín. Esta obra fue fundamental para la evolución del renacimiento hacia el manierismo naturalista que desembocará en el auge del Barroco Andaluz.



Tuvo un colaborador muy importante en la elaboración de sus obras en la persona de su sobrino el pintor Pedro de Raxis, también alcalaíno, que se le considera el padre de la estofa por la alta calidad artística que imprimía en las imágenes y retablos gracias a su dominio de la policromía. Este trabajó en la provincia de Jaén en Villacarrillo, Alcalá y Úbeda.
Obras de Pablo de Rojas datadas y confirmadas en la capital granadina fueron las imágenes del Nazareno de la iglesia de las Angustias, el Crucificado de la capilla de los beneficiados de catedral, y la  Inmaculada de la iglesia de San Juan de los Reyes junto con el retablo de la iglesia de Albolote. Su fama se extendió por todos los antiguos reinos de Granada, Córdoba y Jaén, donde se le atribuyen una gran cantidad de retablos, imágenes y obras menores como andas, sagrarios o insignias, que la labor silenciosa de la investigación pondrá al descubierto en los próximos años. En nuestra provincia, en concreto, una Inmaculada y un Cristo de la Humildad de la ciudad de Baeza.
Casado con Ana de Aguilar no tuvo descendencia y murió en torno al año 1611, fecha en la que sus sobrinos recibieron los bienes de su holgada herencia. Este dato fue importantísimo para el descubrimiento de su nacimiento en Alcalá la Real, pues, gracias a los poderes que otorgaron algunos de ellos para recoger la cantidad asignada en Granada, pudo reconocerse que los Raxis eran miembros de la familia de Pablo de Rojas, el cual cambió su apellido en Granada, castellanizando el de Raxis por Rojas. o muchos artistas jiennenses, al emigrar a otras tierras, quedó esfumado su origen hasta tal punto que se le hacía pasar por granadino, lo mismo que Martínez Montañés se consideraba sevillano. Ambos unidos por las vicisitudes de su enigmático origen son gloria de Jaén, de una tierra, que tiene orgullo de ser la cuna del arte barroco andaluz.


 



SUBIMOS AL convento de la Trinidad, EN LA TRINIDAD

Su padre bordador debió bordar mantos, dalmáticas y frontales para este templo, en el que se enterró la familia de los Raxis. En su entorno vivieron los fundadores que encargaron los estandartes de la Virgen de la Cabeza (1560 y 1580). 
Luego,  calle Mesones,  AL CONVENTO JUNTO ESTABA EL HOSPITAL DEL DULCE NOMBRE DE JESÚS, LA CALLE DE LOS MESONES Y DEL ARRABAL,

En estas vivían otros Raxis.
 EN LA IGLESIA DE SANTO DOMINGO DE SILOS

Se encuentra abandonada la capilla del baptisterio y en ella existía una escultura del Señor de la Columna y un cuadro de San Juan Bautista bautizando a Jesús, también colocaron una placa refiriéndose que había sido bautizado Juan Martínez Montañés. 

ETAPAS DE LA VIDA MONTAÑÉS


            Juan Martínez Montañés (1568-1649), el famoso escultor o imaginero natural de Alcalá la Real y afincado en Sevilla, fue el embajador de muchos vecinos de la ciudad de la Mota, que acudieron a tierras americanas y regresaron o enviaron sus herencias a estas tierras, pasando por el buen hombre que se hacía cargo de todas estas mercancías y misivas de sus paisanos. Pero, el "dios de la madera" o el "Lisipo español" no perdió el vínculo con su tierra natal de modo que se conserva en el Archivo Histórico Provincial la carpeta sin el contenido que se trasladó a América de su expediente de limpieza de Sangre. De la época que Hernández Díaz  califica de periodo formativo que va de 1588-1605, hizo una serie de imágenes con destino a Perú, entre ellas el Crucificado del Auxilio de la iglesia de la Merced de Lima, precedente del famoso Cristo de los Cálices de la catedral de Sevilla, es un cristo muerto, de expresión serena, reposada, deificado, tiene los pies cruzados y cuatro clavos, como los que hacía su maestro también alcalaíno Pablo de Rojas según relataba Santa Brígida cuando se le apareció el Señor.
De En su época magistral, la catedral de Lima conserva el retablo de San Juan Bautista (1607-1622), que procede del convento de monjas dela Concepción: Fue concertado con Francisco Galiano, ejecutado por Diego López Bueno, y recompuesto recientemente por Teófilo Salazar. Preside el Cristo Crucificado, con un amplio sudario de tela. Montañés hizo las imágenes, pero el dorado y estofado es obra de otro alcalaíno afincado en Sevilla Gaspar de Regis, sobrino del maestro de Montañés Pablo de Rojas, también alcalaíno. En la predela están los Santos Doctores y los Evangelistas, y, en su centro, o banco, el cuerpo yacente y degollado del Bautista con túnica blanca, manos atadas y pies blancos y ,encima, la bandeja  portada por dos ángeles que contiene  la cabeza cortada del Bautista;  en las calle laterales se describe la vida del santo: la aparición del ángel a Zacarías, , la visitación de su  prima santa Isabel, la natividad del Bautista, la despedida de este de sus padres, la predicación en el desierto, el  bautismo de Jesús, la  comparecencia ante Herodes para recriminarle sus amores con Herodías, el  Bautismo de Jesús, el encarcelamiento del  artista, y la  degollación del Bautista.  Herodías y Salomé entregando la cabeza de la degollación,
Del decenio crítico (1620-1630), entre 1624 y 1625 Montañés el capitán Fernando de Santa Cruz y Padilla, le contrató sin pintar la imagen de Santa Apolonia por la cantidad de 100 pesos y actualmente se conserva en la catedral limeña, como mártir lleva la palma martirial de la victoria y un resplandor sobre la cabeza y se ajusta al canon y técnica montañesina en los pliegues de la túnica y manto, así como en los rizos de su cabello … También de esta etapa son unos ángeles músicos del Convento de la Concepción de Lima tocando una corneta.
Y, por último, en la etapa del barroquismo final, (1630.1643). se le atribuyen san Francisco Javier y san Francisco de Borja. Ambas fueron enviadas e 1648 para la iglesia de san Pedro de Lima. Tienen sotana y capa de manteo y los atributos de estos santos misioneros. 
UN DOCUMENTO INÉDITO DE LA VIDA DE JUAN MARTÍNEZ MONTAÑÉS
RETRATO  DE MONTAÑÉS POR PACHECO
 Entre mis documentos recogidos en el Archivo Provincial de Jaén, se encuentra un poder de Juan Martínez Montañés al vecino alcalaíno Pedro de Frías y Valderas, levantado por el escribano alcalaíno Juan de Rotaesta. En concreto, el documento procede del escribano sevillano Mateo Díaz   que lo había firmado en 17  diciembre de 1620   Aunque en la nota marginal aparece el título de Poder entre ambos, el del escultor viene con el nombre de Juan Martín Montañés, frente en el texto de escritura y traslado de poder que aparece como nombre, apellidos y títulos Juan Martínez Montañés, maestro escultor y arquitecto, vecino de la ciudad de  Sevilla   en la colación de la Magdalena. Le concedió todo el poder al presbítero don Pedro de Frías y Valderas, que por aquel tiempo era "estante en la ciudad de Sevilla”. El objetivo del poder no era otro que lo representara en la ciudad de Alcalá la Real o en otro cualquier lugar ante las Justicias y otras personas para hacer las probanzas e informaciones de su limpieza de sangre e nobleza e como soy hijo legítimo de Juan Martínez Montañés

 y Marta González, mis padres difuntos, que Dios guarde, que fueron vecinos de la ciudad de Alcalá la Real, y de cómo la dicha Marta González fue  hija legitima de Francisco  González Moreno  y Elvira Jiménez, su mujer, mis abuelos ansimismo difuntos, vecinos de la ciudad de Alcalá la Real, y asimismo de los demás ascendientes y descendientes, de los susodicho , y de como todos ellos fueron cristianos y de limpia generación sin mota mora ni judía ni de los nuevamente convertidos a la fe católica.. facultaba para que se hicieran todo tipo de testimonios e interrogatorios, recogida de testimonios, codicilos, escrituras de bautismo, 
En certificado, aparte aparece el traslado de Juan de Fonofaya ante el escribano Francisco de Castro. El dieciocho de enero de 1621, le traslado el poder Juan Frías al procurador Francisco Gutiérrez ante el escribano Juan de Rotaesta y siendo testigos el presbítero del Castillo Pedro Duran, el escribano y procurador de número Antón de Santillán y Juan de Moya. Cano vecino de Alcalá-
EN EL ARCHIVO PROVINCIAL APARECE VACÍA EL LEGAJO DE LA LIMPIEZA DE SANGRE Y TODAS LAS PROBANZAS APARECIERON EN ARGENTINA CONSERVADAS o en forma de copia o traslado  POR UN MÉDICO  DESCENDIENTE SUYO ,QUE SE LAS ENVIÓ fotocopiadas A CARMEN JUAN. Junto con Mayte Murcia escribieron un artículo en la Revista de Estudios Giennenses.

DOS DATOS NUEVOS PARA LA VIDA DE MARTÍNEZ MONTAÑÉS

Uno, sobre su reconocimiento del nacimiento en la ciudad de Alcalá la Real, se encuentra en el tema XII De "El Viaje de España, Italia y Francia", de Nicolás Cruz y Bahamonde, conde de Maule que he tenido la suerte de leer y el profesor Ricardo San Martín ya lo hizo en sus libros de viajeros de Alcalá la Real, recogiendo la cita. Guardia Castellanos aludía que ni Ceán Bermúdez no lo había citado, y cuando escribí a su libro se descubría la partida de nacimiento. Dice textualmente:
De Martos por un camino montuoso con muchos olivares y encinares, se andan tres leguas hasta la antigua villa de Alcaudete: a cosa de una legua se pasa el rio Cigarrales menor que el anterior: su margen se ve plantado de árbol a d o s. Desde el rio hasta Alcalá la Real hay dos leguas de indescriptible camino siempre montuoso солю el antecedente. En invierno debe ser intransitable por los torrentes y los dichos ríos que no tienen paso para los carruajes. A lo más que las veredas por donde hemos hecho el viaje, como no se pasen estas lluvias serán difíciles de repechar. La ciudad de Alcalá es también bien de las antiguas fundaciones la Real, que se creen algunos siglos antes del Salvador. En tiempo de los moros se llamó Alcalá de Benzayde tal vez por el caudillo que la conquistó: se halla también situada á la falda de una colina. En la cima esta la iglesia mayor que es una abadía mitrada erigida por el célebre arzobispo de Toledo Gil ele Albornos: la llaman la mota quizá porque está en la parte de la fortaleza a la cual daban generalmente este nombre. Su población es poco \mayor que la de Martos. Las calles son rectas y la Real es ancha.
Hay otras bastante pendientes. Antes de la salida tiene un buen paseo de álamos; luego se ven tres arcos que forman Ja entrada, y después continua otra alameda. Alcalá es patria de Juan Martínez Montañés celebre escultor y arquitecto, discípulo de Pablo de Roxas: puso escuela en Sevilla de la cual salieron Cano, Roldan y otros: Montañés hizo el modelo para la estatua de Felipe IV que se trabajó en Florencia, de que debamos hecha mención en otra parte.



















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