EN EL DÍA DE SANTA ANA, SUS PRIMEROS PASOS DE COFRADÍA
EL HERMANO MAYOR ALONSO DE SOLÍS
En 1559 contrató la cofradía de Nuestra Señora de Santa Ana con Pedro Sardo, el Viejo, que era el padre de Pablo de Rojas una imagen de Nuestra Señora de Gracia. Consistía en una hechura de bulto y su tabernáculo ( con siete de cuartas de alto, unos 4.45 mts) con un serafín encarnado a los pies y una media luna plateada, y con policromía de plateado y carmesí para la saya, de blanco y esgrafiado del velo , corona, cinto y manto dorados. En palabras de Lázaro Gila “sería una versión más del tema de la Inmaculada por el serafín y luna a sus pies”[1]. En 1560, era hermano mayor Alonso de Solía, casado con Catalina de Porras. Durante su etapa la iglesia de Santa Ana se vio enriquecida por esta imagen de Nuestra Señora de Gracia. Durante la realización de la imagen acontecieron varios percances, por los que la cofradía llegó a tener ciertas deudas con el pintor de la obra de tal modo que la cofradía fue alcanzada en 15.000 mil maravedíes.
Venía esta deuda motivada por unas cuentas de hermanos mayores anteriores. Entre 1559 y 1560 fue hermano mayor Alonso de Solís. Este prioste fue el que hizo el primer contrato en el primer año. Debió uncumplir el cotrato por deudas anteriores. Y asumió el alcance derivado por no pagar a plazo en 1560.Pero debió tener algunos problemas económicos y hubo que rectificar el contrato hasta tal punto que firmó un nuevo contrato en 28 de julio de 1560 por que se comprometía a pagar quince mil maravedíes a la cofradía de Santa Ana. El motivo no era otro sino que este prioste se había visto alcanzado en las cuentas y era deudor con la cofradía. Con unas nuevas cláusulas, se fijaba en un año la terminación de la obra y se saldaba la cuenta que la cofradía había contraído con el pintor Pedro Sardo, al que le denomina con este oficio. Y el contrato, además, fijaba varios plazos: uno, consistente en la paga de la mitad del presupuesto, exactamente cuando Pedro Sardo acabara la hechura de dicha obra, y otro, una año después de acabada la obra. Fueron testigos de este compromiso Antón de Martos, y Melchor López de Atencia, hijo de Hernán López de Atencia ante el escribano Alonso Sánchez (Alonso Gutiérrez, 4677).
A partir de 1560, son muchos los vecinos de Alcalá que son cofrades de Nuestra Abuela Santa Ana, junto con las cofradías de la Limpia Concepción , Cabeza. Antiguo de la Santa Veracruz. Reciben los oficios de la cofradía con el acompañamiento del estandarte y antorchas durante su entierro, al mismo tiempo que la cofradía les dedica una misa.
[1] GILA MEDINA. Lázaro. Arte y artistas en el Renacimiento en torno a la Real Abadía de Alcalá la Real. Recoge el contrato del legajo del AHPJ. 45.91. Folio 217-217 vª.
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