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lunes, 12 de agosto de 2013

CAPÍTULO VII DEL ESCRIBANO PINTOR. TOLLAT CRUCEM.



 
 
 

                                   TOLLAT CRUCEM
 
 
El cura Bláñez estaba considerado como un experto , al que recurrían todos los notarios para que les ayudara en la transcripción de los documentos medievales y en la traducción de los libros latinos. Lo que no sabía el pobre sacerdote era que, aquel día,  era utilizado por un  joven escribano que pretendía desembarazarse de muchas preocupaciones que lo angustiaban internamente. Le habían dicho que  en aquellas letras y en algunos lugares estaba la clave de su destino particular y , a su vez, de su futuro amoroso. Por eso, se hizo el tonto para comprender lo que no sabía, y más aún para descubrir lugares y sitios insospechados.
            Había pasado el  umbral de la puerta y, al instante, Gómez Muñoz sintió en su propio cuerpo como si se sintiera liberado de una azogue interior que le minaba diariamente. Se identificaba con una persona acosada por aquellos seres misteriosos que le zaherían  desde la torrecilla de la escalera de los pies de la iglesia, mientras se asomaba a la  puerta de su escribanía.
            Miró al altar mayor y se santiguó. Pero, inmediatamente su vista se dirigió hacia los medallones de la capilla del Baptisterio. Le preguntó al cura Bláñez:
-¿Son esos los padres de los antepasados de los Aranda? Pues lo he escuchado  en varios corros de personas hidalgas.
-Me dirá- le cortó de un golpetazo el cura- que está enterrado una rama de la familia de los Aranda. Pero nada más.
-Pero, parecen como si fueran auténticos retratos.
- Tal vez lo sean. Son auténticas representaciones de artistas que saben lo que esculpen.
-Me dan miedo. Me parece como si expresar el sentimiento anterior antes de llegar  a leer la leyenda latina que acabamos de leer .
-Que no te den miedo. Son figuras que representan el Temor, La Prudencia, la Sabiduría...  
             -La primera es de un hombre lleno de temor.
-Eso, el temor de Dios.
-La Segunda, una mujer como huyendo y alterada de algo, ¿. la Prudencia? Algo deben significar…
-Una mujer alterada y un hombre lleno de temor ¿ Por qué?
-Ya lo comentaremos. Hoy sólo me he traído sino la Vulgata y nos vamos a centrar en  los textos latinos. Vayamos por partes.
 
Lo adentra en la capilla bajo la bóveda vaída, cuyo centro son una corona  de flores  y un juego estrellado. El escribano vuelve a preguntar por si tenía algún misterio. Está intrigado. No hace pensar si eso se refiere a su estado actual. Pero el cura le corta en seco. No quiere más debates.
-Fíjate en el arco y en su leyenda
-Veo tan solo “tollat “……bueno "cru"
-Eso crucem
Pues está claro, ya tenemos dos palabras “ tollat crucem”- pensaba  y hacía suya la frase que "mis sentimientos me los eche encima, que mis acosos, mi s desosiegos…
 
 
El cura, inmediatamente , echa mano a la Vulgata y le manifiesta:
-Me suena a san Lucas  cuando dice: dicebat autem ad omnes si quis vult post me venire abneget se ipsum et tollat crucem suam cotidie et sequatur
 
-Yo  veo semet y ahí no está. No obstante en castellano se traduce de qué manera.
Y muy solemnemente el cura declamaba:
Decía entonces a todos: --Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz cada día y sígame.
-Pasemos a Marcos que es muy parecido por si tiene el semet
-Vamos , manos a la obra
-Capítulo  8  en el versículo 34 “ et convocata turba cum discipulis suis dixit eis si quis vult post me sequi deneget se ipsum et tollat crucem suam et sequatur m
-No están  el semet ni el irsum
-Que no es irsum , sino ipsum . Eres una calamidad como el pintor. Antes que me preguntes, te lo digo: “Y llamó a sí a la gente, juntamente con sus discípulos, y les dijo: --Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz y sígame”
En este momento, se acerca el escribiente de Gómez Muñoz  y los interrumpe.
-Señor, ha venido un vecino que necesita urgentemente un papel.
Se marcha Gómez y el cura trata de encontrar el versículo de San Mateo. 
-Me suena a san Mateo, aquí lo tengo  a este evangelista.
-Me voy, pronto vengo.-..
-Claro que sí, el recaudador de impuestos-mientras pasa las hojas del libro  y se salta la Infancia de Jesús, elude la Pasión,  y se pregunta si estará entre el quince y el veinte capítulo.
El escribano sale corriendo por el portón  mientras pensaba " debe ser algo de tomar  la cruz , un anuncio". Vuelve a dar vueltas a su cabeza sobre si esa inscripción es un hito de su propia pasión, su sufrida vida.
-Ya lo tengo, dice así   dicebat autem ad omnes si quis vult post me venire abneget se ipsum et tollat crucem suam cotidie. ¿Dónde habrá visto ese hombre semet . ¡Qué analfabeto irsum! ¡En qué estará pensando!
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

 

 
 

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