Pero, por una
memoria de la capellanía de la parroquia de Santa María
“Ana Martínez
Pareja vivía en casas, tiendas y dos moradas a ellas anejas en las
Entrepuertas, que los miradores suben al Albaicín, linderas con tiendas de
Catalina de Aranda y Teresa de Ávalos”.
El Matadero era un edificio primordial de este lugar,
donde se encontraba un compartimento
con un solo cuerpo, donde se
romaneaba, un patio con varios nogales,
y, otros cuartos de encerramiento
para los animales y se llevaban a cabo los primeros momentos de la
matanza de animales.
El Arrabal
Nuevo partía de una serie de
edificaciones anteriores con destino a alojamiento de pasajeros y viviendas de nobles de la ciudad. En
concreto, los mesones ya existían en
aquel paraje por los siglos XIV y XV, como lo demuestra este testimonio
del comentando Sancho de Aranda en una
reyerta entre los Monteses y Aranda:
”Los cuales,
como hallaron rebato falso, y se volvieron
hallando así mismo las puertas
cerradas, hovieron de dormir aquella
noche en los mesones, y otro día tuvieron que partir para Córdoba”.
Por su parte,
En el polo opuesto de la
puerta del Arrabal, se amplió el barrio con la calle del Rastro.
Esta ofrecía unas importantes
dimensiones diferentes a las del resto de las calles internas y externas
del barrio de Santo Domingo, tal
como se desprende de este acuerdo municipal.
“Se arrecifará el Rastro, desde
Por una capellanía, podemos afirmar la localización de
la calle:
-El clérigo Alonso Sánchez de
Pasadas tenía casas en la calle del Rastro que subía a
La calle Cava esta muy ligada a la muralla, donde destacaba en
ella la torre de Herrera, y hay noticias de que una parte de de las murallas de este arrabal estaba almenada, en concreto por la parte, que llamaban de Cava Vieja, que
era un conjunto de casas adosadas, de adarves y escaleras que se
intercomunicaban con la muralla y en la que vivían algunos clérigos en el siglo
XVI, como los bachilleres López Montijano y Jiménez. Tenemos un acuerdo de
cabildo de muy interesante para su
ubicación y peligro en 1612:
“una torre sobre las casas de Francisco
de Herrera, que están en la calle de
El barrio de Santo Domingo se comunicaba con esta
calle a través de uno de los portillos
de la muralla que se cayeron y se ha recompuesto en el año 2002. Cercana estaba
la calle de Marinieves que revolvía con la puerta del Arrabal. Y, en alguna
ocasión, también cercano a este recinto de la calle Caba, se encontraba
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