EN EL BOLETÍN DE LA PROVINCIA DEL DIARIO DE JAEN.
Jueves 20 de Junio de 1833. San Silverio Papa. Y cuatro siguientes
COLERA MORBO,
ES ESta enfermedad que tantos estrago® ha causado» desde su invasión en Europa, arrancando millares de víctimas en todoslos paises que ha recorrido,, parece que también debe amenazarnos coa mas ó menos violencia, confirmándose esto» temores desde que empezó á esperimentarse dentro dela Península. Aunque felizmente no ha tocado todavía en Jos dominios de España, es dificil persuadirse de que estos quedarán intactos á na ser por una especial disposición de la Providencia- No por eso debemosí gbsiídpnarnos á la desesperación que sería un mal«itivo que el contagio. La confianza en la ^prot teccioñ que el Cíelo ha dispensado siempre á nuestra España, y las medidas enérgicas que el sábio Gobierno que nos dirije ha adoptado y adopta para precaver é impedir la entrada del mal en los pueblos que están cometidos á su cuidado, son muy suficientes para inspirar la tranquilidad , aunque nunca debamos consentirnos ciegamente en que escaparemos de una aflicción devastadora de otros países, que han estado prevenidos con toda la vigilancia que pudiera apetecerse. Énmedio de todo no debe perderse de vista para alentarnos que según las observaciones de facultativos de mucho crédito se encuentra en la atmosfera un principio influente en la propagación de la enfermedad, y aun en su desarrollo, que es mas cspnesto y sensible en las poblaciones inmediatas á los grandes rios, cuyas aguas sirven de -vehículo para conducirlo é inficionar el aire que le es inmediato. Por fortuna el punto de la Península en que el cólera se ha presentado es á la parte occidental y en el desaguadero de los torrentes caudalosos que discurren por nuestro territorio .- es de consiguiente una ventaja que la ésposicion al contagio esté respecto de nosotros , en razón opuesta á su propagación , y que en vez de favorecerse, siempre haya de estar la causa luchando contra los medios de ensancharse ó desemvolverse lo cual debe tranquilizarnos hasta cierto punto. Mas no debe confundirse esta confianza con el abandono absoluto , y entregarnos por ella ciegamente á la idea de que asi como es posible la invasión , lo es también que no llegue á experimentarse. Semejante raciocinio es tan falso como perjudicial , y produci- 'ría consecuencias desastrosas; por que en todas las enfermedades debe precaverse el mal, mas bien que esperar á «urarlo cuando se presente., y especialmente en el cólera que ataca' con estraordinaria violencia , se desenvuelve con increíble rapidez y destruye cuando apenas se ha presentado. Si se hubiese de esperar á que los síntomas , precursores del mal se mareasen para tratar en seguida de aplicarles el remedio , ' acaso todos los pasos serían inútiles y ya no lo habría cuando el facultativo tratase de observarlos. Es, pues, necesario estar prevenidos y poner en planta todos ló's arbitrios
Instituto de Estudios Giennenses. Boletín Oficial de la Provincia de Jaén. 20/6/1833.
s que son capaces de contener la invasión-, teniendo siempre muy á la vista las causas predisponentes, que según opinion de los mejores facultativos puedan dividirse en dos clases. La primera comprende las que obran inmediatamente «n el estómago ; y la segunda las que obrando primero en el cutis , dirigen luego su acción á los órganos interiores. En la primera clase se cuentan, la demasiada repleción de estómago , los alimentos flatulentos é indigestos , los vegetales crudos y acuosos , las frutas ácidas , ó que no están en sazón , las carnes saladas , el uso de bebidas frias , especialmente en ayunas , ó cuando se suda , y la embriaguez. En la segunda se comprenden las variaciones repentinas dé temperatura , despues de excesivos calores , el exponerse sudando á las corrientes de aire fresco, con particularidad al anochecer, y el uso de baños frios cuando se está acalorado. También se cuentan, entre sus causas predisponentes, la tristeza y el miedo. La primera clase de causas, si tiene algún influjo para ' disponer el cuerpo humano á la cólera , no es por virtud particular que ellas posean , sino porque trastornando las funciones nutritivas , rompen el equilibrio entre las fuerzas vitales ; y del aumento de estas en las visceras , resulta su diminución en el cutis ; de que se origina mayor aptitud en él para resentirse de las impresiones de la atmósfera, que es donde reside el principio morboso de la enfermedad. Algunos dudan del poder de las mencionadas causas, porque notan que la cólera acomete con igual ímpetu á toda clase de personas , y en todas las condiciones de la vicia sin que la edad , ni el sexo, ni el temperamento, y lo que es mas, ni la diversidad de, localidades, ni de climas , le sirvan de obstáculo á su manifestación y progresos ; pero si se tiene presente , que los desarreglos de las funciones digestivas , adquiridos en tiempo de^ cólera , suelen acarrear inmediatamente el ataque ; y que basta mutilas veces, en igualdad de circunstancias, dormir al sereno, ó exponerse estando sudandfrío y húmedo de la noche para experimentarle , no se dudará tanto de Ja influencia que puedan tener. Increíble se hace , que dependa la cólera en algun modo de las alternativas de temperatura , cuando en países, donde son repentinas y considerables tanto como en los trópicos , jamas se conoció enfermedad que se le asemeje; pero no lo será tanto, si se advierte que tales alternativas no jueden ser iguales en todos los climas , ni dado caso que o fuesen, seria una misma en ellos la disposición de nuestra máquina para sentirlas. Ademas, es innegable que en cualquiera punto de la tierra , donde la temperatura varíe repentinamente , han de experimentarse enfermedades idénticas' á las de los trópicos , y aun muy semejantes á vece* á la misma cólera. Porque ¿qué cosa hay mas parecida á ella que el pólico de Madrid , y otros muchos que se padecen fuera de los trópicos, donde quiera que la temperatura es inconstante ? No sólo sus causas , que son el frió penetrante de las noches alternando con el calor del dia, sino hasta muchos de sus fenómenos son idénticos, como observa Mr. Begin con bastante fundamento en su tratado de Therapeutica. Nada , pues, tiene de increíble que en los climas cálidos predispongan á la cólera las variaciones repentinas de temperatura , ruando se las ve causar en otros, donde no son tan considerables , enfermedades casi del todo análogas. (Seguirá.) PERDIDA. Quien se hubiese encontrado una cartera de tafilete, que.se cierra con broche de acero, la cual contiene algunos papeles de interés para su dueño , y apuntaciones útiles al mismo , escritas en su libro de memoria , se servirá dar aviso en la librería de Carrion , donde se puntualizarán ma» teñas , pagando si se exige el hallazgo
...................................Esta enfermedad que tantos estrag s ha causado» desde su invasión en Europa, arrancando millares de víctimas en todos los paises que ha recorrido,, parece que también debe amenazarnos coa mas ó menos violencia, confirmándose esto» temores desde que empezó á esperimentarse dentro de la Península. Aunque felizmente no ha tocado todavía en Jos dominios de España, es dificil persuadirse de que estos quedarán intactos á na ser por una especial disposición de la Providencia- No por eso debemosí gbsiídpnarnos á la desesperación que sería un mal «itivo que el contagio. La confianza en la ^ivíle&vada^mo» Instituto de Estudios Giennenses. Boletín Oficial de la Provincia de Jaén. 20/6/1833teccioñ que el Cíelo ha dispensado siempre á nuestra España, y las medidas enérgicas que el sábio Gobierno que nos dirije ha adoptado y adopta para precaver é impedir la entrada del • mal en los pueblos que están cometidos á su cuidado, son muy suficientes para inspirar la tranquilidad , aunque nunca debamos consentirnos ciegamente en que escaparemos de una aflicción devastadora de otros países, que han estado prevenidos con toda la vigilancia que pudiera apetecerse. Énmedio de todo no debe perderse de vista para alentarnos que según las observaciones de facultativos de mucho crédito se encuentra en la atmosfera un principio influente en la propagación de la enfermedad, y aun en su desarrollo, que es mas cspnesto y sensible en las poblaciones inmediatas á los grandes rios, cuyas aguas sirven de -vehículo para conducirlo é inficionar el aire que le es inmediato. Por fortuna el punto de la Península en que el cólera se ha presentado es á la parte occidental y en el desaguadero de los torrentes caudalosos que discurren por nuestro territorio .- es de consiguiente una ventaja que la ésposicion al contagio esté respecto de nosotros , en razón opuesta á su propagación , y que en vez de favorecerse, siempre haya de estar la causa luchando contra los medios de ensancharse ó desemvolverse lo cual debe tranquilizarnos hasta cierto punto. Mas no debe confundirse esta confianza con el abandono absoluto , y entregarnos por ella ciegamente á la idea de que asi como es posible la invasión , lo es también que no llegue á experimentarse. Semejante raciocinio es tan falso como perjudicial , y produci- 'ría consecuencias desastrosas; por que en todas las enfermedades debe precaverse el mal, mas bien que esperar á «urarlo cuando se presente., y especialmente en el cólera que ataca' con estraordinaria violencia , se desenvuelve con increíble rapidez y destruye cuando apenas se ha presentado. Si se hubiese de esperar á que los síntomas , precursores del mal se mareasen para tratar en seguida de aplicarles el remedio , ' acaso todos los pasos serían inútiles y ya no lo habría cuando el facultativo tratase de observarlos. Es, pues, necesario estar prevenidos y poner en planta todos ló RECURSOS
. Instituto de Estudios Giennenses. Boletín Oficial de la Provincia de Jaén. 20/6/1833.
SALUD PUBLICA. En aviso oficial de Sevilla su fecha 7 del corriente, se dá conocimiento de que el Cólera Morbo vuelve á. hacer progresos en la Ciudad de Lisboa , esteudiéndose indistintamente por todos los barrios de ella según las últimas noticias rectbidas También se ha presentado el mal en Setubal, donde el 28 de Mayo fueron acometidas algunas personas , asi coíno en Aestao , Caparica , Azohida y' Alfarin. « En Faro ha habido un caso dudoso que ha producido diferentes opiniones , por lo que no se puede calificar q¿e sea el Cólera. Instituto de Estudios Giennenses. Boletín Oficial de la Provincia de Jaén. 19/6/1833. Página 3
N.' 17. "(4 ctos.) Fólio 78. BOLETIN D E OFICIAL JAÉN . Martes 17 de Setiembre de 1833. = Las llagas de Sari Francisco y San Pedro Arbues. Sale el Sol á las 5 y 49 mtos. y se pone á las 6 y 11. Subdelegacion principal de Policía de la Provincia de Jaén —
El Excmo. Sr. Subdelegado general de Policía de estos Reynos con oficio de 1 o del actual se ha servido dirigirme el escrito que dice asi.—junta superior de Sanidad' de Granada.Hallándose la Junta superior de Sanidad de mi presidencia en el apuro de no haber tenido parte ni noticias oficiales, qne manifiesten el estado de la salud de la Ciudad de Sevilla, que cree sospechoso por lo que le manifiestan el Excmo. Sr. Comandante general del Campo de Gibraltar , y Gobernador de Málaga con fecha 3 y 6 del actual , que á ejemplo de la Ciudad de Cádiz han cortado su comunicación por mar y tierra con ella, para cumplir con el objeto primario de sus deberes y atenciones , y no debiendo ceder á estas autoridades en • sus deseos ni ardientes conatos de conservar la salud de a ARTICULO DE OFICIO. Instituto de Estudios Giennenses. Boletín Oficial de la Provincia
sus pueblos , mayormente cuando casi no se duda que la» de Sevilla , bau abandonado la Capital trasladándose, á otro punto en conformidad á las Reales órdenes de la materia, lo cual persuade la existencia del contagio en ella, ha resuelto incomunicar esta Provincia y la de Jaén con la de Sevilla y sus pueblos dentro del radio de las quince leguas por la obscuridad que hasta ahora presentan el estado de su salud y el silencio que han observado ; á cuyo fin y el de preservar á los que felizmente la disfrutan de tan funesto azote, ha acordado se establezcan guardias según el sistema y método prevenido para estos casos en las instrucciones vigentes. — Que no se admitan personas ni efegtos de dicha procedencia que no vengan desde primero del actual por los puntos de Andujar, Alcalá la Real y Archidona. — Que no se reciban bajó ningún pretesto en pueblo alguno de las Provincias de esta demarcación personas ni efectos de. tan sospechosa procedencia , sin que se hayan presentado antes en cualquiera de los tres puntos referidos , donde se les pondrá en cuarentena de observación por el término de quince dias, ó mayor si las circunstancias lo exigieren.—Que en Andujar , Alcalá la Real y Archidona , se establezcan lazareto en monasterios, casas aisladas, ventas ú otros sitios acomodados al intento , pidiéndose para él la correspondiente custodia al Excmo. Sr. Capitan general , á disposición del Comandante de las armas, Autoridades locales , ó Juntas municipales respectivas que cuidarán se eviten contravenciones á las leyes y reglamentos sanitarios , de que la Junta superior ¡es hace desde ahora responsables por los daños y consecuencias funestas á que pueda dar lugar su omision eu asuntos de tanta trascendencia. — Que en ningún monasterio despoblado , casa de campo ó venta aisL'ada, se dé acogida ni .víveres, á persona que proceda de Sevilla , y sus pueblos á quince legua de su demarcación bajo las mismas pena- , sin que auteS se haya presentado á las Juntas respectivas donde
están mandados establecer los lazaretos.—Que en cada uno de estos se destine un facultativo de conocimientos, prefiriéndose para ello los del partido ó pueblo en que esto» radiquen , y que las Juntas de sanidad de dichos puntos para cubrir estas atenciones y otras de que en su caso puede necesitar se valgan de los recursos locales, dando principio por la subscripción propuesta por el Gobierno en Real orden de veinte y ocho de Agosto anterior , y consultando á esta Junta lo que necesiten para proveerles según corresponda y las necesidades lo exijan. ——con » estas disposiciones se inserten en los Boletines oficiales de esta Ciudad , los de Jaén , Málaga, Córdoba, Sevilla y Cádiz , á los efectos convenientes , circulándose ademas á las casas de campo, monasterios y ventas aisladas, por las Justicias de los pueblos confinantes á ellas, á quienes asimismo se les comunique por separado una noticia de los síntomas del mal , medios de preservarse y. método de acudir oportunamente á su curación ; para lo cual se escite el celo y conocimientos científicos de la Real Academia de Medicina y Cirugía de esta Ciudad para que la forme con ¡a premura que requiere el ínteres de estos pueblos. Lo que comunico á V. para su puntual observancia y cumplimiento ; de cuyo recibo me dará aviso.—Dios guarde á V. muchos años. Granada 3 de Setiembre de 1333.—'avier Abadia.—José Maña Ortigosa , Secretario interino.—Cuya superior disposición me ha parecido oportuno hacerla saber por medio de este periódico, á los Subdelegados de partido encargados, y demás dependientes de.esta Subdelegacion principal de mi cargo para su mas exacto cumplimiento. Jaén i 3 de Setiembre de 1833.—Jacinto Cañada Rojo. En atención á lo prevenido en la superior disposición que antecede , se han tirado los ejemplares suficientes para que los dueños de caseríos, cortijos, molinos, he imitas y demás casas en despoblado del término de esta Capital , dispongan comprar para la debida inteligencia de los que las habitan : y las justicias cíe esta Provincia podrán prevenir á los cíe sus respectivos términos te hagan de dicha orden para su conocimiento v cumplimiento, según dispone el Sr. Subdelegado principal de Policía al comunicarla. ANUNCIOS OFICIALES. D. Antonio Padilla y Luque , Administrador principal de Correos y Caminos de Andujar y su departamento &c.rrHago saber: que los Sres. Directores generales de Correos y Caminos del Reyno con fecha a3 del roes próximo pasado se han servido decirme admita proposiciones para el arrendamiento anualmente de la dehesa Real de la Salíega de la propiedad de la" renta sita en el término-de Montoro ; en su consecuencia 'invitó por el presente á las personas á quienes pueda acomodar se presenten en esta Administración principal de mi cargo dentro de veinte dias seguidos al de la fecha á hacer la» que gusten , que siendo arregladas lés serán admitidas. Andujar 16 de Setiembre de 1833.=Jaula Provincial de Sanidad. Habiendo creado las enfermedades -contagiosas que se padecían en Valdepeñas^ •Andujar-v-lznatoraf, y cania— dose d Te ¡ieum en acción de gracias al Tmio-poderoso en i.° , ( y 8 del corrietitc , la Jtrn'la Provincial de Sanidad lo hace público en los términos de costumbre para que cumplidos los treinta días de cuarentena que habrán de eiupi-tar á contarse reipectivatnente "desde el día siguiente al en que se celebró aquella ceremonia religiosa, no se ponga impedímenlo alguno á las procedencias de dichos puntos.—AI mism o tiempo hace presente á los efectos oponemos , que según oGciodc I Sr. Gobernador civi l de la provincia de Almería , se han presentado en aquella Ciudad algunos casos de cólera-morbo, por loqu e queda en observación según disposición de la Junt a Provincial de la misma.—Dios guarde á V V . muchos años. Jaén 14 de Agosto de i$34.-E l Vicc-Presidente, Vicente Giró n Villainandos.—Sres. Justicias y Ayuntamientos de los pueblos de esta Provincia. Comandancia general de la•MARTES T9 DE AGESTO DE 1834.
ARTICUL O D E OFICIO.
Gobierno civil.
vrt»cn/arn«m.-3l.e»El Excmo. Sr. Secretario .de Estado y del -Despacho de lo Interior del
Rcyuo coa fecha 19 de Junio me- dice'. lo que
copio.KL s tenacidad con que la enfermedad conocida con el nombre de cólera-morbo espasmódico continúaafligiendo varios pueblos de las
provincias de.Andalucía , bace indispensable que
se adopten medidas de precaocíon que sí
canzajen. a contener en ellas los progresos dél a
epidemia, permitirán á lo meaos establecer con
el necesario detenimiento los medios de combatiría • con buen éxito , preservando á las pruvincias no infectadas de los males y trastorno que
acompañan á sn repentina invasión. Con este objeto se lia servido S, M . la Reina Gobernadora,
oido el dictamen niel Consejo-de Ministros, decretar lo siguiente-;—U
• 1.® Las provincias del reino de Murcio, mientras permanecen libres del cootagío, se aislarán
de las de Andalucía por tina lineo tirado de Cacavaca por Lorca ú Cartagena , dejando al puerto de Lumbreras á la parte exterior de la línea.
Los puestos de esta se cubrirán poc t»ipa y Mi -
licias urbanas del reía o de Murcia.
- 2. ° Las Provincias de Extremadura y la Mancha se aislarán de Jas de Andalucía , para lo cual
se tomará por -linea de iocoinunicacion la cordit
llera que las separa desde Fregenal á Carayaca,
donde> se unirá con la línea anterior.
, 3.®.. En cada una de estas líneas se determinarán los puotos que deben servir de únicos paáoiipará los viagerosy tragincros, je n ellos se
cumplirán - todas las reglas y precauciones de sanidada - i
.< Habrá; casas- de Observación , unas para los
individuos y.efectos- procedentes de puntos i u festadoís<¿ vsaapecbosos y «tras para las dé los^demas- < pueblos Ahdalocía que -aov conste se-haIDsorcn ialcuno^e^VBqoiÜlos casos; " v .."'
• i V i f r rtíiMrrfrn n -lo» puestos principales de tropa del ejército.
5.° En lus -intermedios los habrá de Urbanos,
Í
cflda uno 1 de los pueblos 'fitqados *a¿bre ésta
uva ejercerá su policía ¿ahitaría c6n dependen-'
cía y bujo reglas dictadas por el Gefe principal de aqUella: ' • •
<j.° La extensión de cada linea ¿e' dividirá ea
distritos caja uno á las órdenes de un Gefe mi-*
litar.
7." Estos Gefes de distrito dependerán del
gefe principal dé U línea1
, él cnal , sin perjuicio
de estar á las órdeoes del Capitan general de U'
"Provincia,'"eti cuanto al servicio militar , se entenderá respecto al sanitario con los Gobernadorés civiles'encargados especialmente' de la sanidad , de- quienes recibirán las correspondientesinstrucciones , y á quienes dirigirán los partcsy
noticias.
1
En caso urgente el Gefe de distrito , aídar
conocimiento de lo que ocurra al de la línea,-
deberá hacerlo al propio tiempo en derechura al
Gobernador -civil ; y del mismo moíJoptMrá'citedirigirse al 'Gefe de distrito', en obsequio de la
brevedad , dando conocimiento al de la linea.
8.° La linea de toda la parte fronteriza de
las Provincias de Andalucía y Extremadura la
mandará un Gefe nombrado por el Capitan general de Extremadura.
' 9. ° La línea •fronteriza déla Mancha laman*
dará el Comandante general de esta Provincia;
10. La linca fronteriza de Murcia-y Andalucía la mandará un' gefe nombrado por el Co?
mandante general de Murcia.
'11 . Cada Gefe de estas líneas tendrá á sus
órdenes otros dos j qoe- como'Inspectores 'las re-
' correrán constaotemente , el Uno del centro bá-
' ci* la derecha, y el otro del centro á la-itquierda,'
12. El servicio ' de 'estos 'cordones1
sanitarios
pe bará ctm la más severa puntualidad'y vigilaricia/' y en los puntos importantes habrá patrullas-4juej
saldrán dc ODos-pneblos1
»' ¿troa.recorrierido'la 'línea 'hasta1
¿ucobtrarsé, ' :r, )
13. tíe reí•etarán' p'tfa' gobiertiQ, ^cío i
\ -fes y 'dé 'los - particularesíen férmioos' mu y claros
Instituto de Estudios Giennenses. Boletín Oficial de la Provincia de Jaén. 19/8/1834.
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