Antes de que bajaran al palacio abacial de la parte llana de Alcalá la Real, los abades y la curia
abacial vivió en la ciudad fortificada de la Mota. Solían ocupar algunas mansiones alquiladas de las familias hidalgas hasta que se edificó el primer Placio Abacial frente a la Iglesia Mayor Abacial de Santa María la Mayor. En concreto, en tiempos del abad Juan de Ávila, hay noticias de la situación de la casa del provisor. Eran en concreto, el licenciado Diego Fernández, beneficiado de la iglesia de la villa de Priego. Por un contrato ante Cristóbal Gallego, el 10 de enero de 1538 hay constancia de que ejercía su oficio y reedificaba su casa cubriendo el maderamen del tejado. En concreto lo firmaba con los carpinteros Serrano ( Alonso el padre y Luís el hijo). Y consistía en las siguientes cantidades de madera para el armazón:
-Cien vigas de filo que debía ser de fuerza o de un palo dos vigas con el grueso y marco señalados.
-De catorce pies de largo y trescientas tablas de palmo y torno , que se an de dar y tomar, y cincuenta tirantes del mismo largo de catorce pies y la mitad del marco de las vigas.
-todo presto a misión y costas.
En el documento se manifiesta el origen de las casas " las casas que comprásteis a Úrsula de Aguilar, viuda que fuisteis del licenciado Marañón, difunto, que son en la Calancha de la Mota".
-Se fijaba de plazo para entregar la madera en el próximo día de San Juan del año del contrato.
-Y debía ser la madera buena, para pagársele 73 maraveédies por viga y 11 maravedíes por tabla, que se les pagaba conforme traían la madera; y de adelanto, dos ducados de oro aportados por el provisor, que equivalían a 750 maravedies.
-Cien vigas de filo que debía ser de fuerza o de un palo dos vigas con el grueso y marco señalados.
-De catorce pies de largo y trescientas tablas de palmo y torno , que se an de dar y tomar, y cincuenta tirantes del mismo largo de catorce pies y la mitad del marco de las vigas.
-todo presto a misión y costas.
En el documento se manifiesta el origen de las casas " las casas que comprásteis a Úrsula de Aguilar, viuda que fuisteis del licenciado Marañón, difunto, que son en la Calancha de la Mota".
-Se fijaba de plazo para entregar la madera en el próximo día de San Juan del año del contrato.
-Y debía ser la madera buena, para pagársele 73 maraveédies por viga y 11 maravedíes por tabla, que se les pagaba conforme traían la madera; y de adelanto, dos ducados de oro aportados por el provisor, que equivalían a 750 maravedies.
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