miércoles, 30 de noviembre de 2016

ANTES DE CALVO COMO ALCALDE.

En otros terrenos de la política y de la sociedad alcalaína, se notó más el cambio en el primer semestre de 1933. Es verdad que, en el mes de abril, se autorizó el Centro Republicano de Cahrilla con la aprobación del acta. Pero del laicismo imperante de los primeros días de la República, se volvió a la religiosidad de los años anteriores al nuevo sistema. El sarampión de estos dos años anteriores, donde se extremaron las posturas en temas religiosos, cambió de una manera radical a partir de 1933. Como prueba de ello, la mayoría de las cofradías desarrollaron un vida prácticamente normal, comenzaron a realizar manifestaciones religiosas en la ciudad. De nuevo, el retraimiento de sus miembros y socios durante este bienio anterior cambió de signo observándose que los medianos y pequeños propietarios comenzaron a integrarse en ellas, ya que les servía de fundamento ideológico y religioso a la hora de su militancia política. Pues muchos de ellos formaban partes de los partidos agrarios, monárquicos, y cercanos a la C.E.D.A Esta llegó a fundar una oficina en la calle Miguel de Cervantes, cuyo líder era Juan Utrilla. Y, claro ejemplo de ellos fue la fastuosa celebración de la fiesta patronal el 15 de agosto de este año, como declaraba un acta. “ hacer la fiesta de Nuestra Excelsa Patrona, con el esplendor de siempre, para lo cual los señores cofrades y supernumerarios, contribuirán con lo que puedan con el fin de llegar fondos para tal fin”1, Incluso, de nuevo las antiguas aspiraciones de antes de la República, como la Coronación de la Virgen, renacieron, pero ante el mal panorama que podía significar su manifestación pública, sus partidarios consideraban, de acuerdo con las circunstancias, que sus fondos se destinaran a los cultos “mientras duren las actuales circunstancias”. En concreto, en las fiestas patronales de este año, predicó el arcipreste Chiquero y no faltaron cantores de fuera de la localidad, ni una capilla de música, ni la Banda Municipal de Música. Tan sólo, en el ámbito religioso, se presentaron algunos debates más por motivo e intereses personales que por desavenencias con las autoridades del momento, y, así, se ocasionó con algunos cargos como el capellán del Hospital, a quien se le cuestionó el cobro de un expediente de traslado de cadáver en el cementerio de la Mota a una persona que obligó a que se hicieran servicios religiosos2. El incidente mostraba claramente, a través de los tensos diálogos , lo que pensaban los miembros de la Corporación municipal.

FRIAS:-No se cumple la Ley, y creo que con ello se perjudica sentimientos laicos, creo que no es bueno ni malo, este señor cumple con su deber pero para la iglesia, por lo que creo que no debe nombrarse. No nos molesta sino respetamos.
FRIAS-lo que esta visto que hay interés en que siga y, como no hay republicanos, seguirá.
SÁNCHEZ CAÑETE:- El verdadero republicanismo está en el respeto en las creencias y derechos de los demás, y no en la persecución de personas por sus creencias.
FRÍAS. Como socialista respeto todas las creencias, como lo tiene demostrada en el caso del capellán del Hospital, donde aprobaba la voluntad del testador, pero no es lo mismo, y como no respetaban sus creencias, el no está obligado a respetarlas Siempre he sido respetuoso en las ideas de todos y seguiré siéndolo, pero el señor Sánchez Cañete no respetaba las ideas de los demás.

En el campo educativo, fue donde tuvo lugar el mayor desajuste entre la política de los actuales gobernantes locales y los proyectos inconclusos de los socialistas y radicales, aglutinados en torno a Frías y Batmala. Pues, estos dos últimos eran seguidores acérrimos de la política educativa y cultural del ministro e Instrucción, don Fernando de los Ríos. Gracias a su gestión, se multiplicaron los centros escolares en las aldeas y casco para librar la batalla del analfabetismo imperante en la comarca alcalaína. Por otro lado, apoyaron con toda su fuerza, a pesar de encontrarse en minoría, todo tipo de medidas innovadoras que extendían y propagaban. Sirvan de ejemplo la educación física a los alumnos de las aldeas, y, la creación de un Instituto Oficial de Enseñanza Secundaria en la localidad, cuya instancia se presentó al Ministerio con un estudio constructivo del Palacio Abacial y una memoria fotográfica con el fin de cederlo por su categoría artística. . Para ello encargaron los servicios técnicos del maestro de oEn ella puso en pie y defendió con ardor en las Cortes una obra educativa y cultural sin precedentes en España, en la que fueron protagonistas los más débiles: partiendo del concepto y del ideal de la “escuela unificada” se empeñó a fondo con la Enseñanza Primaria, creando escuelas, y dignificando la posición de los maestros, y llevó la cultura a recónditos pueblos y aldeas mediante las Misiones Pedagógicas. Reivindicó los derechos y libertades para todos y se manifestó abierto y tolerante cuando el país se enfrentaba intransigentes por la cuestión religiosa. Mientras este enfrentamiento se hacía cada vez más profundo, Fernando de los Ríos desarrollaba una intensa actividad en el Gobierno, que respondía a una concepción de la educación basada en idearios de la “escuela Única”, la instrucción como factor principal de la promoción social con base exclusiva en el mérito, la necesidad de su extensión como elemento decisivo del cambio social y la importancia de la neutralización ideológica mediante el laicismo3.
bras Manuel López Ramírez, el popular “Manuel de la Morena”, que elaboró un estudio y realizó unos planos con las posibilidades que ofrecía el edificio para ubicar este ciclo de enseñanza. Todo ello se envió, con un reportajes gráfico de Federico Suárez. Aunque ya no compartían las riendas municipales, su labor a favor de la educación, estaba clara por parte de Batmala y Fría. Respondía a los objetivos de este ministro: “
Pero, la política nacional no concordaba con el trascurso ni el ideario de los políticos actuales de la localidad. A regañadientes, seguían las peticiones al Ministerios en la creación del Instituto de Secundaria, preferían el apoyo al Colegio de la SADEL (Sociedad Anónima de Enseñanza Libre) que no era sino un modo encubierto de colegio religioso de segunda enseñanza mediante la acción combinada de instituciones religiosas y conservadoras. Por ejemplo, uno de los profesores era el futuro general Utrilla. Por eso, no les quedaba más remedio que denunciar y no apoyarlos, pues sus esfuerzos contra todo tipo de dogmatismo y a favor del laicismo quedaron en vano . Y tan sólo, los ataques de Batmala y Frías consistieron en obligar a la corporación a cumplir las disposiciones referentes a la sustitución de la Enseñanza Religiosa con motivo de la disposiciones que salían en la Gaceta4. En cualquier ocasión, tanto Frías como Batmala consideraban estas medidas muy relevantes desde su concepción laica de la sociedad. Fieles a la ideología de sus partidos, nunca la antepusieron a los intereses municipales, pues siempre trataron de buscar alternativas para paliar los problemas financieros que conlleva este avance educativo: así si se presentaba la deficiencia de locales, tenían la creatividad de proponer la transformación de los presentes o la compra de otros edificios, como en el caso de la propuesta de las nuevas Escuelas Nacionales, y siempre pensando en no endeudar al ayuntamiento5. Tan sólo, quedó en papel aquells buenas intenciones de los concejales republicanos plasmadas en una visita que se llevó a cabo a Madrid para gestionar la creación del Instituto Nacional de Enseñanza Media. Pero esto fue un canto de cisne, pues ni lo compartían los neuvos gobernantes y era un válvula de escape para acallar las pasiones de los republicanos más convencidos6.
Cada debate nacional repercutía en la localidad, si en el mes de febrero Lerroux declaraba la guerra abierta al gobierno de la Nación, y sus partidarios se atrincheraban en medidas regresivas en el gobierno municipal, la oposición de los socialistas y Batmala se quedaba simplemente en la postura de denunciar cualquier asunto local desde la óptica de las nuevas medidas progresistas como la de la ley de Confesiones o Congregaciones Religiosas


Parecía como si estos conflictos se generaran por influencia externa. Pero el campo esta abonado para ruptura entre los dos bandos. El último incidente lo ocasionó un asunto ajeno a la vida municipal, personal, un caso de tráfico de influencias. Fue con motivo de un cambio de personal en la Oficina de Colocación Obrera. Esta se había ubicado en los bajos del Palacio Abacial, y Callava funcionario local, recibía a los obreros para componer las listas y solicitudes y ofertas de trabajo.


1 ACTA DE LA COFRADÍA DE LA VIRGEN DE LAS MERCEDES. 29 de junio de 1933. Era por aquel tiempo, hermano mayor José Utrilla Utrilla, depositario Vicente Huertes Grande y el resto de los cofrades formaban parte de familia Utrilla, Laguna, Sierra, y propietarios como Juan Zafra, Manuel Izquierdo, Antonio Pérez Serrano , Juan Villén y Manuel González,. También como sacerdotes Luis Fernández Torres y Antonio Montañés..
2 AMAR. Acta Del 5 de mayo de 1933
3 CÁMARA VILLAR, Gregorio. Fernando de los Ríos, el intelectual y el político en la II República en Los parlamentarios andaluces en la II República. 2002. Parlamento de Andalucía..
4 AMAR. Acta del 14 de julio de 1933
5 AMAR. Acta Del 3 de noviembre de 1933, Frías solicita ayuda al estado para implantar la sustitución de enseñanza religiosa, sin perjuicio que haga el ayuntamiento lo posible.

6 AMAR. Libranza de 23 de agosto de 1933. Rcoge el viaje de la comomisión de a Madrid de 14 de julio de 1933.

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