LA ALCALÁ DE 1927 EN FOTOS

ALCALÁ EN FOTOS DE 1927

Me ha caído en mi Arframar el programa de fiestas de 1927. Es un fiel reflejo de los tiempos en que los vecinos se sentían, en cierta manera, contentos por las mejoras que se habían llevado a cabo en el pueblo  durante el gobierno del alcalde Benavides. Se anunciaban las fiestas con repique de campanas, cohetes y palmas reales. No se olvidaban las cucañas que se premiaban con dinero y objetos.  Parece que el municipio no tenía Banda Municipal , pues hubo que contratarla para los pasacalles e iluminación del Llanillo y Parque donde se realizaba la feria, conciertos y  veladas.

El pasodoble jugaba un papel fundamental en los repertorios y veladas musicales. Pero, atraía mucho al público el género musical de la revista, que presentó en el Teatro Martínez Montañés Los Jualansos , lleno de skets modernos, duetos y parodias.  El ganado jugaba un gran papel en la economía, porque tuvo varios días de feria dedicados al trato y comercio.  Los negocios más importantes eran:
-Marmolistas y lapidarios: el principal de ellos regentado  por José Romero Fernández, especialista en mausoleos y panteones de familia,  que hacía pilares, fuentetasas, escaleras, chimeneas y toda clase de trabajos de mármol. Tenía su negocio en la Plaza de la Constitución, tal como se llamaba la Plaza de Ayuntamiento.
-Tenderos de diversos tipos. Ubicados en la calle Carrera. En tejidos destacaba la "Ciudad de Sevilla". Manuel Cañete Bascón vendía en la Plaza, Tienda de Montalabán, tejidos que no necesitaban propaganda por su calidad, así de chulo La Purísima de Vicente Sánchez Cañete ofrecía todos los productos baratos en la placeta de las Angustias. 

-Representantes de casas Comercial. Francisco Montañés lo era de capachos de Coco, punto sevillano, patentado y esparto de la Viuda de don Nicolás Martínez  de Úbeda, de González Viass de Jerez de la Frontera,  y, nada menos que de LA CRUZ DEL CAMPO, QUE SE PRESENTABA COM O ACREDITADÍSMA CERVEZA, de maquinaria de fábricas de molinos de aceite de oliva con aparatos modernísimos de básculas. Así se anunciaba , -que le faltaba página para ello- e indicando que esta cerveza  de fama tan reconocida es la mejor, la que no hace daño y la preferida del público.
-Guarniceros y albardero. En la plaza estaba Manuel Calvo Fernández que preparaba artículos para carruajes, caballerías, estribos y todo lo concerniente al ramo de la ganadería. Ubicado en la calle General Lastres, que no Bordador. En las mismas callejuelas Adolfo Romero Ratia ofrecía abarcas americanas y cinturones de cuero y goma.

-Herreros y cerrajeros, representados por Miguel Alameda Cuenca en la calle de los Álamos. En la Tejuela, con nombre de Abril, 16 , se encontraba  el que sería alcalde, diputado y concejal socialista Salvador Frías Pino como armero y cerrajero.
- Los talleres y garajes de coches, que solían ubicarse en la Tejuela. Uno de ellos era Fulgencio Ortiz Aragón. Incluso alquilaba coches y ofrecía comodidad. Julio Caravias Villén alquilaba el Chevrolet en su casa de Exconvento de Capuchinos, cuando no vivían los Abril.

-Bancos. el Banco Español de Crédito , ubicado en la Carrera de las Mercedes, 6, con un interés al cuatro por ciento y un máximo en las libretas de 10.000 pesetas.  Abría a las diez de la mañana y por la tarde también. Había despacho central de los Ferrocarriles Andaluces en los Álamos, 24.
-Zapateros, como CANOVACA, en la calle Utrilla, especialista en medidas y cortes.
-Representantes de los ingenios más insólitos como José España Laloya, ubicado en los Álamos, 2, que representaba los molinos de viento ARMOTOR.
-Panaderos como José Giménez Palomino en la Plaza de la Constitución. Llamados fabricantes de harinas y panadería, la de San José en los Álamos, 11, era importante.
-Cristaleros de loza fina  de la Cartuja, vasos , cuadros y espejos como Gabriel Albasini Gorini en la Carrera.
-Barberos como Enrique Pérez en la misma carrera   con servicio esmerado y fricciones de cabeza frente al Casino Primitivo.
-Confiteros, como  la que perduró hasta finales de siglo XX, la  de Las Mercedes de Francisco Utrilla frente al Casino Primitivo.
-Tiendas de paquetería , quincalleros, y otros como la Trinidad de Rafael Aguayo., junto al Banco de Crédito.
 -Carpinteros y ebanistas con Gabriel Pérez Bailón que regentaba la Breva en la calle Alonso de Alcalá. hacía económicamente y con gran esmero, molduras, armarios, comedores  y mesas de haya. Pero el más curioso era Marcía Medina, cuyo anuncio no tiene desperdicio anunciando a  LA HIGUERA:

   

-Ferreteros y drogueros como Juan Frías Pérez  que vendía lo mismo herramientas de alas artes y la agricultura como tuberías de plomo, hierro y acero, tejidos de alambre y espino artificial para cercados. gomas, empaquetados, amiantos, aceites,  grasas  para motores, gasolina, petróleo y alcohol , colores, esmaltes, pinturas ¡Qué más podía venderse en Carrera de Mercedes,18  en la Llave!.
-Servicios como comerciales y matrícula como José Martos y Martos. de procurador,. Manuel Durán en la calle Caridad.En la misma calles y con los mismos servicios Daniel Jiménez y Jiménez. 
-Bares y tiendas de comestibles como Antonio Peinado Collado que ofrecía comidas económicas.  en la Plaza de la constitución, 20. En la plaza y la callejuelas se encontraban: la de Antonio Torres González que ofrecía cerveza al grifo y embotellada, vinos de todas clases y aperitivos a los forasteros ( General Lastres, 49) . En la  Carrera, 3 y 5  Segundo Navas con Bebidas  y comestibles;  Daniel Murcia Aguilera frente a Palacio , vendía bebidas, comestibles , calzado y a la medida con piso de goma, abarcas de piel y goma.  En la calle Miguel de Cervantes, 2 Manuel Espinar Muñoz vendía comestibles, semillas y pienso para el ganado, junto al Real de la Feria.  También tenía su café y cervecería Adriano Hinojosa Bailón, este pariente  mío ofrecía toda clase de vinos embotellados y de barril, cerveza al grifo y en botella de las mejores marcas, aperitivos de salchichón,  jamón y otros variados. Junto al bar,  LA FONDA "la Aurora" que pertenecía a l a viuda de Adriano Hinojosa, padre.

Manuel Armenteros que ofrecía manzanilla y café económico, bebidas y semillas en la Plaza de la constitución. Fabricantes de licores como Antonio Garnica en Veracruz, ,  cosechero de vino como la Viuda de Garnica en la Fuente Rey que promocionaba el anís Cometa Halley.
-Abonos y tabacos se encontraban en un mismo local regentado por Antonio Abril Romero, cuyo almacén estaba en el convento de Capuchinos y regentaba la firma de Abonos Medem.
-Zapateros como Juan Hinojosa López con fabricación de calzado de goma y establecimiento de comestibles y semillas de todas las calles en la Plaza de la Constitución.
-Hubo muchas fondas, pero la del Manuel Lara Villén se anunciaba en Abril 11 con cómodas y limpias habitaciones, cuarto de baño y gran confort.
-El mundo de la construcción se incorporaba con sus nuevos adelantos en fábrica de mosaicos  de Domingo Sánchez Velasco en la carretera de Granada junto a los Arcos.

-Un negocio especial fue el  de  ANTONIO AGUAYO CASTILLO se anunciaba en Carrera de las Mercedes, 21, como Imprenta, Papelería, corresponsal del Banco de España, establecimiento de quincallería, paquetería y coloniales, juguetería de feria, venta de café  tostado a diario, representando de abobos catalíticos VASCO ANDALUZA, y además tenía una fábrica de harinas en el Coto, sistema Daverio que se titulaba AGUAYO Y BELBEL que se enorgullecía de fabricar harinas PANADERA-UNICA Y FLOR DE ALCALÁ, además de afrechos, sémolas y harinas candeales para confiteros. Era un supermercado o una multitienda? Pero no nos extraña que tenía como vecino a José Serrano López , en Carrera  5 y 7, tendero de ultramarinos, chacinas, coloniales, bebidas, licores, semillas, alpargatas y abarcas, conservas de todas las clases, especialista en jamones, embutidos, quesos y garbanzos, chocolates y cafés. 
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La feria acababa para el ganado  el día 24 de septiembre con diana, reparto de pan a los pobres, elevación de globos y fantoches y bailes en las Sociedades de Recreo, que eran los Casinos. Había carrera de Bicicletas en la que concursaban jóvenes de la localidad  para un sólo premio; también la había de burros con  un sólo  premio al más flojo.
Una traca fina de castillo  de fuegos artificiales marcaba el final de la feria a las diez de la noche del día 26.

Los puestos de feria eran gratuitos. "El Portalico de Belén", regentado por Víctor Sáez Martín, situado en el Real, servía comidas a precios populares. Se procuraba que estuvieran dispuestas las compañías de  automóviles para concertar servicios extraordinarios con las estaciones de Alcaudete y Granada. Los abrevaderos deberían limpiarse para la feria así como las fuentes. Formaba la comisión de festejos Benavides, Sebastián Pérez y Francisco Santaolaya junto con el secretario Ruiz de la Fuente.