Con el nombre de Peso Viejo, se denominaba la actual calle del Juego Pelota. Y, si nos remontamos a su historia, ya aparecía en el Padrón de 1587, con el nombre La calle de Peso de la Harina, porque se había constuido una casa, donde se pesaban las cargas de trigo y harina para controlar el moovimiento de la molienda, que emprendían y concluían los arrieros por la calle de Utrilla, camino de los Llanos y de las Riberas, hasta los molinos de Huéscar ( Buéscar, por estos tiempos). Su control se realizaba, años antes, dentro de la ciudad fortificada junto a la tienda del Contrates a la
entrada de la Plaza Alta hasta muy avanzado el siglo XVI.
Con la caída del
Gabán, hubo varios intentos de ubicar la Casa del Peso de Harina. En 1588 se
cayó la Casa del Peso de la Harina de la Mota y, unos años después, en el del
Anillo de la ciudad urgieron la
construcción de una nueva Casa. En torno a los años
noventa del siglo XVI, se mantuvo la edificación de una Casa de Harina junto el
edificio del Pósito, de ahí que se quejaran los vecinos de que no se hacía el
repeso del trigo tras la molienda en los molinos de
las Riveras y urgiera
colocarla en las casas o mesones cercanos al Pósito como el del pastelero Pedro
de Pineda o en casas de los Mesones Altos. Finalmente, se ubicó en un solar cercano al Llanillo, donde se conservan sus trazas en el archivo municipal. Fue una realidad en la
calle del Peso Viejo, donde se alojó, en cierto tiempo de principios del siglo XVIII, el Juego de Pelota. Una calle de campesinos, algún molinero, hornero, batanero, albañil, y un famoso tratante de la seda, con la que hizo un gran caudal Rodrigo de Mora. De ser lugar de Juego, le viene el nombre a esta antigua calle. En el siglo XVIII, ya no se jugaba en este recino a la pelota, pues se había invadido su lugar con el convento de Consolación, pero se estableció muy a finales el edificio del Peso de las Tercias Decimales, edificio que se mantuvo hasta mediados del siglo XX, derruido para eidificar un bloque de pisos.
Como escriben Antonio Heredia y Domingo Murcia en el programa de la Virgen (2018), en 1885 se le renombró con la de Santo Domingo de Silos para hacer honor al patrón alcaláino. Esta calle siempre estuvo ligada a las atarazanas de la ciudad, a las Tercias Decimales, a una taberna de dicho nombre, al oratorio del Ecce-Homo ( primera estación del Vía Crucis del siglo XVII), a la familia Batmala, que ocupaban la casa del actual bar de Pepe
(desde antaño de su familia Los Góngora), y donde Pablo repartía su hacienda entre los más necesitados, al bar Madrid, que causó impacto en su tiempo; a la fiesta de la Cruz del Ecce-Homo y de la calle Rosa, a la escalinata que albergaba el pasadizo hacia la sala de máquinas del depósito -el refugio accidental - de la Corredera, a la familia del maestro de obras de la Morena ( Manuel López, su sobrino Saturnino... y otros miembros de su empresa), a carpinteros de la familia Murcia y Pino, al Salón de Bodas bajo las dependencias y huerta del convento franciscano de la Ortden Tercera, a la actual fábrica artesanal Tierras de Fronteras, a los chiringuitos de la Cruz, a la casa de la familia de Mateo Barrio y del fotógrafo Martos, a Peñalver y su familia, a los Robles, a los Hidalgos y Rueda, Afán de Ribera, a los Canos, a la Sevillana de Electricidad, a la coronación, a los fuegos y mosaico de la Virgen....a jornaleros contratados, aguardiente de madrugada, vino terreno, carbón de bracero, ....y a la farola que nos obliga a hacer la girola con los automóviles.
Y estos son los vecinos en 1750:
Blas de Hermosillas (294), viudo, con dos hijos menores y una hija.
Francisco Callejas (297), soltero, con su madre y una hermana.
Francisco de los Santos (298) casado, tres hijos menores y una hija.
José Marquez (301), de 62 años, casado con un hijo menor y una hija.
José Martínez (302), casado, tenía una hija.
Juan Ignaacio Martín (303), casado, tenía un hijo menor y una hija.
Juan Carrillo (304), casado.
Pedro Pérez (307), casado, con dos hijos menores y una hija.
Pedro Pérez (307), casado, con dos hijos menores y una hija.
PUJAREROS
Salvador Jiménez (308), casado, tenía dos hijos de 18 años jornaleros y dos hijas.
HORTELANO
Francisco Vela (296), de 62 años, casado,m con un hijo jornalero mayor de 18 años, otro menor y seis hijas.
SECUNDARIOS
El maestro de carpintero José Peñalver (299) casado y con una hija.
Juan de Retamosa ( 300). maestro de sastre, casado.
SERVICIOS
Bartolomé Merino (295), procurador de número, viudo, tenía un hijo escribiente de pluma mayor de 18 años, otro menor y cuatro hijas.
HIDALGA
Doña María Teresa Montijano de la Rosa, viuda, con un hijo jornalero de 18 años.
VIUDA
Ana de Corpas (293), tenía un hijo menor, dos hijas y a su madre.
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