EL ESCULTOR MARTÍNEZ MONTAÑÉS, EMBAJADOR DE LOS INDIANOS EN SEVILLA

 

Ya sabíamos que Juan Martínez Montañés era embajador en la Casa de la Contratación de Sevilla, sobre todo de los bienes de los alcalaínos que se habían marchado a América y enviaban sus herencias a sus familiares. Un nuevo documento nos confirma que su presencia como  el escultor Juan Martínez Montañés era nombrado para esta tarea que compartía en la capital del Guadalquivir con     a la hora de  recoger los bienes de el licenciado presbítero Miguel de Artiaga. Este  alcalaíno era hijo de  Salvador Diego de Guéscar  y Artiaga  e Inés de Meneses, y hermano del licenciado Alonso de Arteaga Lences, relacionado con el capitán Martín de Arteaga, fundador del Hospital de la Madre de Dios del Castillo de Locubín , murió en Zaragoza de la provincia de la Nueva España de  las Indias en 1607 y en 1625; en essta última fecha  su hermano Alonso daba poderes a varias personas para rescatar sus herencias. Eran hermanos también Lucas de Lences, que había muerto, junto Juan de Guéscar de Artiaga, y dejó su herencia en el hijo del mismo nombre y apellidos. Miguel vivió y residió en Zaragoza de la Nueva España y dejó por hereders que vivían  en 1607, pero al morir ellos dejaron el legado a sus hermanos Alonso y Lucas, este último y Juan también habían muerto cuando se otorgaron poderes. 

Los poderes se los otorgaba al que había sido nombrado canónigo don Matías Suárez de Melo  en Cartagena de Indias y que se encontraba en Madrid y era presbítero en Zaragoza, para todos los bienes y cuentas de venta; y tambien debía tomar las  cuentas de lo vendido y dinero,  al alguacil mayor Domingo de Alçate y al vecino Rafael de Alfayarre como tenedores y albaceas ;  y unas vez hechas, se las debía enviar a Juan Martínez Montañés,  y Gaspar de Guerra, en Sevilla, lo que demostraba que se mantenía la relación y el conocimiento por las élites alcaláinas con el famoso artista alcaláino,