MEMORIAS,
FUNDACIONES Y CAPELLANÍAS Y ANIVERSARIOS DE NUESTRA ABUELA SANTA ANA TRAS SU
DECLARACIÓN COMO PATRONA
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Nuestra ´Abuela " 2018 |
Continuando con las memorias,
aniversarios, capellanías de Nuestra Abuela Santa Ana, recogidas en los libros
Primero y Segundo del Libro de
Capellanías, observamos que ya no se incrementan a lo largo de los siglos siguientes
(XVII-XX). Más bien, se transmiten las capellanías de un patrón a otro, de
descendiente a descendiente, y se recogen tan sólo algunas novedades. Varias
familias nobles continúan con el mantenimiento de la devoción a Nuestra Señora
de Santa Ana.
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Nuestra Abuela 2018 |
LOS CONTRERAS Y MÉNDEZ DE SOTOMAYOR Entre
ellas, los Contreras y los Méndez de Sotomayor. Muy interesante su fundación o memoria, para conocer
esta familia que unió al escribano Pedro de Contreras con Francisca Méndez de
Sotomayor, que tuvieron por hermana Leonor Méndez de Sotomayor, la fundadora
del convento dominico de la Encarnación, y al licenciado y presbítero don
Alonso Méndez de Sotomayor, primer mayordomo de la imagen y capilla de Nuestra
Señora de las Mercedes.
Su memoria no
era exclusiva con la devoción a Santa Ana, sino que lo compartía con otras
devociones. En concreto, este matrimonio comentado fundó un patronazgo con dos
memorias: una que obligaba a celebrar la fiesta y decir la misa cantada
correspondiente a las festividades de la Santísima Trinidad, de San Juan
Bautista y de Nuestra Señora de la Concepción, y la de la Señora Santa Aba; y
otra de cuatro misas rezadas sobre su sepultura. Lo hacían ante el escribano
Juan Rodríguez de Cebreros, primero en su testamento de 22 de agosto de 1606, y
posteriormente en la cláusula de 30 de agosto de 1608. Cargaban dicho
patronazgo, (y, aquí radica su relación con Santa Ana), por hacerlo sobre una
Casería de teja y su lagar, que disponía 14 aranzadas de viñas y tierra calma,
situados en el sitio de Santa Ana, específicamente linderas con los Llanos y
tierra de realengo y viñas de los herederos de Pedro Alonso el Rojo ( por
cierto le daba nombre este personaje a una sección de la calle de los Caños), y
viñas de Isabel de Rosales. Se apreciaba el rendimiento de estas tierras en 800
reales. Y el patrón sucesor fue el licenciado beneficiado Alonso Méndez de
Sotomayor o Contreras, al que sucedía Juan de la Hinojosa, sobrino por parte de
su hermana Leonor Méndez de Sotomayor y de Juan de Hinojosa Castillo.
LA FAMILIA DE LOS ARANDA
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Santa Ana, retablo de las änimas |
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Santa Ana , retablo de Capilla de San Pedro
en Consolación |
Existen
varias memorias relacionadas con las familias de los Aranda. En primer lugar
Clara de Aranda, firmó una memoria el 28 de septiembre de 1643 ante el
escribano Juan de la Chica de diez misas rezadas con una limosna de dos reales
por cada una de ellas, para que se le dijera una
de ellas en la festividad de Nuestra Abuela ( el resto en las fiestas de
la Natividad, la Encarnación Asunción de la Virgen, Natividad, Pasión de
Jesucristo, natividad de San Juan Bautista, San Miguel, Todos los Santos y
Santa Cruz) Esta memoria se gravaba con
27 fanegas situadas en la Fuente de la Encina, y la heredó Ana de Chaves y Aranda, que era hermana de la
anterior e hija de Juan de Aranda Méndez y la granadina Ana de Chávez, hija de
Juan Ciriales y Angulo y Ana de Chaves.
Eran hermanas de Luis de Aranda Leyva, por la primera mujer de su padre.
Su
hermana Ana de Chaves y Aranda, recibía un censo de mil maravedíes de capital
en contra de los herederos de Diego de la Cruz para decir una misa por su alma
en el día de Santa Ana y otra en el de la Encarnación de Nuestra Señora, en la
capilla de Nuestra Señora de las Mercedes. Se recoge este dato por el
testamento firmado ante el escribano Blas de Cáceres el día tres de marzo de
1649. La misa estaba dedicada por el
alma de su criada Ana de Aranda. Y se añadía otra memoria de seis misas rezadas
y una cantada (dos en los días de San Cosme y san Damián por el alma de sus
padres y en el día de todos los Santos). Se cargaban sobre tres aranzadas y
media de viña en la Ladera de Montefrío y sus casas de la Mota. Lindaban con las
del presbítero Juan de Aranda Góngora y de Pedro de Pineda Valenzuela y dos
calles con dos aljibes, donde se recogía el agua, que solían ser casas de
Alonso Cabrera Italia, linde con casas de Alonso Cabrera y las dos calles, cuya
casa y solar heredaron Luís de Aranda Leiva y su hija Mariana de Aranda. Para
poder arreglar las casas, se le asignaban fanegas en la Cornicabra para que no
cayeran en ruina.
HEMOS SUBRAYADO ESTE DATO, PORQUE DATA EXACTAMENTE LOS ACTUALES ALJIBES DE LA MOTA, EN LA CASA DE LOS CABRERA Y SUS HEREDEROS LOS ARANDA LEIVA.
LOS PINEDA
La
familia de los Pineda también estuvo relacionada con la devoción de nuestra
Abuela Santa Ana. Poseían varias fincas en el entorno de este partido de campo.
Jugaron un gran papel en el desarrollo de los cultos. Pues, don Francisco de
Pineda y doña Beatriz Cívico levantaron ante Antón de Santillán en dos sesiones
de los años cuarenta del siglo XVII (17 de julio de 1641 y 15 de enero de
1643), una memoria de tres misas cantadas (dos del Santísimo Sacramento, otra
de la Asunción), y tres misas rezadas dedicadas a Santa Ana, santas Bárbara y Lucía, y para las fiestas de san Esteban, los mártires de Cerdeña y san
Cenón. Se gravaba sobre una huerta de la villa de Cabra porcedente de una memoria
heredada de Baltasar de Pineda. Y sobre todo, sobre las huertas de la Fuente
del Rey que compraron de Pedro Cano Serrano y un huerto en las Azacayas. Esta
memoria provenía en esta familia de don Pedro de Pineda Mejía y don Francisco
de Pineda, caballero de la orden de Santiago, que se obligaba a una misa
cantada a san Cenón y dos rezadas, una a San Joaquín y otra a Santa Ana en su
día de fiesta y octavas, gravada sobre la huerta de la fuente del Rey. Y más
explícitamente, Pedro de Pineda, detalla esta memoria ante el mismo escribano a
favor de la cofradía de Santa Ana, siendo hermano mayor don Pedro de Tapia y
Castilla ante el notario Alonso de Mesa. Y dice de esta manera la cláusula
testamentaria: E mi voluntad que después
de los día de la dicha María de Pineda,
mi hermana, que ha de suceder en la Huerta de la Fuente del Rey mi prima doña
Ana Serrano y los que le sucedan han de dar a la Cofradía de Nuestra Señora de
Santa Ana tres ducados y por ellos han
de tener la obligación de decir una misa cantada a San Cenón y dos rezadas a
Santa Ana en su día y octava. , por la intención de don Francisco de Pineda su
padre.
DATO MUY INTERESANTE PARA LA HISTORIA DE LA COFRADÍA DE LA ABUELA.
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