DIARIO DEL RUTERO POR CÁDIZ (ii)

Madrugamos para marchar a Baelo Claudia. Por la autovía, entramos en el parque de la bahía de Cádiz, bordeando San Fernando, Chiclana, Barbate y Conil. T opamos con Vejer de la Frontera. Entre canales de agua de mar, playas a la vista, pinos, alguna que otra dehesa. Y molinos de viento. Y, tras Vejer, un primer susto, una vaquilla cruza la carretera que nos conduce a Baelo Claudia, Con media hora de adelanto, entramos al museo de la ciudad. Media hora nos detuvimos en la maqueta de la ciudad romana, urbanismo de damero a lo Vitrubio. Y luego, en la sala de abajo: inscripciones, cañerías de plomo, lucernas, urnas funerarias, terra sigilata, el homenaje al arqueólogo....Emprendimos la marcha por el acueducto y nos adentramos por muralla sur hasta llegar a la puerta de cardo que atravesaba la ciudad, bajamos a la zona del garum, las pozas, la fábrica, la decantación, y subiendo por  la decumana llegamos a los basílica , los baños, y el mercado. En lo alto el campo de Marte (?) y el teatro, el foro, las tiendas o tabernas, el Isiaco, el templo dedicado a la Tríada capitolina, la curia, tabulario , escuela y regreso. Comida en zona de camping y ambiente taurino

Luego , en dirección a Tarifa, nos adentramos por el camino del castillo de Guzmán  Bueno y legamos a la plaza de la biblioteca y al mirado, desde donde se contemplaba ciudades de África. En la ciudad, nos enredamos con las máscaras carnavalescas y el bullicio de un día de fiesta pasando por la iglesia de san Mateo y de la Cárcel.

Había perdido una gorra,  cual fue mi sorpresa, cuando Juanna,  Pablo y Lucía me brindaron una alegría inconmensurable. Me regalaron una gorra. A ellos van estos versos:


En este block de pasión desbordada,l
presiden tres rosas de gran candor,
Juanma, Pablo y Lucía, una sola flor,
y pétalos de inocencia inmaculada.
En estas páginas, cerca de ensenadas,
bordeando el Océano con furor,
regaláronme una gorra con amor
unas manos de gracias otorgadas.
Lucía donó óbolos y denarios,
Pablo, las rentas de salazones
y Juanma completó con ases suntuarios,
testigos de fenicios y corsarios,
bello crisol de maternos amores
y joyas de sinceros corazones.


A lo que rematé con ese estrambote 


Gracias os doy,
gracias os debí,
en Jerez un convoy,
y un zoo en Caí.
Y si no pudiera,
seguro os ofrezco
un gran elixir,
contaros un cuento
sw Muza y Alí.
de Alcalá la mora,
o allá en el Cauchil
una noche en la Mota
en el mes de abril.

Por la tarde, entramos por san Fernando en Cádiz. La guía Cristina nos brindó una visita a partir de las cinco de la tarde desde el puerto hasta la catedral, pasando por la plaza del Ayuntamiento, barrio del Pópulo , casa del Almirante, placeta de las Flores, casa de Correos, Mercado....para hacer una visita profunda de la catedral. Por sus capillas, la girola, el mausoleo, la custodia, los santos patronos, el coro, ....y hasta la huella de nuestro obispo  Ceballos.

Regresamos de noche, a plaza del ayuntamiento con una cerveza y pasamos por el nuevo puente de la Pepa, o de la Constitución el 1812. 

De allí a Jerez, impresionante muestra del nueve puente.