Tras las desamortizaciones.
Cuando Madoz describe en 1950 la riqueza de muchos
pueblos de España, los municipios de la Sierra Sur, algunos de ellos
recientemente emancipados de la cabeza e
partido( Castillo y Frailes, de Alcalá; los Villares de Jaén; y la Fuensanta,
de Martos) ofrecen el panorama que vamos a describir.
En la parte accesible de la sierra de Ahillos hay
materia de vegetación, y se encuentran en ella, además, de muchas yerbas medicinales, viñas,
olivares, tierras calmas, monte de encina y quejigos. En las faldas de la
Acamuña estan cubiertas de arbolado,
entre los que se ven olivos, viñas y algunas encinas....a la falda de la
Acamuña hay una elevación que se denomina las canteras. Pues de allí se sacan
las piedras de molino.....hasta llegar a las sierras de la Martina y
Rompezapatos, a la que con más propiedad llaman Hijuela de la Martina....están
peladas en sus cimas, pero a las pocas varas ya hay vegetal, y se ven plantíos
de olivo, viñas y monte alto y bajo y se siembra toda clase de cereales siendo
de muy buena calidad, lo que se llaman semillas, como garbanzos, lentejas,
yeros etc. .....toda la parte oriental
de la periferia de este partido, está cubierta de sierras y montañas, y aunque
su lado occidental se considere más llano, es sin embargo un conjunto de
colinas cortadas por barrancos, cañadas y vertientes de aguas llovedizas, de modo
que son muy pocos los terrenos llanos que se encuentran en todo el partido...
en todos los términos del Castillo y Alcalá, fue un bosque de monte espeso, que
apenas se podía penetrar, llegando los árboles
los árboles a esta misma población, pero en el día sólo se encuentran
árboles de esta clase diseminados en el campo, habiéndose desmontado casi todo
para el mejor aprovechamiento de las tierras y de la leña para combustible y
carboneo . En los términos del Castillo y Alcaudete hay grandes pagos de olivar
formando una tierra que atraviesa el partido de Este al Noroeste y escelentes
pagos de huertas en las márgenes de los ríos... el Frailes da impulso a varios molinos harineros...el
del Castillo se separa la mayor parte de
sus aguas, que dirigidas por un cax o
cauce, sirven para regar toda la orilla derecha del río y dar impulso a un
molino harinero de 5 piedras, otro de aceite y un batán, entra luego después de
mover un molino de 3 piedras en el término de Alcaudete....las producciones se obtienen con exceso los
productos agrícolas y de ahí que se exporta trigo, cebada y demás cereales,
legumbres y aceite, se importa parte las carnes, que se consumen, pescados,
naranjas, batatas y demás frutos exóticos. Los precios del trigo y aceite en
años comunes son de 30 a 40 reales en fanega y arroba.
Sin embargo, el análisis de cada municipio difiere
de estas conclusiones generales de la Sierra en algunos aspectos.
En Alcalá la Real, contrastaban los 17 molinos
harineros frente a los dos de aceite ( uno en Alcalá y otro en Santa Ana) y
fruto del paisaje urbano de siglos anteriores, hablando de las casas de tres
pisos y un gran patio, se refiere el carácter testimonial del olivo en diversos
apartados, pues, cuando trata de ellas
dice que
tienen en su mayor número grandes
patios y en los mismos hay algunos olivos o chaparras, y muy pocos frutales, siendo escasa el agua
para regarlo, aunque se calcula que las dos terceras partes de las casas tienen
pozo. Salvo el olivar de riego
escaso y concentrado en las Riveras, Palancares y algunos pagos que rodeaban
las fuentes, el de secano se encontraba de la siguiente manera que vamos a
sintetizar: los lugares de Charilla,
Santa Ana, Caserías, Grajeras y la Rábita eran los únicos que producían aceite
junto con los del ruedo en una cantidad que no alcanzaba las 1.500 arrobas
frente a las 20.000 arrobas de vino. Muchos de ellos estaban entremezclados con
viñas, como era el caso de las Caserías
con dos pagos con algunos olivos, y la
mayoría de terrenos de las aldeas que eran montes que comenzaron a roturarse,
pero que, debido a que sólo en los primeros años pudieron sacar algunas
cosechas de cereales, en los años cincuenta se encontraban abandonados y
preparados para ser plantados de olivos
por los colonos, como acontecía en Charilla, las Grajeras, Mures y Riveras-
estos dos últimos tardarán algo más en ver aparecer el olivo-. Esto obligaba al
municipio de Alcalá a importar aceite de los territorios cercanos, sobre todo,
de Castillo de Locubín, Alcaudete, Martos y los Villares. Un cuadro comparativo
con el viñedo, el olivar u los productos de secano( esencialmente, los
cereales) nos ofrecería el siguiente aspecto:
LUGAR
|
REGADIÓ
|
SECANO(2ª Y 3ª)
|
VIÑA
|
OLIVAR
|
SECANO 1ª
MONTE
|
Ruedo Alcalá
|
50
|
2.700
|
600
|
350
|
800/
|
Charilla
|
70
|
5.150
|
600
|
100
|
80/100
|
Santa Ana
|
50
|
8.100
|
500
|
300
|
50/30
|
Ribera
|
150
|
3.430
|
|
60
|
150/400
|
Mures
|
|
3.480
|
|
|
30/500
|
Ermita Nueva
|
230
|
1.550
|
|
|
230/1.000
|
Cantera Blanca
|
130
|
3.700
|
|
|
130/1.300
|
Valdegranada
|
150
|
1.450
|
|
|
150/200
|
Hortichuela
|
10
|
3.250
|
|
|
10/500
|
Caserías
|
200
|
3.578
|
|
500
|
/200
|
Fuente Álamo
|
|
800
|
|
|
/300
|
Grajeras
|
|
1.000
|
|
400
|
|
Rávita
|
|
2.930
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
TOTAL
|
510
|
38.388
|
1.700
|
1.820
|
1.800/4.930
|
En el Castillo de
Locubín, el olivar se extendía por la mayoría de sus extensiones, salvo
por el oeste y las faldas de la sierra Ahillos, en el paraje de Encina Hermosa,
y en los valles dedicados a los productos hortofrutícolas, incluso alguna buenas fincas ofrecían una aspecto vairopinto, como la
casería del Vadillo, antigua memoria de
los dominicos para sostener una cátedra
de latinidad, que ahora era servía para
dotación de profesores de instrucción pública y llegaba a poseer una casería compuesta de
olivares, molino de aceite y casa de campo. Los molinos de aceite superaban la
cifra de diez y a los cinco mencionados a principios de siglo se añadieron el
del Palomar, propiedad de don Camilo
Álvarez Izquierdo, el de la Hontana, de
Juan Castillo Aranda, y los dos del campo ( uno en la Casería de los
Frailes y otro en la Casería de la
Esperanza). Entre estos, siete dentro del pueblo y el resto en el campo; y sobre la importancia del molino del Conde
Humanes, antiguo molino de los Aranda en
el caza del río cuenta que
“siendo
notable entre estos molinos harineros el que se dijo reunía al propio molino
harinero, que si tuviera bastantes pasos para esprimir aceite, bastaría por sí
sólo para producir las 8.000 arrobas que por un quinquenio se cogen en el
término, con su enorme rulo movido por el agua: llámase este molino de la Torre
y es la propiedad del conde Humanes”
La cantidad de aceite, que producían todos estos
molinos, autoabastecía al Castillo y el sobrante se exportaba a Alcalá y
Málaga. Era una consecuencia lógica de las medidas desamortizadoras, que, en
Alcalá, Frailes y Castillo, se habían iniciado anteriormente, pues las tierras
de Propios y comunales quedaron en su mayor parte en poder de los pequeños
propietarios mediante un sistema de censo perpetuo, impidiendo en muchos casos
la llegada de postores forasteros. Incluso , en algunos grandes cortijos de
propios, se partieron las parcelas para que no se vieran afectadas por las
subastas del Estado y así mantenerse en manos de los pequeños y medianos
agricultores.
El sistema de producción se nos describe por Álvarez
de Morales[1], con
estas palabras:
“Todos ellos
eran movido a sangre, con molederos de un solo rulo de piedra de jaspe rojo de
la Coronilla, del que tiraba una bestia. En el centro del moledero se apoyaba
una viga vertical a la que estaban unidos la tolva y una plataforma, que
giraban con el árbol, y sobre la que subía al molinero con la canasta al hombro
para llenar aquélla. Cada veinte canastas hacía una mula o molinada, y cada
molinero solía hacer dieciséis muelas en veinticuatro horas. Las prensas eran
de viga- el modelo romano- hechas no hace muchos años, pues todavía nosotros
alcanzamos a verlas funcionar en el molino del Conde de Humanes, y nos
encantaba la tarea de los molineros haciendo girar el husillo de madera para
levantar el contrapeso de piedra que tenían a un extremo...Muy tardíamente
llegaban las mejoras de esta industria a nuestro pueblo, pero con el tiempo se
fueron instalando prensas perfeccionadas que llamaban de torrecilla; otras
decían de rinconera, y otras de brevas. Todos aquellos ingenios se movían a
brazo de su parte superior, que descansaba sobre los capachos, y sacando el
mejor partido posible del trabajo de los hombres que las manejaban”
En Alcaudete, estaba claro que el panorama era diferente, porque en sus 30.000 fanegas,
tenía 570 fanegas olivares de regadío y
1.300 de secano, de excelente calidad en las faldas de las sierras ( San Pedro
y Ahillos) frente a las 260 fanegas de viñedos. Sus 10.500 arrobas de aceite ,
en parte, se exportaban, mientras se veía obligado a importar vino. Los 27
molinos de aceite se distribuían así: seis en el interior de la villa, 11 a las
afueras y 10 en los cortijos y en los pagos de olivares del Becerro, fuente de
la Zarza, Sierra Ahillo, Esteban Sánchez, San Antonio, Carchalejo, Zarzalilla y
tres en el altar de san Pedro. Eran de dos vigas en su mayoría, algunos incluso
de tres vigas y muy pocos de prensa, movidos por dos mulas.
En Frailes, el terrenos abrupto y pedregoso, por
aquellos tiempos ofrecía pocas posibilidades al olivar, que se concentraba a
las faldas de los cerros de la Martina, el Cepero y el Chaparral, hasta tal
punto que la población se autoabastecía por medio del aceite producido en los
cuatros molinos aceiteros, situados a las afueras de la población, y uno de
ellos a un cuarto de legua, importando cierta cantidad de Alcaudete y Castillo
de Locubín.
En la Fuensanta de Martos, en su terreno de monte y apropiado para la
plantación de olivos, se desarrollaba una fase contínua e intensa de
roturaciones, alcanzando el arbolado la cantidad de 8.000, aunque no fueran en
los terrenos de buena calidad. No obstante, producían 3.000 arrobas de vino
y el arroyo del Víboras movía algunos de
los tres molinos aceiteros de dos vigas cada uno.
Algo parecido sucedía con los Villares, situado al
sur de la capital de Jaén en un lugar donde se reunían varios arroyos del
término judicial de Jaén y que solía exportar aceite a varios lugares
comarcales, entre ellos Alcalá., pues era su principal fuente de recursos. El
Ríofrío, que nace a la umbría de la Pandera, salen de él varios cauces que
feritilizaban por los años cincuenta del siglo XIX, terrenos de siembra y de
olivos, tambien movía las máquinas de
algunos molinos aceiteros
En el Noalejo , con un terreno aun mas abrupto que
en los anteriores, se veía obligado a importar el aceite sin , ni siquiera, la
presencia de un molino aceitero.
En Valdepeñas,
la situación era similar al anterior, con un terreno montañoso e
irregular y pocos de primera calidad. Sin embargo la presencia del olivo venía
de tiempos atrás y existían cinco molinos
aceiteros, uno de ellos era propiedad de la memoria del capellán del Cristo de
Chircales, traspasado en 1822.
Años
más tarde el ayuntamiento alcalaíno nos describe el progreso del olivar en las tierras de la Sierra Sur.
Un registro de las profesiones e industria de Alcalá la Real es significativo
para comprender su avance, que provenía de la rentabilidad producida por los
antiguos olivares que se iniciaron con el reparto de las tierras
cesionarias en tiempos de Carlos III
y con las desamortizaciones de terrenos
religiosos que se habían iniciado en los últimos años del siglo XVIII en
tiempos de Godoy. En 1852, en concreto,
un Real Decreto del 20 de Octubre, obligó a todos pueblos a la extensión de la
matrícula industrial y artesana y en Alcalá se aplicó ofreciendo un panorama
sumamente agrario de predominio del grupo de labradores, pequeños campesinos y
gran número de jornaleros frente a un pequeño núcleo de artesanos. El siguiente
cuadro compara las dos principales actividades de industria agraria comarcal;
los molinos de pan y de los aceite en el año 1854, reflejándose el claro contraste de una tierra en la que
todavía el cereal era predominante y el olivar, por otra parte, comenzaba a despertar. Su rendimiento se
basaba en los molinos de prensa en una
cantidad de 140 reales y no excedía su periodo de elaboración de la aceituna
los cuatros meses, mientras los de viga, que eran pocos no llegaba a cincuenta[2].
Molinos de Harina
|
Molinos de Aceite
|
Antonio Alcaide/ dos piedras/ Ribera
|
Don Antonio León/ una prensa/ Santa
Ana
|
Francisco Hidalgo/ dos piedras/
Ribera
|
Don Antonio Serrano/ dos prensas
/Santa Ana
|
Miguel Ibáñez/ dos piedras/Ribera
|
José María Cano/una prensa/ Ermita
Nueva
|
Juan Romero/ dos piedras/ Ribera
|
Doña Teresa Romero/dos vigas/Grageras
|
Domingo García/ dos piedras/ Ribera
|
|
Valentín Peñalver/ dos Piedras/
Ribera
|
|
Miguel Ibáñez/ dos piedras/ Mures
|
|
Pedro Alcántara/ de cauce/ Fuente Rey
|
|
Antonio Sarmiento/ dos piedras/Santa
Ana
|
|
José Cano/ dos piedras/Ermita Nueva
|
|
José Cañadas/ dos piedras/ Charilla
|
|
Antonio Ibáñez/ dos piedras/ Mures
|
|
Antonio Bolívar/ dos piedras/ Cantera
Blanca
|
|
De nuevo,
las medidas desamortizadoras provocaron algunas inversiones y la transformación
de muchos terrenos baldíos e, incluso, de secano en olivares, a mediados
del siglo XIX, denominándose aquellas
plantaciones como nuevas frente a los viejos olivares que pervivían sobre
todas las epidemias en las cimas de las montañas y en las
cabezadas de los cortijos. En 1865, con motivo de aumentar el número de
guardas, el ayuntamiento alcalaíno envió un informe al Gobernador Civil, en el
que manifestaba que en las 47.919
fanegas cultivadas existían 12.000 pies de olivo y y más de 12.000 en el monte
alto, cuya renta sumaba 909.080 escudos. Claro ejemplo es esta manifestación de
este acuerdo municipal del año 1878 con
motivo del amillaramiento de la riqueza para el impuesto del consumo[3]:
“.No son lo mismo en
éste, donde ni existen coto, en
que pueda utilizar caza ni carbonos, ni hay fincas, que hayan disfrutado de
exención y que en el día no les comprenda; que si bien es cierto se están
haciendo plantaciones de olivos, de las modernas, data la más antiguas del 1868
y por consiguiente que el aumento de tributación no tendrá aún efecto en una veintena de años
ni hay...”.
Finales del siglo XIX
Como
decía Juan Carlos Maroto y Eugenio
Cejudo[4], en
la comarca de la Sierra Sur se produce el mismo fenómeno agrícola de la
provincia de Jaén:
“Este es,
sin lugar a dudas , el salto cualitativo
y cuantitativo más importante de la evolución de las superficies de los
cultivos agrícolas en nuestra tierra. La trilogía
cereal, olivar, viña, característica del mundo mediterráneo, pasó a ser binomio
cereal-olivar a finales el siglo XIX y este binomio ha sufrido un fuerte cambio interno para
convertirse en olivar-cereal a finales del siglo XX, y muy presumiblemente tenderá a un mayor
monocultivo olivarero en el siglo XXI”.
Este cambio, relacionado con la extensión de los
olivares, se percibe en el progresivo aumento de actividad
molinera que va desde los dos molinos que procedían del siglo XVII hasta los más de catorce molinos que
existían, por ejemplo, a finales de siglo en
pueblos como Alcalá la Real, o, los que creemos excesivos de más de una
decena en pueblos como Frailes, a no ser que se incluyeran los molinos de pan
que comparten en muchas ocasiones las dos funciones de la molienda del aceite y trigo. Ciñéndonos a datos
concretos, en 1876, en Alcalá, era
medida obligada el control de la actividad molinera por parte de la autoridad
municipal que daba la licencia de apertura y cierre, casi siempre, en los meses
primeros del año. El siguiente cuadro refleja los propietarios alcalaínos en
varios parámetros[5]:
Propietario
|
Fecha de inicio- final
|
Tipo de molino
|
Lugar
|
Utilidad
|
Zona de influencia
|
Miguel Siles
|
2-27 febrero
|
Prensa de torrecilla
|
Casería del Águila
|
Particular y otros propietarios
|
Pedriza y Cantera Blanca
|
José Oria
|
15 de enero - 15 febrero
|
Prensa de hierro
|
Vereda del Carmen
|
Uso público
|
Casco urbano de Alcalá la Real
|
Buenaventura Sánchez Cañete
|
26 de enero- 29 de marzo
|
Máquina de husillos
|
Cruz de Villena
|
Su propia cosecha
|
Sus propias explotaciones
|
Pedro González
|
12 de enero – 28 de febrero
|
Una prensa
|
Tierras de Charilla
|
Su propia cosecha y otras
|
Charilla
|
Vicente García Taheño
|
13 de enero-28 de febrero
|
Prensa de Torrecilla
|
Charilla
|
Varias cosechas
|
Charilla
|
Diego Jiménez Cuenca
|
10 de enero -25 de febrero
|
Prensa antigua y torrecilla
|
Ribera Baja
|
Varias cosechas
|
Riberas
|
· Francisco Asís Romero
|
· 6 de enero- 20 de febrero
|
· Prensa de tornillos
|
· Grageras
|
· Propia cosecha
|
· Fuente Álamo, Grajeras y Rábita
|
· José Sánchez Nieto
|
· 6 enero-29 de febrero
|
· Prensa torrecilla
|
· Santa Ana
|
· Propia
|
· Santa Ana
|
· Todos estos molinos debían proceder de
otros más antiguos, los hermanos Carpio[6] han
realizado un estudio e uno de ellos, el de San Vicente de la Grajeras,
propiedad de Francisco de Asís Romero,
que fue heredado de María de Mercedes Castillo, propietaria de la casería en
1864. Tenía en la hacienda rural, una casa, un horno de pan y la mitad de un
molino aceitero con prensa, torrecilla y todos su útiles concretos. Seguía el
esquema de los molinos de torrecilla, estaban provistos de un patio, nave de
fábrica, y bodega. El primer molino tenía un solo rulo, y fue sustituido por
otro de dos rulos, con prensa con su torre, espacio para la caldera y espacio para el pesebre de animal de tiro.
Había una espacio para construir una prensa hidráulica . La torrecilla era de
dos metros y su total altura desde el suelo de 5 metros con unas abrazaderas de
madera y rodillos que la guían .Los elementos de la prensa, rueda de husillo ,
sombrerillo con su aro( éste de hierro)
y el husillo eran de madera y de
construcción rudimentaria.
· Así, el paisaje rural y el aumento de la
población de la Sierra Sur habían notablemente
cambiado a finales del siglo XIX, desde que lo describió Madoz, pues Riera en el
Diccionario Geográfico tratando acerca de las sierras alcalaínas, manifestaba que el olivar ya figuraba en primer lugar y la
filoxera comenzaba a incidir en muchos viñedos. Aunque es demasiado aventurado
en la descripción de algunas producciones, recogemos de su obra que su terreno,
calizo, arenisco, gredoso en los montes y arcilloso en los valles, daba unos
cereales de gran calidad- sobre todo, trigo y garbanzos de gran calidad.,
aceite, vino. Ias verduras, hortalizas, anís, lino cáñamo y bellota, que solían
exportarse a Granada, Málaga y su costa salvo el aceite. Eran los momentos en los que comienzan a dar
sus primeros frutos los olivares, que por esta tierra denominan de mala casta o castúos. Entre ellos, el verdial,
carrasqueño y picúo ocupaban las zonas
más abruptas y pedregosas de las dehesas roturadas junto con otras más exóticas
como el negrillo, ojiblanco y cordobés, o , las variedades muy
apropiadas para la aceituna de mesa como el cornachelo y la arola, reservándose
para las zonas de menor altura, alrededores de los Llanos, y dehesas cercanas a
la ciudad, las diversas variedades del
picual, muy extendido por la provincia de Jaén ( que por esta zona
denominan marteño o nevado en sus
diversos subtipos)[7]:
· “La madre de todas estas sierras es la caliza,.... sus cimas están
desnudas de vegetación, pero a corta distancia descendiendo, tienen ya tierra
vegetal y se ven poblados de plantíos de olivos, viñas, monte alto y bajo y
siembra de todas clases de cereales y semillas; produciendo a la vez variedad
de arbustos y yerbas medicinales, entre ellas, cedoalia, salvia. Verbena,
cinoglora. Centaurea, ruda, romero, grama, ci cuta, cinoglosa, amapola, tártago
y otras infinitas...
· Cuando César Picatoste[8]
resume en su Guía Oficial de Jaén y provincia del año 1893, la producción de
Alcalá, refiere que además del trigo y otros cereales, el aceite y el vino
abundan en la comarca, y ofrece un dato significativo, a saber, los antiguos molinos de aceite se han
convertido en dos fábricas de harina y
se han consolidado nueve molinos de aceite.
· El panorama de Alcaudete es semejante a
anteriores descripciones, pero ya se cita que su principal fuente de riqueza es
la madera de los nogales, aunque existen muchos molinos. Sin embargo, en
Frailes la elaboración de aceite y vino era abundante gracias a la producción que comenzaba a rentar en los
pagos roturados. En Fuensanta, una población en alza, el olivar, única fuente
de riqueza había alcanzado muchos terrenos y
los molinos de aceite continuaron aumentando
· En el Castillo de Locubín, se reflejaba perfectamente el carácter
finisecular a medio caballo entre el tradicionalismo
artesano y la nuevas tecnologías industriales. Por un lado, el aumento de
producción aceitera se veía se veía
obligado a multiplicar las industrias para molturar la gran cantidad de
aceituna producida, pues los viejos molinos de viga apenas podían molturar 50
fanegas de aceituna diarias, a las que no se sacaba una buena calidad y con un
sistema de trabajo interminable que prolongaba la campaña hasta el mes de mayo.
Esto dio lugar a que las industrias molineras llegaran a alcanzar la veintena de ellas. Para ejemplificarlo,, exponemos el
siguiente cuadro comparativo:
·
Lugar
|
·
Molino
|
·
Tipo
|
·
Renovación 1900
|
·
Actual
|
·
Cantón
|
·
Las Monjas
|
·
Viga
|
·
|
·
|
·
Caño
|
·
Trinitarias
|
·
Viga
|
·
|
·
|
·
Calle Siles
|
·
Vicario
|
·
Viga
|
·
|
·
|
·
La torre
|
·
Conde de Humanes
|
·
Viga
|
·
Fábrica de Aceite
|
·
|
·
C.Fernando Ruiz
|
·
Obra Pía
|
·
Viga
|
·
|
·
|
·
Palomar
|
·
Camilo Álvarez
|
·
Viga
|
·
|
·
|
·
La Hontana
|
·
Juan Castillo Aranda
|
·
|
·
Fábrica Orujera 1920
|
·
|
·
Ermita Veracruz
|
·
Medina
|
·
Viga
|
·
|
·
No existe
|
·
Viñuelas
|
·
Castillo
|
·
Viga
|
·
|
·
Manuel Peñalver
|
·
Viñuelas
|
·
|
·
Viga
|
·
Fábrica de aceite
|
·
No existe
|
·
Viñuelas
|
·
Morales
|
·
Viga
|
·
|
·
No existe
|
·
La hontana 2
|
·
Antonio Castillo
|
·
Viga
|
·
Fábrica
|
·
Cooperativa san Isidro
|
·
Barrio Bajo
|
·
Aranda
|
·
Prensa de brevas
|
·
Prensa de brevas
|
·
Existe
|
·
El Cubillo
|
·
Isacio Castillo
|
·
Prensa de brevas
|
·
Fábrica de aceite
|
·
No existe
|
·
La Rueda
|
·
Rafael Álvarez
|
·
Fábrica
|
·
Fábrica
|
·
Cooperativa San José
|
·
La Sierrezuela
|
·
Manuel Paguilla
|
·
Viga
|
·
|
·
|
·
Gitana
|
·
Patalanco
|
·
Viga
|
·
|
·
|
·
Salina
|
·
Antonio Santaolaya
|
·
Viga
|
·
|
·
|
·
Carrizal
|
·
Utrilla
|
·
Viga
|
·
|
·
|
·
Carrizal
|
·
Vico
|
·
Viga
|
·
|
·
|
·
La Nava
|
·
Remigio Rodríguez
|
·
-
|
·
- mediados siglo XX
|
·
|
·
Fábrica Orujera y de Jabón
|
·
Sociedad Álvareaz Hermanos
|
·
|
·
1920
|
·
|
§ Saenz
Lorite[9] recoge con acierto toda la evolución de estas tierras,
incluyéndolas en el surco intrabético , y
la expansión del olivar de la siguiente manera:
· “A lo largo de la Edad Moderna se va a producir una lenta
transformación de este sistema, cuyos hechos más significativos son las
roturaciones incesantes, la subdivisión contínua de los bienes libres frente a
la concentración de los inmovilizados( iglesia y mayorazgos) y la incesante
presión demográfica que acelera a su vez elproceso de colonato en tierras
señoriales y en las dehesas comunes, -tal como es el caso de la Sierra Sur-. Las desamortizaciones decimonónicas pusieron fin a las
amortizaciones del terrazgo, pero a la vez liberaron nuevos espacios para
roturaciones que se dedican ya de modo contínuo al olivar que acaba por
constituir un verdadero monocultivo, salvo los regadíos autárquicos y algunas
áreas de suelos no aptos o reservados para el autoabastecimiento”.
[2] AMAR. Caja 329. Legajo 11.
Registro de las profesiones e industrias
que hay en esta ciudad, con expresión de los sujetos que la ejercen. 1854.
[4] MAROTO MARTOS, J.C. y
CEJUDO GARCÍA, E. Caracterización de la
provincia , comarcas y municipios jiennenses
en base de la superficie ocupada por los grandes aprovechamientos
agrarios y por los principales cultivos agrícolas en 1989. Boletín de la
Cámara de Comercio de Jaén.1990.
[5] AMAR. Caja 334. Legajo 6.
Partes de Molinos 1876.
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